- NeoFronteras - http://neofronteras.com -

Sobre zonas habitables

Un nuevo modelo redefine la zona habitable alrededor de otras estrellas. Las nuevas zonas están desplazadas hacia el exterior respecto a lo que hasta ahora se creía.

Foto
Fuente: Chester Herman.

Si sus problemas técnicos lo permiten, un año de estos nos despertaremos con la noticia de que el telescopio Kepler ha descubierto un planeta de tamaño similar a la Tierra en la zona de habitabilidad de otra estrella similar a nuestro Sol. Más tarde quizás podamos tomar un espectro de la atmósfera de ese planeta y saber si efectivamente hay agua líquida o incluso si hay vida.
De momento nos tenemos que conformar con otros planetas rocosos en la zona habitable de sus estrellas. Pero, ¿cuál es exactamente la zona habitable? Por definición es la zona en la que un planeta puede tener agua en su superficie, una zona ni muy cercana ni muy alejada de su estrella. Estará definida por una distancia que no sea ni demasiado caliente ni demasiado fría.
Pero definir esas distancias no es fácil, pues fundamentalmente dependen del modelo empleado para calcularla. La zona habitable dependerá del tipo de radiación emitida por la estrella, pero también de la composición atmosférica del planeta.
Recientemente unos investigadores de Penn State dirigidos por Ravi Kumar Kopparapu han confeccionado un modelo mejorado cuyos resultados no se corresponden con lo que creíamos hasta ahora. Los nuevos resultados dan zonas habitables más alejadas de lo que considerábamos.
Esto tendría implicaciones para las supertierras que se han encontrado en otros sistemas solares. Algunas de ellas caerían fuera al ser demasiado cálidas y otras, que se creían eran demasiado frías, podrían ser habitables.
El nuevo modelo usa las bases de datos de absorción HITRAN y HITEMP que contienen información precisa de cómo se comportan el agua y el dióxido de carbono a la hora de absorber y reflejar radiación luminosa. Con esos datos en el modelo se creo un programa que se corrió en un supercomputador y esto permitió calcular las zonas de habitabilidad. Básicamente, el vapor de agua y el dióxido de carbono producen más efecto invernadero del que se creía, sobre todo para determinados tipos espectrales de estrellas.
Los resultados redefinen las posibilidades de habitabilidad de los exoplanetas descubiertos por la misión Kepler. Así por ejemplo, Kepler-22b parece ahora demasiado caliente.
Pero también tiene implicaciones para nosotros mismos. Según este modelo la Tierra se sitúa justo en el borde de la zona habitable, pero no tiene en cuenta la reflexión de la luz producida por las nubes.
Muchos factores pueden alterar la habitabilidad de un planeta. Además de la radiación recibida y de la composición y presión atmosférica, está la presencia de nubes. O también de su actividad volcánica, que inyecta tanto dióxido de carbono como aerosoles en la atmósfera.
Este modelo va ser por un tiempo el nuevo estándar en este asunto, pero probablemente sea reemplazado por otros aún más precisos.
La última palabra siempre la tendrán los espectros directos que podamos tomar en el futuro de esos planetas.

Hay una calculadora de zona habitable on line [1] en la que se puede “jugar” con la temperatura de la estrella y calcula la zona habitable.

Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=4020 [2]

Fuentes y referencias:
Nota de prensa. [3]
Artículo en ArXiv. [4]
Calculadora de zona habitable. [5]