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Adiós a las bifocales tradicionales

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Prototipo de gafas bifocales de cristal líquido. El producto comercial final será menos voluminoso. Foto: UA optical sciences.

Han desarrollado un nuevo tipo de gafas activas electrónicas de cristales líquidos que eliminan algunos de los problemas de visión asociados con el uso de las tradicionales gafas bifocales para individuos con presbicia.
El cristalino de los ojos, que es la lente que enfoca la luz sobre nuestras retina, pierde flexibilidad con el tiempo. A cierta edad se hace difícil enfocar de cerca, pero si además tenemos dificultad a enfocar de lejos necesitamos el uso de unas gafas bifocales, que fueron inventadas por primera vez por Benjamín Franklin hace más de 200 años.
Ahora un grupo de investigadores dirigido por Guoqiang Li y Nasses Peyghambarian de University of Arizona y sus colaboradores han diseñado un nuevo tipo de gafas activas que pueden cambiar de enfoque tanto a distancias cortas como a largas distancias de manera continua de forma muy rápida.
Los vidrios de las gafas se componen de dos láminas transparentes entre las que se dispone un líquido especial y sobre las que se deposita unos electrodos transparentes concéntricos. Al aplicar una carga eléctrica a los electrodos de 2V de diferencia de potencial se reconfiguran las propiedades ópticas de la lente en su conjunto hasta una condición adecuada de largas a las cortas distancias en una fracción de segundo. El sistema funciona de manera parecida a como lo haría una lente de Fresnel.
En las pruebas realizadas tanto en humanos como con sistemas electrónicos se ha podido apreciar que las imágenes conseguidas son muy claras y definidas. Los resultados han sido publicados en Proceedings of the National Academies of Science.
Si se produce un fallo en la alimentación del sistema las gafas retornan a la posición de distancias lejanas en las que las gafas no enfocan, para que si se da un fallo de estas características mientras se conduce no cause un accidente.
La compañía PixelOptics de Virginia pretende comercializar este tipo de gafas en unos dos años. Se necesita desarrollar el sistema hasta que sea lo suficiente ligero y pequeño como para ser incorporado en una montura al uso.
Se está ahora trabajando también en un sistema más avanzado que, gracias a un rayo infrarrojo, mida la distancia a la que se mira y reajuste el sistema a un enfoque apropiado a la distancia medida. Sería similar al sistema autofocus de algunas cámaras fotográficas.

Referencia:
Li G., et al. Proc. Natl Acad. Sci. USA, doi:10.1073/pnas.0600850103 (2006). (resumen [1])