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Expertos en clima empiezan a estar preocupados por la posibilidad de que el efecto invernadero esté aumentando la fuerza de tormentas y huracanes, aunque su número parece mantenerse constante.
Kerry Emanuel del MIT (Massachusetts Institute of Technology) demuestra que la duración e intensidad de huracanes y tormentas han aumentado en un 50% desde los años setenta.
Esto parece estar ligado al aumento de la temperatura superficial de los océanos debido al cambio climático que hace aumentar la temperatura del planeta.
Estas conclusión están basadas en datos reales en lugar de en modelos de ordenador que intentan predecir el clima futuro.
Los modelos de ordenador ya habían predicho este fenómeno, pero para un futuro más distante. Hasta ahora se creía que el efecto del calentamiento global no influía en el momento actual sobre estos fenómenos meteorológicos, y no se esperaba dicha influencia hasta el año 2050.
Estos resultados no están exentos de polémica porque otros investigadores dicen que los datos de los años 50 y 60, en los que se basa parcialmente la investigación, no son fiables.