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Huellas químicas de las primeras esponjas

Encuentran esteroides de esponjas que vivieron hace más de 635 millones de años, en el Neoproterozoico.

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Parece que últimamente se estén poniendo de moda los biomarcadores químicos en Paleontología.

Al caso de las cianobacterias de hace miles de millones de años o el de los seres ediacarenses que han dejado vestigios químicos en forma de colesterol se le suma ahora el caso de las esponjas que vivieron entre hace 635 y 660 millones de años.

Las moléculas orgánicas de origen biológico son frágiles, sobre todo las más complejas como queda ser el ADN. Esta es la razón por la que la premisa de la película Parque Jurásico nunca se podrá dar. Más de 65 millones de años es mucho tiempo para el ADN. Sólo sería plausible resucitar por clonación a los mamuts que vivieron hace unos pocos miles de años y, aún así, eso sería una empresa formidable.

Pero hay otras moléculas más resistentes que aguantan mejor el paso del tiempo, a veces tal cual y otras veces en forma de los subproductos químicos en los que se transforman.

El caso es que, gracias estos biomarcadores, se puede saber de la presencia en el pasado de ciertos seres vivos aunque estos no hayan dejado restos fósiles evidentes.

Ahora, un grupo de investigadores de University of California en Riverside ha encontrado biomarcadores que corresponden a ser multicelulares que vivieron 100 millones de años antes que cualquier metazoo fósil conocido hasta el momento. Han publicado un artículo con los resultados cuyo principal autor es Alex Zumberge.

Estos investigadores analizaron rocas del Neoproterozoico procedentes de los actuales Omán, India y Siberia. Lograron encontrar compuestos similares a los esteroides que normalmente son producidos por las esponjas. Esto confirma la idea de que las esponjas se encontraría dentro del conjunto de los primeros organismos pluricelulares en aparecer sobre la Tierra.

«Los fósiles moleculares son importantes para hacer un seguimiento de los primeros animales, ya que las primeras esponjas debían ser unos seres pequeños que no tenían esqueleto y que no dejaron fósiles bien preservados en los que se las pueda reconocer. Hemos estado buscando biomarcadores distintivos y estables que indiquen la existencia de esponjas y otros animales tempranos, en lugar de los organismos unicelulares que dominaron la Tierra durante miles de millones de años antes del advenimiento de la vida compleja y multicelular», dice Zumberge.

El biomarcador encontrado es un esteroide denominado 26-methilestigmastano (26-mes), que se sabe que es sintetizado por ciertas especies de esponjas modernas llamadas demosponjas. Este biomarcador tiene una edad de al menos 635 millones de años y demuestra que en esa época ya había seres multicelulares.

No es la primera vez que encuentran estos tipos de biomarcadores del Neoproterozoico, como cuando en 2009 este mismo equipo informó que se había encontrado 24-isopropilcolestano (24-ipc), pero este compuesto no sólo es producido por esponjas, sino también por algunas algas vedes. Así que este estudio anterior es un tanto controvertido. El nuevo hallazgo aporta una confianza extra a la hipótesis de que en aquella época ya había demosponjas.

El estudio proporciona nuevas e importantes limitaciones a los grupos modernos de demosponjas capaces de producir estos compuestos. Dentro de las mesosponjas ciertor grupos taxonómicos prefirieron producir esteroides de tipo 26-mes y otros 24-ipc.

Según afirman los autores, el haber encontrado ambos tipos de compuestos en rocas del Neoproterozoico nos dice que es improbable que se pueda atribuir a una rama asilada o extinta del grupo principal de las demosponjas.

La capacidad de sintetizar estos esteroides no convencionales posiblemente aparecieron en lo más profundo del árbol filogenético de las demosponjas, pero ahora esta capacidad la poseen amplios grupos de demosponjas modernas.

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Fuentes y referencias:
Artículo original. [2]
Foto: Paco Cárdenas.