La cantidad de mariposas vanesas de los cardos que hay en primavera en Europa está fuertemente influenciada por la cantidad de lluvia monzónica en el África subsahariana occidental durante el verano y el otoño anteriores.
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La mariposa vanesa de los cardos (Vanessa cardui) es una especie de lepidóptero de la familia Nymphalidae.
Es una mariposa grande (de 5 a 9 cm) de color naranja con puntas de alas en blanco y negro. Es una de las mariposas más extendidas del planeta, pues vive en todos los continentes excepto en la Antártida y América del Sur. Puede vivir en cualquier zona templada, lo que incluye las montañas de los trópicos. Solamente en Europa sus poblaciones llegan a decenas de millones de individuos.
Sus huevos tardan dos semanas en eclosionar y a la oruga le lleva de siete a once días en convertirse en una crisálida. A su vez, al cabo de otros siete a once días la crisálida se convierte en adulto.
El nombre le viene de que las mariposas adultas liban néctar de una gran variedad de flores silvestres, siendo la más común la flor del cardo. Las orugas se alimentan de una variedad de plantas de la familia de las asteráceas, especialmente de Carduus crispus [1]. Aunque también pueden alimentarse de las boragináceas y malváceas.
Es una especie migratoria. Como la mariposa monarca, la vanesa de los cardos emprende impresionantes migraciones anuales, una maravilla del mundo natural. Va desde el África subsahariana hasta Escandinavia y viceversa. Así que sus viajes de ida y vuelta pueden llegar a los 12 000 o 14 000 kilómetros.
Las mariposas adultas solo viven unas 2 semanas, por lo que las migraciones de las mariposas son necesariamente multigeneracionales, al igual que algunos han imaginado el viaje a las estrellas por parte de humanos. En este caso se requieren hasta seis generaciones. Vuelan a grandes alturas y por eso sus viajes no han sido bien observados hasta hace poco.
Es una de las migraciones anuales de insectos más largas conocidas y ha dejado perplejos a los naturalistas durante mucho tiempo al no poderse explicar varios de sus detalles. Uno de ellos es que este éxodo es un tanto errático, pues el número de estos insectos que llegan a Europa a veces varía hasta 100 veces de un año a otro.
Los expertos sospechaban que estas variaciones de sus poblaciones en el Mediterráneo se producían porque las condiciones más al sur afectaban el éxito reproductivo de una generación anterior, pero hasta el momento no se ha conseguido demostrar. Ahora, un nuevo estudio sostiene que la lluvia en el África subsahariana puede provocar la aparición de más mariposas en el sur de Europa durante la siguiente primavera.
Para poder demostrar este punto, Jason Chapman (Universidad de Exeter) y sus colaboradores recopilaron observaciones de mariposas que había en la literatura científica tomadas a lo largo de 21 años desde África occidental hasta Europa occidental. Además, recopilaron los datos de satélite correspondientes acerca de las condiciones ambientales y sobre el crecimiento de la vegetación.
Estos investigadores encontraron que la cantidad de mariposas en primavera en Europa está fuertemente influenciada por la cantidad de lluvia monzónica en el África subsahariana occidental durante el verano y el otoño anteriores. Descubrieron que a más lluvia allí se producían más inundaciones, lo que fomenta la vegetación de la que las larvas de la mariposa se alimentan en el invierno.
Informan que los años húmedos parecen haber producido auges de mariposas europeas en 2009, 2015 y este año. Los niveles de vegetación primaveral en el noroeste de África también pueden afectar el número de vanesas, pues las mariposas hacen paradas en su emigración en esa región de camino a Europa.
Se espera que estos hallazgos ayuden a los científicos a visualizar lo que un clima cambiante podría significar para los insectos, dice Constantí Stefanescu (Museo de Ciencias Naturales de Granollers), autor del artículo en el que se plasma el estudio. Dice que los cambios en los regímenes climáticos y de precipitación en África pueden tener consecuencias drásticas en las poblaciones europeas de esta mariposa.
No todo está claro acerca de la emigración de esta mariposa, pues queda el enigma de cómo diablos logran navegar y sobrevivir en su fantástico viaje de regreso hacia el sur al final del verano.
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Fuentes y referencias:
Artículo original. [3]
Foto: Wikipedia.