El Falcon 9, de la compañía privada SpaceX, logra abastecer la Estación Espacial Internacional con la nave Dragon.
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El 22 de mayo, y después de múltiples retrasos fue lanzado el Falcon 9. Los lectores habituales de NeoFronteras ya conocen este cohete y su hermano pequeño, cohetes fabricados por la compañía privada SpaceX. Esta misión tenía por objetivo el envío de la nave Dragon hasta la Estación Espacial Internacional en un vuelo de prueba. Objetivo que ha sido ya conseguido.
Dragon es una cápsula que ya fue probada el año pasado y que, de momento, no es está tripulada. Mide 4,4 m por 3,7 m. En esta ocasión lleva una carga de 500 kg de alimentos y otras necesidades para los astronautas de la estación y unos experimentos diseñados por estudiantes.
En las maniobras de acercamiento se extremaron las precauciones para así evitar cualquier accidente, sobre todo cuando tenemos en cuenta que se trataba de un vuelo de prueba.
Parece que Dragon no cuenta aún con un sistema de guiado de precisión que le permita acoplarse a la estación espacial por sí sola, pero sí cuenta con un sistema LIDAR (una especie de “radar” basado en láser) que le ha permitido realizar las maniobras de acercamiento necesarias. La solución adoptada para el acoplamiento ha sido conseguir un vuelo a una distancia tal que ha permitido al brazo robótico canadiense de 18 metros agarrar la nave para posteriormente acoplarla a la estación. Los astronautas ya han entrado en la cápsula y están descargando los productos contenidos en ella.
A diferencia de otros sistemas de reabastecimiento, en este caso la cápsula permite bajar carga hasta el punto de amerizaje. En este caso Dragon traerá de vuelta unas barras de aleación de aluminio fabricadas en órbita entre otras cosas. Está previsto que el amerizaje sea el 31 de mayo.
La idea de este viaje es ganar un suculento contrato con la NASA de 1600 millones de dólares para el abastecimiento de la estación durante un tiempo (12 vuelos después de este de prueba). Desde que se retiró de servicio la lanzadera espacial, EEUU no cuenta con un sistema para llevar astronautas a la estación o tan siquiera carga útil. Para ello tiene que depender de Rusia y la ESA. Esto es embarazoso para el país y además es caro.
SpaceX planea vuelos tripulados en pocos años, así como usar un sistema de aterrizaje propulsado para su cápsula Dragón en lugar de usar el amerizaje con paracaídas. Podrá transportar hasta siete astronautas a un coste por tripulante muy inferior a los pasajes pagados en la Soyuz. También planean un sistema totalmente reutilizable con su Falcon 9.
Incluso cuentan con el proyecto de un lanzador pesado capaz de colocar 50 toneladas en LEO. Contaría con tres cuerpos de encendido simultáneo del estilo del Falcon 9 para la primera fase.
SpaceX fue fundada en 2002 por el millonario Elon Musk, una vez vendió la compañía PayPal. Este emprendedor (a veces las palabras tienen significado real) produce además el automóvil eléctrico Tesla. Aunque parezca increíble pretende enviar astronautas a Marte y crear allí colonias humanas permanentemente habitadas.
Es de agradecer que en algunos países los empresarios tengan sueños, los persigan y encima los alcancen.
Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=3840 [1]
Fuentes y referencias:
Web de SpaceX. [2]
Entrevista en podcast en NPR(fichero mp3). [3]