Prueban con éxito un derivado de la ketamina que sin los efectos secundarios de ella podría eliminar los síntomas de la depresión en unas pocas horas.
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Hace siete años publicábamos en NeoFronteras una nota [1] sobre una nueva posible vía en el tratamiento de la depresión. En concreto se explicaba que en un estudio se comprobó que la ketamina permitía aliviar la depresión en cuestión de horas y que tenía efectos prolongados. Obviamente el problema eran los efectos secundarios en forma de alucinaciones que tiene esta droga.
Pero en ese estudio se apuntaba que esto daba una pista hacia una nueva vía en el tratamiento de esta enfermedad. Pues bien, han pasado siete años y ya parece que se ha avanzado en este camino. Se ha conseguido obtener un compuesto químico denominado GLYX-13 que es similar a la ketamina y que logra obtener resultados similares en el tratamiento de la depresión, pero que no tiene los efectos secundarios de la ketamina. Este proceso ilustra el largo camino que se necesita recorrer para obtener un fármaco.
De entrada no hay que confundir estar melancólico o triste con estar enfermo de depresión. Normalmente hay razones objetivas para el primer caso y todos pasamos por ese tipo de fases, sobre todo en este mundo moderna que nos roba la vida, pero en el segundo caso se trata de algo más grave y puede terminar con el suicidio del enfermo. Se cree que este tipo de depresión se debe a un desequilibrio en la química del cerebro y los fármacos pueden ayudar en este sentido.
Sin embargo, los porcentajes son un tanto confusos. La Organización Mundial de la Salud estima que un 10% de la población adulta de los EEUU sufre de depresión, lo que constituye un porcentaje demasiado alto como para ser considerado normal en nuestra especie o explicable por un simple desequilibrio químico. El caso es que del 30 al 40 por ciento de esos afectados por la depresión no se benefician de las propiedades curativas de los antidepresivos comercializados. Además, en caso de funcionar, necesitan de unas 2 semanas para hacer efecto, con el consiguiente riesgo de que el paciente cometa suicidio. El que en estudios previos se comprobara que la ketamina mejoraba los síntomas de la depresión en sólo dos horas abrió una vía de esperanza a esos casos.
Según Joseph Moskal (Northwestern University) el GLYX-13 no bloquea ciertos receptores y, por tanto, no tiene los efectos secundarios de la ketamina.
En otros estudios previos realizados por este mismo grupo de investigadores se vio en modelo animal que GLYX-13 mejoraba la memoria y además tiene efectos analgésicos.
Se ha podido comprobar que tanto la ketamina como GLYX-13 producen efectos antidepresivos en ratas al cabo de una hora y estos efectos duran 24 horas. Pero el segundo no produce los efectos secundarios del primero, tal y como se esperaba. Otros antidepresivos usados en humanos como la Fluoxetina tienen efecto en humanos al cabo de 2 ó 4 semanas, pero no en ratas de laboratorio.
Este resultado es consistente con los efectos logrados en la fase 2 de un ensayo clínico con pacientes humanos. Una sola administración de GLYX-13 reduce significativa y rápidamente los síntomas de la depresión, siendo esto evidente entre las 24 horas siguientes a su administración y los 7 días. Al parecer este compuesto es bien tolerado y no produce los efectos secundarios similares a la esquizofrenia que sí producen otros compuestos que modulan o bloquean los receptores NMDA.
Ahora mismo GLYX-13 está todavía en la fase 2 de ensayo clínico y se están repitiendo los ensayos para comprobar cuál es la dosis óptima. También se quiere comprobar si es válida para el tratamiento de otras enfermedades como la esquizofrenia, el autismo o los desórdenes de déficit de falta de atención o hiperactividad.
Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=4123 [2]
Fuentes y referencias:
Nota de prensa. [3]
Artículo original. [4]
La ketamina alivia la depresión en cuestión de horas. [1]