Otra vieja-nueva propuesta de captura de carbono
Proponen arrojar al mar cal para así reducir el dióxido de carbono disuelto en los océanos.
Muchas son las propuestas para reducir las emisiones de dióxido de carbono que el ser humano vierte a la atmósfera. Se cree que el cambio climático que estamos viviendo se debe precisamente a este hábito de emitir CO2. Una manera de reducir estas emisiones es el uso de energías alternativas o energía nuclear. Otra vía sería seguir quemando combustibles fósiles pero secuestrar el dióxido de carbono producido de algún modo. Además de la licuefacción del gas y su introducción en depósitos geológicos, se ha llegado a pensar en una serie de filtros que colocados en las chimeneas absorban el mencionado gas. Hay varias propuestas en este sentido.
Pero, ¿y todo el gas que ya hay en la atmósfera y en el océano? El dióxido de carbono de la atmósfera se disuelve en los océanos, si no fuera por estas gigantescas masas de agua, el planeta hace tiempo que se hubiese achicharrado, ya que los océanos absorben, aproximadamente, 2000 millones de toneladas de dióxido de carbono cada año.
Pero este sumidero de CO2 no es infinito y el gas disuelto ya está produciendo problemas de acidificación. El gas se combina con el agua produciendo ácido carbónico que ataca las estructuras calcáreas. La vida marina, que muchas veces utiliza exoesqueletos calcáreos, está en apuros porque la acidificación de las aguas les impide crear estos exoesqueletos fácilmente. Así, a las calamidades que ya le suceden al coral se le añade esta última.
Ahora a unos expertos se les ha ocurrido reducir la acidificación de las aguas y aumentar la capacidad de absorción de CO2 de los mares (y por tanto reducir su concentración atmosférica) mediante el vertido de cal muerta. El estudio ha sido publicado en SCI’s Chemistry & Industry.
Los directivos de la compañía Shell están tan entusiasmados que están financiando los estudios en esta dirección. Quieren que esta idea sea económicamente posible.
El añadido de hidróxido cálcico (cal muerta o apagada) al agua marina reduciría la acidez y rebajaría los niveles de dióxido de carbono. Los beneficios medioambientales serían importantes y permitiría hacer retroceder el calentamiento global.
Pero no es tan fácil como parece. La idea hace tiempo que se propuso, pero la extracción de la piedra caliza necesaria, su preparación, la obtención de cal, su transporte a la costa y su vertido en el mar consumirían ingentes cantidades de energía proveniente del petróleo y por tanto se emitiría dióxido de carbono. Además el proceso de fabricación de cal a partir de piedra caliza emite en el CO2 que ya está contenido en la roca.
La ocurrencia de resucitar esta idea proviene de Tim Kruger, un consultor de una compañía londinense. Según este individuo sería posible explotar canteras de piedra caliza en determinadas partes del mundo de tal modo que sea económicamente rentable y se emita poco dióxido de carbono. También propone que se podría usar energía solar en el proceso.
Según él uno de esos lugares sería la llanura Nullarbor en Australia, que contiene 10.000 kilómetros cúbicos de este tipo de roca y una irradiación solar de 20MJ por metro cuadrado cada día.
El proceso generaría dióxido de carbono, pero el vertido de este material al mar absorbería el doble de lo emitido previamente.
Según él con este método sería incluso posible revertir los niveles de dióxido de carbono hasta los niveles de la época preindustrial.
Fuentes y referencias:
Nota en Eureka Alert.
Nota de prensa en Cquestrate.
Foto: por kleinmatt66, vía flickr.
13 Comentarios
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lunes 4 agosto, 2008 @ 1:18 am
Me parece otra idea irrisoria de una empresa para tratar de hacerse millonaria, frente al gran problema de las emisiones de CO2. En lo personal me parece inviable, es como eso de cultivar alimento para biocombustible, otra mala idea que hizo a varia gente millonaria ya.
lunes 4 agosto, 2008 @ 3:24 am
En muchísimas ocasiones, el remedio es peor que la enfermedad. Los efectos secundarios son la pesadilla de los fármacos que usamos hoy en día. En el caso del exceso de CO2, el mejor remedio es dejar de contaminar, osease, acabar de una vez por todas con el período carbonífero. La solución no es reciclar -lo que sea- sino eliminar la causa de la necesidad de reciclar. Existen alternativas, todos las conocen -a nuestra necesidad de energía- el coche eléctrico fue inventado por Pauling -hace sesenta años!- fracasó por el ansia del promotor-fabricante en recuperar la inversión, las baterías de la época no permitían autonomía suficiente. No basta con ‘inventar’, el apartado financiero tiene una importancia ‘letal’, contamina y condiciona todo el sistema. No es tanto inventiva lo que necesitamos, más bien el problema es quién financia la aplicación de los inventos.
lunes 4 agosto, 2008 @ 10:34 am
Bueno, esto es una nueva barbaridad entre las muchas que se publican, al crear la cal, se emite dióxido de carbono que acabará de nuevo en el océano, donde será absorbido por esta Cal, resultado final: Estamos tirando piedra caliza al mar para nada, y gastando tiempo y dinero.
lunes 4 agosto, 2008 @ 10:39 am
Es de suponer que «periodo carbonífero» es sólo una metáfora y no el periodo geológico.
lunes 4 agosto, 2008 @ 3:00 pm
Me parece excelente eso del «Periodo Carbonífero» de nuestra civilización. Aunque yo la ubicaría en el eón «Arcaico» de la cultura humana.
Alguna vez tenemos que evolucionar y no andar atándonos a un egoísmo bruto y atávico de pensar solo en reventar el planeta hasta la última gota de petróleo solo «porque a nuestros bolsillos le conviene», perdón, al bolsillo de algunos.
Hace 60 años apareció el auto eléctrico, hace 50 se descubrió el mecanismo de un motor a hidrógeno muy barato. A duras penas los dueños de la economía están aceptando que se fabriquen ambos vehículos.
¿Y nosotros qué hacemos para que cambie eso?
jueves 7 agosto, 2008 @ 5:29 pm
Pablo tiene razón. Aun partiendo de una montaña del más puro carbonato cálcico, las reacciones serían:
CaCO3 + calor -> CaO + CO2 que iría a la atmósfera
CaO + H2O -> Ca(OH)2 + calor
Ca(OH)2 + CO2 -> H2O + CaCO3 + ¿supongo calor?
Así pues por cada molécula de CaCO3 se liberaría una de CO2 a la atmósfera y por cada una de Ca(OH)2 se capturaría una del agua, con lo que el balance total sería nulo, pero gastando una gran cantidad de energía.
jueves 14 agosto, 2008 @ 1:53 pm
Así es, pero no entiendo como estos directivos de la shell no se han dado cuenta de ello, supongo que es un nuevo negocio para ellos, y un intento de presentar a su compañía como mas «verde».
Saludos.
lunes 18 agosto, 2008 @ 8:44 pm
Estiamdo Alejandro:
Copio otro comentario posterior:
La cuestión es si todos y cada uno de nosotros estamos dispuestos a pagar más por un auto eléctrico con menos prestaciones que uno convencional. Las teorías conspirativas están bien para entretener a las masas, pero la verdad es que el dinero es cobarde y todos y cada uno de nosotros somos lo suficientemente egoístas como para elegir lo que nos interesa aunque sea malo para el medio ambiente.
Es ahora, cuando el petróleo es caro, cuando se está invirtiendo en investigación en este campo, porque podría ser rentable. Antes, simplemente, no les era rentable. Y eso vale para las empresas como para los accionistas de las misma, algunos de ellos tiernos ancianitos que quieren ver como el dinero de su jubilación renta en lugar de disminuir.
Es la misma razón por la que no hay fármacos para enfermedades raras. Si no invierte el estado nadie lo hará.
lunes 18 agosto, 2008 @ 8:51 pm
Estimado Tomás:
En todo caso es lo que ese señor y la Shell dicen. El estudio, desde luego, no está publicado en Science o Nature y es cuanto menos sospechoso.
También se podría arrojar carbonato cálcico directamente al mar, quizás así por lo menos se cambie la acidez. Si el ácido carbónico ataca a los moluscos y corales (hechos de carbonato cálcico) quizás ataque también al carbonato cálcico que se arroje.
Pero estas ideas de arrojar aún más cosas al mar al final no son muy buena, bastaría con arrojar menos.
sábado 6 septiembre, 2008 @ 8:18 am
Apreciados Neo:
En relación al comentario 8, insisto en que hay que estudiar caso por caso. Los fármacos para enfermedades raras tienen pocos demandantes, lo que no sucede con el petróleo, cuya importancia trasciende la economía y llega hasta lo estratégico militar por ejemplo. Son mercados absolutamente distintos.
En cuanto al comentario 9, tienen toda la razón. Además, el llevar el carbonato al mar requeriría una gran cantidad de energía que incrementaría el CO2 de la atmósfera y, luego, el de las aguas.
Un saludo cordial.
miércoles 15 abril, 2009 @ 7:53 am
El dióxido de carbono se disuelve en agua formando ácido carbónico
H2O+CO2H2CO3
éste posee 2 disociaciones
H2CO3->HCO3- + H+
HCO3- -> CO3– + H+
Supongo, por lo tanto, que el calcio puede formar tanto Ca(HCO3)2 como CaCO3. La primera disociación de los ácidos polipróticos generalmente es mucho mayor que la segunda, por lo tanto cada molécula de calcio estaría «quitando» del agua 2 de HCO3.
Me gustaría si alguien pudiese confirmar si es así
miércoles 15 abril, 2009 @ 11:24 am
El carbonato cálcico se disuelve mal en agua. Si hay dióxido de carbono disuelto entonces el carbonato cálcico es atacado por el ácido carbónico del agua para producir bicarbonato cálcico.
Básicamente: H2CO3 + CaCO3 = Ca(HCO3)2
Es la razón por la que se disuelve el coral o la caliza que forma las estalagmitas y estalactitas en las cuevas.
viernes 17 abril, 2009 @ 4:48 am
Bien, entonces es básicamente como yo decía. Gracias por la aclaración.