Nuevo teorema cuántico
Según un nuevo teorema, el estado cuántico no puede interpretarse estadísticamente y que dicho estado es una propiedad física del sistema.
En Física, como en cualquier otra rama de la ciencia, a veces no se investiga en lo que se debe investigar, sino sobre lo que mas rentabilidad reporta al investigador. Ese beneficio suele ser en forma de publicaciones, currículum y dinero para proyectos proporcionado por unas instituciones que financian los temas de moda o los temas que los políticos consideran “rentables”, “aplicados” o “de excelencia” (realmente nadie sabe lo que significa esta palabra). El resultado es que la investigación básica de la que se alimenta toda ciencia aplicada, todo desarrollo o toda innovación queda relegada y la “Ciencia” no avanza realmente.
Si un titulado decide ignorar esas limitaciones se encontrará sin un director de tesis, sin beca y sin una plaza de ayudantía. Si consigue defender una tesis (sea del tipo que sea) y luego decide estudiar sobre un tema básico se encontrará con problemas similares y sin financiación para su “proyecto”. Además, se tendrá que enfrentar a ciertas “mafias académicas” que compiten por los mismos recursos. Un ejemplo claro lo tenemos en las cuerdas, que han conseguido hacerse con el “nicho ecológico” de la Física Teórica en muchos “hábitats académicos”. No hace falta mencionar lo malo que puede ser un sistema de “verdad revelada”.
Si esto sucede en el “primer mundo” científico, no hace falta decir que el segundo es peor (en el tercero no se presenta tal problema). Por estas razones, a veces, hay investigadores que esperan a tener una plaza asentada o un nombre para acometer un proyecto arriesgado y valiente si es que el instinto de conservación del prestigio, su agilidad mental y su valentía mental se lo permiten.
Otras veces hay unas pocas instituciones que se dedican precisamente a este tipo de temas y a reclutar científicos a lo largo de todo el mundo. Una de ellas es el Perimeter Institute, que está financiado por Blackberry y por el gobierno canadiense.
Todo esto sería un buen tema de estudio para los sociólogos si alguna vez alguno se atreve a estudiar algo así y viene a cuento por la noticia sobre los fundamentos de la Mecánica Cuántica que vamos ver.
Los fundamentos de la Mecánica Cuántica son algo sobre lo que muy poca gente trabaja y sólo cuando se ha postulado la existencia de posibles computadores cuánticos ha sido cuando ese campo ha captado cierta atención. Pero una cosa es el diseño de esos computadores y conseguir métodos de corrección de errores, de cifrado o de cómo mantener la coherencia y otra conocer bien las raíces sobre las que se asienta la Mecánica Cuántica.
Podemos ahorrar esta cuestión a la mente del lector. La verdad es que no se conocen bien los fundamentos sobre los que está construida la Mecánica Cuántica. Esto fue objeto de fuertes debates en su tiempo y terminó por relegarse debido a que se prefirió un punto de vista práctico según el cual se usa la Mecánica Cuántica para calcular y predecir fenómenos físicos, aunque nadie entienda realmente la propia Mecánica Cuántica. Podemos calcular el momento magnético del electrón con un montón de cifras decimales, pero no sabemos interpretar bien el colapso de la función de onda, la acción a distancia o no estamos seguros qué significa la propia función de ondas.
Una de las interpretaciones más habituales de la Mecánica Cuántica es la que considera la función de ondas como una herramienta probabilística para hacer los cálculos. Según la MC no habría partículas (puntitos definidos en el espacio y el tiempo), sino funciones de onda a partir de las cuales se puede calcular la probabilidad de encontrar esa partícula. Digamos que la función de onda refleja lo que podemos saber sobre el mundo en lugar de ser una realidad última. Los físicos han desanimado desde hace décadas la investigación sobre el significado de la función de ondas.
A Albert Einstein no le gustaba la MC porque decía que no era una teoría acabada, que había una realidad última y desconocida (las famosas variables ocultas) aún por descubrir y que gracias a ella, cuando se descubriera, desaparecerían todas esas incertidumbres y probabilidades. Einstein consideraba que la mejor interpretación para la MC era la probabilística y que esta disciplina era similar a la Física Estadística Clásica. Las probabilidades en este caso serían una medida de nuestra ignorancia sobre los sistemas, no algo inherente a los mismos.
Había aspectos de la MC que a Einstein le desagradaban especialmente, como la famosa y “spooky” acción a distancia, por la que dos partículas entrelazadas que siguen trayectorias opuestas se “ponen de acuerdo” en el colapso de sus funciones de ondas de manera instantánea por muy lejos que estén una de otra.
Los experimentos realizados desde hace años han ido mostrando la realidad de esta “acción a distancia” y el poco o nulo margen que le quedan a las supuestas variables ocultas.
Ahora un grupo formado por los físicos Matthew F. Pusey, Jonathan Barrett y Terry Rudolph han publicado un teorema (ya disponible en ArXiv) según el cual el estado cuántico no puede interpretarse estadísticamente. Según ellos un estado cuántico puro es una propiedad física del sistema.
En el artículo se mantiene que si la función de ondas fuera una herramienta estadística pura entonces incluso los estados cuánticos no conectados a lo largo del espacio y el tiempo se podrían comunicar entre sí. Como esto es casi imposible que se dé, entonces los investigadores concluyen que la función de ondas debe ser, después de todo, algo físico.
Según este resultado los sistemas cuánticos individuales deben conocer exactamente qué estados han sido preparados (la palabra “preparación” es una palabra técnica usada en MC) o los resultados de las medidas experimentales sobre ellos darán lugar a resultados que entrarán en conflicto con la propia MC.
Antony Valentini, de Clemson University in South Carolina, especialista en el tema y no implicado en el estudio, dice que “la palabra seísmo es probablemente la que se puede aplicar a este artículo”. Según él, este resultado es el más importante teorema general relacionado con los fundamentos de la MC desde el teorema de Bell en 1964.
David Wallace, filósofo de la Física en la Universidad de Oxford dice que el teorema es el resultado más importante sobre los fundamentos de la MC que haya visto en los últimos 15 años de carrera profesional. “Esto aparta la oscuridad y muestra que no puedes tener una interpretación del estados cuánticos que sea probabilística”.
Robert Spekkens, del Perimeter Institute y que ha favorecido la interpretación probabilística, dice que el nuevo resultado es “fantástico”, aunque no esté de acuerdo con la conclusión a la que llegan los autores al final del artículo. Spekkens espera que el teorema tenga amplias consecuencias para la Física, como lo tuvo el teorema de Bell y otros teoremas fundamentales. Según él, el teorema es muy importante y bello en su simplicidad.
Naturalmente no todo el mundo va estar de acuerdo con estas opiniones y todavía queda que se envíe el artículo a una revista de prestigio con revisores. Veremos que pasa al final.
Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=3662
Fuentes y referencias:
Noticia en Nature.
Artículo original.
Ilustraciones: milesmathis.
23 Comentarios
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lunes 21 noviembre, 2011 @ 11:43 am
«los investigadores concluyen que la función de ondas debe ser, después de todo, algo físico.»
Entonces ¿El gato realmente está muerto y vivo a la vez?
lunes 21 noviembre, 2011 @ 3:20 pm
El gato está vivo o muerto antes de que el experimentador mire dentro. Y eso se cumplía antes y se cumple después de este resultado.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 5:18 pm
A mí este teorema me parece de lo más chusco. No creo que pase el más leve filtro porque desconoce los fundamentos de la física cuántica. Ya Feynman decía que la física cuántica era demasiado difícil para él, pero ahora aquí se trata de quitar la dificultad de un plumazo, ¡porque sí!. Si la física cuántica contradice al «sentido común», no se trata de modificar la física cuántica, sino el «sentido común», que es producto de nuestra evolución como homínidos y está por ver si tenemos capacidad para comprender todos los problemas que nos plantea la realidad más profunda. Pero sobre esa «probabilidad» tan denostada se apoyan las bases de buena parte de la tecnología moderna. Además conviene decir que no existe ningún experimento físico que contradiga sus prediciones.
¡Ah! y sobre lo que pregunta Teaius, efectivamentes antes de la medida están «superpuestos» todos los estados posibles, el gato esta vivo y muerto. Solo al medir se produce el colapso a favor de una de las posibilidades.Esta aparente irracionalidad para nosotros es una de las características de la física cuantica. no me quiero extender, pero otros físicos han intentado explicar lo que ocurre en el proceso de medida como por ejemplo Hugh Everett.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 6:48 pm
Estimado Ramanujan:
¿Qué es medir?
lunes 21 noviembre, 2011 @ 6:57 pm
Estimado Ramanujan:
Por otro lado es verdad que posiblemente este resultado al final no pase el escrutinio de revisores y colegas, aunque el intento puede haber merecido la pena.
Pero no es cierto que esto «simplifique» la MC o la haga más asimilable al sentido común. Es más, la propuesta es rara y extravagante. Cómo una función de onda que puede ser compleja (imaginaria desde el punto de vista matemático) pueda tener realidad física es algo que se me escapa.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 7:56 pm
En el ejemplo del gato medir es contactar físicamente con esa realidad, lo que producirá la decoherencia.Como espero que esto no sea un examen, solo te diré que el concepto actual de función de onda es algo más abstracto y se basa en la interpretación del campo de materia no como campo físico existente sino como amplitud de probabilidad de presencia de materia. Esta interpretación, introducida por Max Born, le valió la concesión del premio Nobel de física en 1954. En las funciones de onda así definidas, que son de cuadrado integrable, el cuadrado del módulo de la función de onda puede ser interpretado como la densidad de probabilidad de presencia de las partículas en una determinada región del espacio. Eso es el equivalente a la medida.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 8:13 pm
¿Y qué es «contactar físicamente con esa realidad»? ¿Es algo que sólo lo puede hacer el experimentador? ¿Los gatos no colapsan funciones de ondas?
El gato (al igual que el amigo de Wigner) se introdujo para resaltar lo ridículo que puede llegar a ser llevar la superposición sin colapso a sus últimas consecuencias si se asume que es el experimentador el que colapsa la realidad.
Es más fácil asumir que cualquier hecho irreversible hace que la función de ondas colapse. Si no es así se asume un camino que lleva ineludiblemente al misticismo y a pensar que el Universo no estaba aquí hasta que llegó un humano y colapsó su función de ondas.
En cuanto a lo de cuadrado integrable y la densidad, ¡por supuesto! De otro modo no hay manera de conseguir una probabilidad real (en el sentido matemático) y comprendida entre 0 y 1 que sea contrastable con la realidad que se mide. Es así como la MC está establecida. Todo funciona muy bien si uno no se hace preguntas ni piensa en las interpretaciones.
La interpretación de los mundos múltiples de Everet puede parecer la más rara de todas por lo que implica, pero sobre el papel funciona muy bien. Le pasa lo que al resto de las interpretaciones: que no hay manera de diseñar un experimento que la distinga de las demás.
En todo caso este es un terreno muy pantanoso. Por eso, desde hace años, se ha desaconsejado ir más allá de la idea práctica de «funciona, calcula y olvídate del resto».
Feynmann tenía razón, el que diga que entiende la MC es que realmente no la comprende.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 8:25 pm
Una de las cosas un tanto raras de la mecánica cuántica, es que resultando el fotón indivisible, su función de ondas, sea divisible.Piensese en un cristal.Un dia de sol, claro, los fotones inciden en nuestro cuerpo y una más o menos minúscula parte se refleja y viaja hacia el cristal donde ilumina los objetos que pueda haber tras ese cristal y, a su vez, otra pequeña fracción se refleja y regresa a nuestra vista.Todo esto es físico,sucede, es física clásica.Lo que no es física clásica es preguntarse por el mecanismo que subyace en todo eso.¿Que es lo que determina que un fotón decida atravesar el vidrio en cuestión y sea reflejado por éste.?. Así que hasta que preguntes por ese mecanismo, el suceso es bien físico.
Visto así, quizá pueda uno acercarse a la idea de que la función de ondas sea algo físico y el mecanismo esté en la propia naturaleza…o quizás no. De momento seguiremos pensando que la teoría cuántica es meramente posibilista.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 8:26 pm
Perdón, probabilistica, eso es lo que debería haber escrito.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 8:48 pm
A mí me parece que no hay que ridiculizar a la mecánica cuántica por el hecho de que no se entiende en sus últimos fundamentos. Sobre todo cuando los frutos que da son numerosísimos y sorprendentes. Como no maravillarse de «efectos» como la «no localidad», el «entrelazamiento», el «efecto tunel» … que se han obtenido y se aplican con los conocimientos que en este momento poseemos. Quizás falte «cuerpo de teoría» para comprender más sobre esencia última.
Tampoco estoy de acuerdo con la forma de tratar a la «teoría de cuerdas», pues si bien es cierto que por ahora está siendo imposible contrastar sus predicciones (sobre todo por las colosales energías que sería necesario desarrollar en muchos casos), no es menos cierto que la belleza formal y matemática de la misma y la cantidad de relevantes físicos que trabajan en ella, entre los que se encuentra nada menos que el físico más citado del mundo y también «medalla Fields» de matemáticas,Ed Witten, creo que merecen un respeto. Como poco quedaría como una teoría física que no se ha podido contrastar, pero nunca como el «pim pam pum» al que todo el mundo tira por divertimento como si se tratara de una pseudociencia. Esto resulta grotesco aquí donde casi nadie la conoce a fondo.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 8:49 pm
Bueno, desde luego hay que reconocer que chocante el resultado es un rato, y entra en colisión directa con la interpretación estadística de Born de la MC, pues este, corregidme si me equivoco, defendía que la función de ondas no era más que un mero artificio matemático y estadístico.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 9:03 pm
Yo sé poco de esto, pero recuerdo haber leído que la probabilidad aparece en el colapso, no en la función de onda que es determinista. Puede expresarse como suma de estados, pero no es una suma de opciones o posibilidades. No es lo mismo una moneda (50%cara Y 50%cruz) que el resultado previsto de un lanzamiento (50%cara O 50%cruz).
Por otra parte, puede entenderse que toda manifestación física aparece tras el colapso, de manera que la función de onda, aun siendo «real», no sería física en el sentido de observable.
A partir de eso, no acabo de entender bien el sentido de la tesis.
lunes 21 noviembre, 2011 @ 10:14 pm
Si la funcion de onda es algo fisico, ¿qué podemos saber de ella sin colapsarla más allá de su evolución en el tiempo dada por la ecuación de Schrodinger? Si la respuesta es nada, ¿qué clase de teorema es este?
lunes 21 noviembre, 2011 @ 11:06 pm
Estimado Nemo:
La función de onda evoluciona deterministamente obedeciendo a la ecuación de Schrödinger. Esto es el postulado V según algunos libros). El colapso de la función de ondas o colapso de paquete se introduce en el postulado IV y es una cambio irreversible estocástico. La coexistencia de estos dos conceptos son precisamente los que más quebraderos de cabeza dan a la hora de la interpretación.
Para poder entender un poco más profundamente esto habría que bajar a nivel Matemático: espacios de Hilbert, operadores autoadjuntos, matriz densidad, proyectores, ecuaciones diferenciales, preparación de estados, estados puros y mezcla, etc.
El problema de la ciencia pre-Galileo fue precisamente el no usar a las Matemáticas como el lenguaje de la ciencia, de otro modo se cae en la palabrería o en debates sobre las definiciones de palabras que han plagado a la Filosofía con problemas.
Las ventajas del uso de las Matemáticas como lenguaje de la ciencia es que no solamente hay precisión y carencia de ambigüedades, sino que además, al igual que el lenguaje ordinario conforma el pensamiento, las Matemáticas conforman la Ciencia realimentándose una de la otra.
Por curiosidad podríamos enunciar el colapso de la función de ondas en su definición matemática.
Si una sistema físico se halla en el estado ρ el estado resultante tras la medida ideal de un observable A, filtrante para los valores del conjunto Δ, viene descrito por la matriz densidad
Lo que llamamos colapso es precisamente el cambio
«Tr» es una traza, «A» es un operador autoadjunto (todo observable como posición, cantidad de movimiento, energía, etc. es representado por un operador autoadjunto, pero el tiempo no lo es) y los E son proyectores espectrales. Por último, ρ es el operador o matriz densidad (adjunto y acotado) que en un estado mezcla está determinado por unas probabilidades pi que dependen de cómo ha sido preparado el estado y, por otro lado, es básicamente una proyección sobre un espacio unidimensional en el caso de un estado puro. Cuando aquí hablamos de espacio se trata de un espacio de Hilbert, que no es el espacio al uso, sino un espacio abstracto no visualizable que en general tiene infinitas dimensiones y en el que «viven» funciones de onda, operadores, etc.
Todo esto puede parecer críptico, pero es preciso. Ahí incluso estamos definiendo qué es la medición.
El problema es que todo eso es un modelo de la realidad, una descripción de la misma, no es la realidad misma, como siempre en ciencia.
martes 22 noviembre, 2011 @ 12:44 am
Estimado joabbl:
Los autores del artículo proponen una serie de experimentos que se podrían realizar para apoyar o no su idea, así que si el artículo es consistente (está por ver) se podrían hacer esos experimentos y salir de dudas.
Quizás todo sea un tontería o haya algún fallo en algún sitio, pero si alguien propone un experimento sensato siempre hay que tomarlo en serio. Las ideas no contrastables con la realidad, por el contrario, no son ciencia, se llaman religiones.
martes 22 noviembre, 2011 @ 9:46 am
Delimitemos un poco la situación.
Por un lado tenemos una interpretación según la cual una partícula que esté en una superposición de estados (dejemos al pobre gato en paz, que la protectora de animales no a denunciar) lo está de tal modo que ambos estados coexisten de alguna manera y que la función de ondas y otros entes tienen una correspondencia con algo físico real, no son meros instrumentos de cálculo. Una manera de asumir esta posibilidad es la interpretación de los mundos múltiples.
Y por el otro lado si creemos en una interpretación probabilística la superposición sólo sería una manera de expresar que el sistema tiene una probabilidad (asumamos que es del 50%) de estar en un estado u otro. Digamos que ya «está» en uno de ellos, pero sólo lo podemos saber al medir (al colapsar la función de ondas). En este caso la función de ondas y otros entes matemáticos sólo serían herramientas de cálculo de probabilidades y no se corresponderían con una existencia física que se nos escapa.
Además de todos los problemas al uso, hay un problema epistemológico y un problema sobre los límites del conocimiento. Por un lado, ¿hasta qué punto podemos poner en correspondencia biunívoca un modelo de realidad y la realidad misma? Y, ¿podremos algún día conocer la naturaleza cuántica de la realidad completamente?, ¿estamos limitados por nuestros recursos, inteligencia y sabiduría o por límites intrínsecos infranqueables?
martes 22 noviembre, 2011 @ 1:23 pm
Esto es un método matemático de demostración, que se conoce como reducción al absurdo, y que no es la primera vez, que se traslada a las realidades físicas. Es consecuencia de la excesiva matematización de la enseñanza, mas barata para las universidades, pero mas costosa a la larga para los países y la sociedad. La incomprensión de la riqueza experimental que tiene la realidad, es siempre la causa de la confusión. Unas veces demuestran la necesidad y otras la suficiencia, pero siempre acaba siendo un insípido, he improductivo trabalenguas. La incomprensión de la riqueza experimental que tiene la realidad, enlazada por muchas realidades, incluso por circunstancias instrumentales o de ingeniosidad individual histórica, hacen que la reducción al absurdo no pueda ser un método confiable para la dura y cruda realidad físicas. La física responde a la realidad, nunca a la matemática.
Supongamos que se cumple la necesidad y al suficiencia del teorema y eso hace que la funciona de onda, sea real, porque una función matemática no puede, si es matemática cambiar el estado de un ente físico. ¿Cierto? ¡Perfecto…! Pero si esto es correcto, la función de onda que evita la acción a distaría; que tampoco es lo que pasa, debe mantener esa propiedad en cualquier sistema cuántico, ¿verdad? Si extrapolamos esto al electrón del hidrogeno, se acabo el teorema. La función de onda debía manifestar un espin ante un campo magnético, y por lo tanto no hubiese que usas sus propiedades matemáticas de simétricas o antisimétricas o su suma, para distinguir las funciones de ondas de los bosones y fermiones. Hay muchas mas características reales que tendría que poseer para que fuera la causante de los estados reales de las partículas, al punto que con el tiempo ganaría estatus de partícula, y por lo tanto ya no seria la función de onda que conocemos, sino otra seudopartícula muy especial. Y para resolver lo demás, tendríamos que usar otra función de onda con las mismas característica de esta, que cumpliría sus mismas funciones y esta de más decir que seria la misma. De todos modos sonar no cuesta nada y hay que dales el beneficio de la duda, hasta que no lo revisen los iluminados, así ha sido y así debe seguir siendo.
martes 22 noviembre, 2011 @ 2:59 pm
Estimado Tom Wood:
Lo que sigue es un comentario general, así que, por favor, no lo tome como un ataque personal o algo similar.
Menciona en su comentario «la excesiva matematización de la enseñanza», pero la realidad es la siguiente:
– La enseñanza no está excesivamente matematizada, no esta matematizada en absoluto.
– En consecuencia hay generaciones de analfabetos anuméricos que no sólo desconocen esa rama del conocimiento humano, sino que la desprecian. Son basura intelectual.
– No se puede concebir una ciencia sin Matemáticas, so pena de confundirla con la Filatelia. Si hay una ciencia que la usa y se le despoja de ella se convierte en un «bla, bla, bla» como lo que hacemos aquí en NeoFronteras. Es divulgativo, pero nada más. El lenguaje ordinario no puede cubrir todos los aspectos de una teoría física.
– Hay estudios para las que se necesitan actitudes y aptitudes. Si alguien no comprende o no quiere comprender las Matemáticas o no quiere trabajarlas que no culpe al resto del Universo de sus frustraciones. Ese señor puede que simplemente sea tonto o vago. Tampoco pasa nada (la «lotería de genes» no es culpa de uno mismo) siempre y cuando no quiera estudiar, ni quiera títulos universitarios ni desprecie el conocimiento de los demás.
– Hay una serie de individuos que pretender tener un título de ingeniero sin saber Matemáticas. Pero no importa porque en la mayoría de las universidades ya se venden títulos que casi no las requieren. Los mercados mandan y el cliente siempre tiene la razón, aunque la sociedad y la humanidad salgan perdiendo.
– También hay gente que sin querer ser ingenieros y creyéndose nuevos ricos deciden pedir un préstamo al banco sin conocer lo que es un interés compuesto. Las consecuencias de esto ya las estamos viendo. Y ésto es sólo un ejemplo de las consecuencias de hombre anumérico con consecuencias en la vida cotidiana.
– Las Matemáticas no son más difíciles que aprender un nuevo idioma, pero exigen dedicación y trabajo.
Por otro lado, y en relación a lo que menciona en el resto de su comentario, hay que recordar que las Matemáticas son sistemas axiomáticos formales, así que sólo necesitan ser consistentes consigo mismas, nada más. No necesitan una correspondencia con la realidad. Un teorema es una consecuencia que se deduce de los axiomas que se han asumido como verdaderos. Tampoco necesita correspondencia con la realidad.
En Física siempre se necesita contrastar con la realidad, porque puede ocurrir que la teoría sea errónea por muy autoconsistente que sea desde el punto de vista matemático. Pero siempre necesitará de una esqueleto matemático que la soporte y que permita elaborar predicciones.
miércoles 23 noviembre, 2011 @ 2:30 pm
Tenemos un axioma fundamental en la ciencia actual, y ese axioma expresaría algo así como «lo físico es inerte» en el sentido de que el campo de observación y experimentación constituye un todo donde el objeto de nuestro estudio no puede establecer con el investigador otra relación que no sea la meramente pasiva. Equivale al » Soy así y tú me estudias «. Como todos los axiomas, éste también puede ser falso, y aunque funcione, como la mecánica newtoniana, en la vida normal, puede ser que a pequeñas escalas y/o a enormes, no ocurra así y haya que alterar ese axioma. Porque si el sentido común falla, algo axiomático se tambalea.
Tal vez lo observado no sea pasivo.
jueves 24 noviembre, 2011 @ 10:52 am
Estimados/as:
No pasa nada por reconocer las limitaciones de la Ciencia.
El conocimiento que obtenemos de la Ciencia es ABIERTO, INDIRECTO e INCOMPLETO: es indirecto porque una teoría científica se refiere a un modelo «idealizado» del sistema que pretende explicar. Es incompleto porque no abarcamos todas las variables de esa «realidad» que aunque existe, resulta finalmente inasible (lo cual no quiere decir que nos podamos acercar cada vez mas).
Si a esto le unimos la falacia de la «afirmación del consecuente» y la incompletitud de Gödel…y aún así sigue y seguiráq siendo la mejor forma de explorar, controlar y mejorar el Universo.
Paz y felicidad para todos los seres del Universo.
viernes 25 noviembre, 2011 @ 6:31 pm
Desde mi punto de ver las cosas (y con ignorancia de los detalles de la teoría de mundos múltiples) esto se interpretaría como la tangibilidad de un estado anterior al colapso de la función de onda, donde todas las posibilidades estan cubiertas a la vez, de una manera medio surrealista, hasta que colapse cada función de onda dentro de su mundo.
En el caso del pobre gato, simplemente se juega con el experimentador como actor, pero en realidad la función colapso ya y nosotros continuamos sobre uno de los mundos, donde colapso como muerto o vivo, pero con este teorema se supondria que el estado de muerto y vivo existio en su momento, no se si en relacion con la observacion del experimentador, y que ese estado fue «real». No estoy seguro si esa realidad esta definida sobre nuestro mundo ni nuestro tiempo, pero calculo que alguna traduccion de la mecanica cuantica a este caso particular tiene que haber.
viernes 25 noviembre, 2011 @ 8:42 pm
Los interesados en gatos pueden leer esta entrada nueva:
http://neofronteras.com/?p=3668
martes 29 noviembre, 2011 @ 11:44 am
Estimados comentaristas de este artículo:
No salgo de mi asombro cuando noto cómo me ha subyugado y captado mi ignorante curiosidad este tema y vuestras opiniones.
Por mi mentalidad soy totalmente contrario a descartar la comprensión de cualquier fenómeno, lo que equivale a que no puedo prescindir del sentido común, aunque estoy dispuesto a admitir que pueda ser modificado o, mejor, educarlo como dice Ramanujan en su 3, puesto que ha sido adquirido como el subproducto cultural de nuestra evolución. Todo menos el «calcula y calla» si eso equivale a no comprender lo que se calcula.
Por eso, me tienta el pensamiento de Einstein, aunque con una diferencia: no sé si faltan variables que deban ser tenidas en cuenta, casi diría que sí, pero sospecho que sobran. Estamos manejando magnitudes básicas del mundo macro: la longitud, que sólo es estable en reposo respecto al observador, la masa de la que aun estamos dudando de si la inercial y la gravitacional son idénticas -creo que sí- pero que tiene algo más allá y que es su equivalente en energía, y por último el tiempo que, como mínimo también es relativo y, para mí, un derivado del espacio y el movimiento, utilísimo, pero derivado, no fundamental. En otro sentido manejamos las fuerzas como entidad bastante propia constituyentes de campos; pero yo lo veo al revés: son los campos los que hacen las fuerzas, lo que está más en consonancia con las deformaciones del espacio por las que los cuerpos pueden moverse sin resistencia, en movimiento inercial, indiferente a si es rectilíneo o no: será inercial si circula por la configuración del campo.
No estoy seguro si hacéis distinción entre «el gato está vivo O muerto» y «el gato está vivo Y muerto»; me ha impresionado la frase del 7 de Neo «… pensar que el Universo no estaba aquí hasta que llegó un humano y colapsó su función de ondas.» No menos su pregunta del 4: ¿Qué es medir?».
Lo he leído varias veces y volveré sobre él; también al más reciente «¿Por qué no vemos gatos de Schrödinger?»
Sobre el tema de la «no localidad» a veces pienso si no se deberá a alguna propiedad del espacio que nos es aún desconocida.
Mi felicitación tanto para Neo por los dos artículos como a todos los que habéis contribuido a mejorarlo todavía más.
Un abrazo y perdón por mis tinieblas cuánticas.