Nueva clasificación sobre riesgos climáticos
Crean una nueva clasificación para tener en cuenta las potenciales amenazas a la existencia asociadas al Cambio Climático.
Un nuevo estudio que evalúa modelos de escenarios de clima futuro ha dado lugar a la creación de las categorías de riesgo “catastrófico” y “desconocido” para así caracterizar la gama de amenazas que plantea el rápido cambio climático. Los investigadores proponen que los riesgos desconocidos implican amenazas a la existencia y a la supervivencia de la humanidad.
Estas categorías describen dos escenarios de baja probabilidad, pero estadísticamente significativos, que pueden darse hacía final de siglo. El estudio está realizado por Veerabhadran Ramanathan, profesor distinguido en Ciencias Climáticas y Atmosféricas de Scripps Institution of Oceanography en University of California San Diego y su estudiante de doctorado Yangyang Xu, que ahora es profesor asistente en Texas A&M University.
La valoración de estos riesgos parte del objetivo fijado por el Acuerdo de París acerca del cambio climático para que la sociedad mantenga una temperatura promedio global “bastante por debajo” de los 2° C por encima de la que había antes de la Revolución Industrial.
Incluso si tal objetivo se alcanza, un aumento de la temperatura de 1.5° C está todavía calificado como “peligroso”, lo que significa que podría aumentar sustancialmente el daño a la humanidad y a los sistemas naturales. Una temperatura que aumente más de 3° C podría dar lugar a lo que los investigadores llaman efectos “catastróficos” y un aumento de más de 5° C daría lugar a consecuencias “desconocidas” que los autores describen como más allá de lo catastrófico, incluyendo potenciales amenazas a la existencia. El espectro de estas amenazas a la existencia se propone para reflejar el grave riesgo a la salud de los humanos y para la extinción de especies que conlleva calentamientos por encima de los 5° C, algo que no ha sido experimentado al menos en los últimos 20 millones de años.
Los científicos llaman a un probabilidad de calentamiento de un cinco por cierto o menos como escenario de “alto impacto y baja probabilidad” y evalúan semejantes escenarios en el análisis «Well Below 2°C: Mitigation strategies for avoiding dangerous to catastrophic climate changes», que aparece publicado el 14 de septiembre en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences.
Ramanathan y Xu describen además tres estrategias a realizar para prevenir las amenazas más graves.
“Cuando decimos cinco por cierto de probabilidad de eventos de alto impacto, la gente puede descartarlo como pequeño, pero es equivalente a una posibilidad entre 20 de que el avión que vas a tomar se estrelle”, dice Ramanathan. “No tomaríamos nunca un avión que fuera a caerse una de cada 20 veces, pero estamos dispuestos a embarcar en ese avión a nuestros hijos y nietos.”
Los investigadores definen las categorías de riesgo basándose en la líneas establecidas por el Grupo Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) y en estudios independientes previos. Un calentamiento global “peligroso” incluye consecuencias como un mayor riesgo de fenómenos meteorológicos extremos y eventos climáticos como las olas olas de calor intenso, huracanes, inundaciones y sequías prolongadas. Un calentamiento planetario de entre 3°C y 5°C podría disparar lo que los científicos llaman con el término “puntos de no retorno”, como el colapso de la capa de hielo del oeste antártico y la consiguiente subida del nivel del mar o la muerte de la selva del Amazonas.
En los sistemas humanos, los cambios climáticos catastróficos están caracterizados por frecuentes olas de calor mortales, lo que expondría a 7000 millones de personas a un nivel de calor asociado a mortalidad y a hambrunas generalizadas. Además, los cambios serán demasiado rápidos para que la mayoría se pueda adaptar, particularmente los menos acaudalados, dice Ramanathan.
Las evaluaciones de riesgo para subidas de temperaturas por encima de los 5°C todavía no han sido consideradas por el IPCC. Ramanathan y Xu denominan a esta categoría “desconocida??” con los signos de interrogación dando a entender una “naturaleza subjetiva de nuestra deducción”. Los riesgos existenciales podrían incluir extinción de especies y grandes amenazas al agua de consumo humano y a los alimentos, además del riesgo para la salud que supone exponer a 7000 millones de personas en todo el mundo a muertes por calor.
Con estos escenarios en mente, los investigadores identificaron qué medidas podrían tomarse para ralentizar el calentamiento global y así evitar las peores consecuencias, en particular los eventos de alto impacto de baja probabilidad.
Medidas agresivas para restringir el uso de combustibles fósiles y las emisiones de contaminantes de vida corta como el hollín, metano y HFC necesitarían de estar acompañadas de un esfuerzo efectivo en la extracción de CO2 del aire y su secuestro antes de que sea emitido. Serán necesarios los tres tipos de esfuerzos para alcanzar la meta del Acuerdo de París que los países firmantes acordaron perseguir en la cumbre del clima de las Naciones Unidas de noviembre de 2015.
Xu y Ramanathan señalan que la meta se puede conseguir. Las emisiones globales de CO2 han aumentado a un ritmo de un 2,9 por cierto al año entre 2000 y 2011, pero se han reducido a un crecimiento casi nulo en 2015. Acreditan caídas en las emisiones de CO2 por parte de Estados Unidos y China como los principales impulsores de la tendencia. Los aumentos en la producción de energía renovables, especialmente eólica y solar, han inclinado hacia abajo la curva de tendencia en las emisiones. Otros estudios han estimado que fue hacia 2015 cuando hubo suficiente capacidad en energía renovable para alcanzar cerca del 24% de la demanda mundial de electricidad.
Los contaminantes de corta vida se llaman así porque, a pesar de que calientan el planeta más eficientemente que el dióxido de carbono, sólo permanecen en la atmósfera por un periodo de semanas o máximo una década, en lugar del más de un siglo que permanecen las moléculas de CO2 en la atmósfera.
Los autores hacen notar, además, que la mayoría de las tecnologías necesarias para reducir drásticamente las emisiones de contaminantes de corta vida ya existe y están en uso en la mayoría de los países en vías de desarrollo. Van desde los motores diésel limpios a infraestructuras de captura de metano.
“Mientras que estos signos animan, todavía se necesitan políticas agresivas para alcanzar la neutralidad en las emisiones de carbono y la estabilidad climática”, escriben los autores.
La publicación del estudio coincide con el comienzo de la Semana del Clima de Nueva York, una cumbre de hombres de negocios y líderes políticos para resaltar las acciones contra el cambio climático. Ramanathan y colaboradores entregarán el día 19 en las Naciones Unidas un informe complementario detallando la estrategia de tres niveles de mitigación sobre el control de emisiones y el secuestro de carbono. Este informe fue producido por el Comité para la Prevención del Cambio Climático Extremo, dirigido por Ramanathan, el premio Nobel Mario Molina de UC San Diego y Durwood Zaelke, que además dirige la organización de defensa Instituto para la Gobernanza y el Desarrollo Sostenible, que cuenta con 30 expertos a lo largo de todo el mundo, incluyendo China e India.
Esta entrada es una traducción literal de la nota de prensa publicada por UCSD.
Fuentes y referencias:
Artículo original.
19 Comentarios
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miércoles 20 septiembre, 2017 @ 1:24 am
Muchos países no quieren cumplir con ninguna medida, en especial los países en vías de desarrollo que, aunque ya han contaminado más que los demás, dicen que tienen derecho a contaminar hasta que superen al resto en cuanto a desarrollo, mala estrategia
miércoles 20 septiembre, 2017 @ 8:59 am
Es que ese empecinamiento en un desarrollo continuo e imposible de sostener -por mucho que se empeñen en llamarle sostenible- es el problema básico. Solo la admisión de que la población debe disminuir y aceptar un decrecimiento económico -bien estudiado, bien repartido- podría, quizá, iniciar un camino hacia la solución. Naturalmente, empleando todos medios técnicos que poseemos. Pero ese quizá…, quizá sea ya demasiado tarde.
Aún así, ningún político será elegido democráticamente si promete decrecer. Para ello sería preciso que la humanidad comprendiera en profundidad lo que está sucediendo y, posiblemente, fuese capaz de renunciar a una de nuestras principales atribuciones: el egoísmo.
miércoles 20 septiembre, 2017 @ 7:14 pm
Somos una humanidad donde las diferencias de formación son tan grandes que es casi seguro que más de un 30 % de nuestra población no es capaz de comprender el significado de este artículo( frases de cierto nivel técnico y palabras o conceptos como CO2, metano, probabilidades…) y que ni siquiera se dignaría leerlo. Tal vez solo una pequeña parte somos capaces de gastar nuestro tiempo en estos asuntos y creer que merecen la pena aunque tampoco sepamos exactamente cómo solucionarlo. Mi aportación tradicional siempre ha sido esta: creemos sumideros de CO2, esas cosas que se llaman árboles; delimítennos áreas y especies y plantemos en ellas todos los humanos ( 10E10) anualmente diez árboles, mejor frutales, como hacen en la naturaleza las especies animales. Esto supondría 10E11 nuevos sumideros de CO2 cada año, que hace un total de 100.000.000.000. Como cada árbol ocupa un área de , calculemos, 10 m2 de promedio como mínimo, el área total cubierta cada año sería de 10E12m2. Pero resulta que Europa tiene, más o menos 10E7Km2 o bien 10E13 m2, así que en solo diez años se podría repoblar la superficie de una Europa… y empezar a recomendar al público que dejen de plantar tantos árboles.
miércoles 20 septiembre, 2017 @ 10:36 pm
Los bosques de árboles, además:
– Provocan un aumento de las lluvias.
– Tienen un efecto moderador sobre las temperaturas.
– Disminuyen la erosión del terreno.
– Crean ecosistemas por más ricos y variados
que zonas de vegetación baja, porque dentro del propio
bosque se generan distintos microclimas.
– Nos gustan, hacen el paisaje más bonito.
jueves 21 septiembre, 2017 @ 1:39 am
No recuerdo dónde, vi que en alguna parte del sur del sáhara estaban creando una muralla de árboles para impedir que siguiera creciendo el desierto, estoy seguro de que los países limítrofes estarían encantados de recibir fondos para imitarlos, ¿la ONU no está para eso?
jueves 21 septiembre, 2017 @ 9:04 am
Completamente de acuerdo. Posiblemente la ONU fuese capaz de organizar algo tan grandioso como lo que PETRUS propone y avalan Miguel Ángel y «apalank.ator». Los bosques, las selvas, son el reservorio natural del CO2. Habría que compensar a los países por mantener sus superficies arboladas. Sinceramente creo que las propuestas de meter el dióxido en las bolsas vacías donde estaba el petróleo no es la mejor solución. Yo las llenaría, en todo caso de agua marina, previo estudio de la idea. Pero lo importante son esas selvas y bosques. ¿Como podría proponerse seriamente algo así y enviar millones de firmas a la ONU vía internet, supongo? (Es que me reconozco una nulidad en todo esto y en nuestros gobernantes directos solo veo incompetencia; bueno, también una alta dosis de estupidez, sin olvidar la corrupción generalizada, para la cual consideraría penas mucho mayores y reales tan duras como las que se apliquen contra el genocidio o el terrorismo).
jueves 21 septiembre, 2017 @ 3:56 pm
Podemos recoger firmas a través de https://www.change.org/
Y luego enviarlo… Tendríamos que enviarles a nuestros contactos para que ellos hagan lo mismo..
¿Que opinan? ¿Se conseguirían suficientes firmas su lo hacemos?
jueves 21 septiembre, 2017 @ 4:44 pm
Hola Javier L. No conocía esa página, pero las cosas han de ser difundidas para poder hacerlas… Si puedes hacerlo, yo voy a probar también, pongamos la idea ( The tree…) en su poder para poder utilizar sus medios. También serían válidas cualquier organización dedicada a luchar por la mejoría del medio ambiente, ecologista o similar… Saludos
jueves 21 septiembre, 2017 @ 11:31 pm
Es que es mejor hacerlo de modo organizado, porque si cada uno va por su cuenta, uno planta un eucalipto, otro un olmo del Japón porque es muy chulo, etc.
También es preferible plantar varios árboles en un solo viaje que decir «voy a plantar un árbol cada año», sobretodo si el lugar elegido está lejos: en 10 años, si está 25 km, habremos hecho 500 km con el coche y quemado mucho combustible con un propósito que pretendía ser ecológico.
viernes 22 septiembre, 2017 @ 8:59 am
Me parece bien. Habría que redactar un texto que primero convenciera de la necesidad. Y convendría -digo yo- que estuviese en los idiomas principales: español, inglés, francés, portugués…, pero ¿quien se encarga del mandarín y el árabe?
Por mi parte rogaría a Neo su colaboración. Porque ¿a ver quién es capaz de escribir un texto breve y convincente? La propuesta luego es ya más fácil y solo necesitaría que «petrus» o PETRUS -uno de los unos-, afinara su comentario.
viernes 22 septiembre, 2017 @ 8:08 pm
Por desgracia, que la mayoría de la población esté concienciada sobre este tipo de asuntos es muy difícil. A la mayoría del primer o del tercer mundo le importa un bledo el planeta o el porvenir de las siguientes generaciones. Tampoco estamos biológicamente evolucionados para pensar a largo plazo.
Así que algunos miramos a nuestro alrededor y no podemos comprender que no se haga nada y que a la mayoría no le importe el medio ambiente. Parafraseando a un escritor español, podríamos decir que el mundo está lleno de hormigas perplejas y monos desquiciados. Me atrevo a decir, pese al riesgo de mostrar superioridad moral no buscada, que los segundos son mayoría y los primeros somos los que no entendemos nada, o más bien no entendemos tamaña estulticia.
A esto se le suma los intereses de unos y otros por ganar dinero, que parece ser el único objetivo en la vida de muchos. Lo malo es que la gente no quiere ser convencida, considera que está muy bien como está o que incluso necesita mejorar económicamente. Como dice Slavoj Žižek respecto a otro problema: la prostituta de la película Taxi Driver no quiere ser salvada por el taxista interpretado por de Niro.
La gente quiere llevar al cole a sus hijos en su 4×4 o circular por la ciudad con su auto sin impedimentos, contaminando y emitiendo. En el tercer mundo es casi peor, pues, a veces, tienen más de siete hijos por mujer y quieren alcanzar el nivel de vida del primer mundo que ven por la tele. Es sorprendente la destrucción absolutamente y masiva que pueden ejercer ciertas culturas sobre el medio ambiente siendo sólo agricultores y ganaderos, como en Madagascar.
Independientemente de la necesidad de estudios serios previos, se podrían plantar bosques por todas partes y así reducir el carbono atmosférico, pero, ¿en que tierras?, ¿sus dueños van regalarlas para tan loable fin? Y esta gente, ¿seguro que se quedará de brazos cruzados y no echará una cerilla al bosque si les quitan esas tierras? ¿Y cuando crezcan esos bosques?, ¿no los talarán? Si hasta el gobierno polaco está talando el último bosque primario que queda en Europa, todo dentro de la Unión Europea.
Por otro lado, es verdad que hay muchos estudios sobre el cambio climático que aportan pruebas abrumadoras al respecto, pero pocos artículos se publican sobre sus posibles soluciones. Los que hay son sobre geoingeniería, que son “soluciones” que sólo generaría ganancias a grandes corporaciones.
Lo malo es que la gente no elegirá libremente restringir sus supuestas comodidades, ni tampoco los políticos elegidos por ellos lo harán. Para cuando todos estén concienciados ya será tarde. La gente seguro que entrará en razón cuando los desastres sean más continuos y más fuertes, pero entonces el clima y los ecosistemas ya habrán cruzado puntos de no retorno.
Una cosa evidente que nadie dice es que la democracia está sobrevalorada, sobre todo una democracia manipulada por los poderosos y los políticos para propagar la ignorancia, la ignominia y la desigualdad. Pero nadie elige libremente tener menos, sobre todo porque vive en un contexto social en el que se premia a los que más tienen y se fuerza a la gente a consumir cada vez más. Dinero, sexo y poder son aspectos de la misma cosa.
La única manera de salir del lío es obligar a la gente a hacer lo que no quiere hacer. Así de simple. Sólo un gobierno mundial autoritario o una dictadura extraterrestre nos podrá salvar. Algo que no sucederá.
Es triste pensar que hay soluciones y que estás no serán aplicadas. Nuestros nietos sabrán que lo sabíamos y que no nos dio la gana hacer nada.
viernes 22 septiembre, 2017 @ 10:22 pm
Por cierto, la gran muralla verde para parar el Sáhara es una proyecto de 2005 que tenía que cubrir una franja de 15 km que fuera de Djibouti a Senegal. Al parecer funciona bien en Senegal. Pero los otros países no parecen enterarse y no han hecho nada.
Aquí hablan de ello (a partir del minuto 36:10): https://youtu.be/MAfwp6_E8Yk
sábado 23 septiembre, 2017 @ 1:10 pm
Estoy muy de acuerdo en que la democracia está sobrevalorada, sobre todo porque resulta ser más bien demagogia, es decir políticos que se aprovechan del populismo de sentimientos básicos, tan fáciles de manejar. O sea que en teoría de la democracia podría ser aceptable, pero su práctica es catastrófica, al menos en España y mucho más en Cataluña.
En cuanto a los problemas que plantea lo de los árboles, fui consciente de ello cuando hablé con el alcalde de Viñols. Todos los terrenos eran de alguien.
He visto completo el video recomendado y resulta interesantísimo.
sábado 23 septiembre, 2017 @ 4:22 pm
Viene a cuento:
https://www.elindependiente.com/futuro/2017/09/18/la-tierra-se-satura-acelera-calentamiento-global/
sábado 23 septiembre, 2017 @ 7:53 pm
Muy querido Neo:
Suscribo enteramente la lectura que ha hecho. El vídeo también muy interesante, aunque me he quedado con la duda de saber a qué hongo se refieren en el minuto 43:10.
Abrazos.
sábado 23 septiembre, 2017 @ 10:09 pm
No parece un hongo muy especial. Esta asociación entre plantas y hongos es común. A veces se pueden comprar árboles y vienen con sobrecitos con estos hongos para echar a la tierra en donde vaya a plantarse.
domingo 24 septiembre, 2017 @ 10:41 am
En efecto, la democracia es tal vez solo un mal menor, el gobierno de la mayoría, que bien puede ser el gobierno de los mediocres, si creemos en las virtudes de la campana de Gauss …
Neo lleva su buena parte de razón. Somos los humanos , con nuestras limitaciones , prejuicios y errores los incapaces de adoptar soluciones globales eficaces. Mientras tanto, como siempre a lo largo de la historia , solo los que hacen algo, lo que esté a su alcance, consiguen mejorar un poco el mundo que los acoge. Y visto el panorama actual, parece que no han sido muchos. Y otra vez mientras tanto, este próximo invierno, me propongo empezar a plantar por mi cuenta, aunque sea solo en los lindes de mis huertos y en los baldíos, que haberlos, haylos.
domingo 24 septiembre, 2017 @ 8:43 pm
Varias puntualizaciones con el rigor de quien tiene un PhD en dipterismo escrotal:
-No es cierto que los países en vías de desarrollo hayan contaminado más que el primer mundo. Aunque quisieran (que se les ve con ganas) ya no es posible hacerlo, si nos atenemos a las reservas de hidrocarburos que quedan. Hay que tener en cuenta que sólo en la fiesta de la II GM se fundieron la producción de acero combinada de TODO el planeta de varios años, que está por ahí en restos despedazados por todo el continenete, corroyéndose en el fondo de los océanos o simplemente hemos desperdigado Fe a punta pala por el ecosistema. Y hay que tener en cuenta, como bien dice en sus memorias el tarao de Speer, el hombre que intentó matar al Führer en un rapto de patriotismo (después de comer hasta el exabrupto en el pesebre del NSDAP) y así lo dijo en el tribunal de Nürnberg, que no pudo porque la chiminea del búnker estaba muy alta, y el juez soviético (haciendo de aspergy) le dijo que si no había banquetas dentro del búnker… pues esta luminaria de la civilización occidental dijo que en la II GM Alemania **ni se acercó** a los niveles de producción de la 1 GM. Y querían ganar la guerra. Por cierto, hay un territorio bastante extenso por las Ardenas que está químicamente envenenado, no sólo por gases sino directamente envenenado por chatarra. Es un chernobil poco conocido.
Así que no, llegan tarde a la fiesta. De hecho, por despilfarrar, hasta hemos llenado la atmósfera de radiación al punto de que no es económicamente viable fabricar acero (que requiere enormes cantidades de aire) con un umbral de radiación basal aceptable para fabricar instrumental, y ese acero hay que ir a buscarlo… a los barcos hundidos de las guerras mundiales (p.ej. a la flota alemana de la 1 GM hundida en Scapa Flow). Y no, no es una leyenda urbana.
-Segundo, todo este despilfarro va a colapsar en algún momento del futuro próximo, en parte por el pico de Hubbert pero en mayor parte porque la civilización nuestra está implosionando. Motivos sociales retroalimentados por motivos físicos, aunque es obvio que cuando un sistema social llega a sus límites físicos implosiona. De hecho la emisión de CO2 está bastante congelada, debido a que está entrando en barrena en el ex-primer mundo y los brikibroks por mucho que quieran (que sí que quieren) no compensa. Si los análisis que sigo son correctos, y hasta ahora lo han sido, la emisión de CO2 va a experimentar una caída lenta al principio y con fuerte pendiente después. Es fácil de entender, si no hay pasta para comprar un coche no se gasta gasolina (o gasóleo), y si no se venden, no se fabrican. Nos vamos a ver con un modelo social en implosión y en plena disminución de uso de energía. Después de ver a los chinos intentando hacer su empanada con el retrasado mental y sus mariachis, como dice el hombre cohete, a costa de aplastar a Corea del Norte (con o sin tarados en la dirigencia, como si los demás fuesen lumbreras irradiando moral, como dice el otro, el que no sabe que es un núcleo y se piensa que es el centro de una fruta con hueso), empiezo a sospechar que sus planes de poner rompeolas para librarse del tsunami… ya veremos.
Por supuesto, quedará toda la porquería que echamos y que desde luego seguimos echando.
-Respecto al problema social, que es el que genera como dice Neo las hormigas perplejas y los monos con lombrices, cuando este modelo implosione será obviamente sustituido por otro u otros (en este caso quizá compitiendo entre ellos), igual que el Ancien Régime fue sustituido por el liberalismo mercantilista (pudo haber salido muy otra cosa, es por eso que Robespierre y lo que representa sigue siendo un tabú), o el sistema clientelar romano por el feudalismo. Lo que venga, va a tener que gestionar un derribo en toda regla, y si alguien es capaz de adaptarse a cualquier cosa ese es el ser humano. Otra historia es que a las hormigas perplejas nos queden ganas de verlo.
Quizá sí. No vale la pena perder la esperanza antes de tiempo.
domingo 24 septiembre, 2017 @ 11:07 pm
Thriller:
Es verdad, la mayoría de países en vías de desarrollo no emiten más dióxido de carbono que los desarrollados, pero hacen otras cosas igual de negativas. Indonesia, por ejemplo, es el mayor contaminador de plásticos del océano y, posiblemente, el mayor destructor de bosque tropical de mundo (quizás con permiso de Brasil), algo que pronto ya no podrá hacer más al acabarse toda su selva. Una de las fuentes de contaminación por mercurio más importante son los mineros del Amazonas que lo usan para purificar el oro. En el pasado hay incluso ejemplos de civilizaciones neolíticas que colapsaron por sus malos hábitos ecológicos, por ejemplo los mayas.
Sí, el primer mundo, sobre todo EEUU, es el mayor emisor de CO2, pero ahora China es el mayor emisor de este gas. También es verdad que las emisiones decaerán a la fuerza, pues hemos alcanzado el cenit de producción de petróleo.
En cuanto al hierro, no es un problema. Es más fertiliza el mar. La escasez de este elemento limita la productividad marina. Otra cosa distinta son los metales pesados, claro.