La naturaleza de la desigualdad económica
Analizan los factores que determinan la desigualdad económica en los EEUU.
La desigualdad económica está creciendo en los países occidentales. Los ricos atesoran cada vez más riqueza mientras que las clases media menguan y crecen las clases pobres.
Esto se da más en unos países que en otros. Así por ejemplo, en 2010 los ejecutivos ganaban en Gran Bretaña y Canadá 20 veces más que el empleado medio en dichos países, en Japón 11 veces más y en EEUU 343 veces más. En este último país el número de mil millonarios pasó de 13 en 1985 a 480 en 2008. Mientras tanto, el salario mínimo en ese país se mantuvo en 5,15 dólares la hora desde 1997 a 2007.
El patrimonio neto de la familia estadounidense media cayó casi un 40% en la última crisis, pues pasó de 126.000 dólares en 2007 a 77.000 en 2010. En 2011 el 1% más rico tenía más dinero que el 90% más pobre.
Puede que esta desigualdad económica les importe poco a los ideólogos del neoliberalismo, pero este tipo de situaciones son el caldo de cultivo para la inestabilidad social, la violencia e incluso la revolución.
Así que es normal que suenen las alarmas y se hagan estudios al respecto. El último de ellos, publicado en PLoS ONE, se basa en la declaración de impuestos de los norteamericanos y apunta a que esta desigualdad económica sigue creciendo: el 10% de la población posee el 73% de la riqueza del país.
Además, sus autores analizan los factores más importantes que afectan a la dinámica de la desigualdad. Han encontrado que el factor crucial de esta desigualdad económica, que comenzó en ese país en los ochenta, ha sido la dramática reducción de los ahorros personales, seguida de un gran aumento en el dominio de la renta del capital sobre la renta del trabajo.
Los investigadores muestran que, según sus modelos, la inversión de esos dos factores puede parar, incluso invertir, la tendencia en la desigualdad económica en el futuro.
El estudio está liderado por Eshel Ben-Jacob (que fue catedrático en la Escuela de Físca y Astronomía de la Universidad de Tel Aviv y que murió antes de la publicación del artículo) y se le suman Yonatan Berman y Yoash Shapira. Ben-Jacob es conocido por su trabajo en la autoorganización de bacterias y su aplicación a sistemas complejos.
Los autores esperan que sus hallazgos lleven a cambiar las políticas económicas en el mundo real y que estas logren controlar la desigualdad económica.
El modelo de estos investigadores consigue reproducir muy de cerca la dinámica de la desigualdad económica en EEUU desde 1930 a 2010. Desigualdad económica que definen a partir de la parte de la riqueza poseída por el 10% de la población.
La utilidad del modelo está en su capacidad de cuantificar la contribución de varios factores que afectan a la dinámica de la desigualdad económica y, por consiguiente, sirve como modelo de prueba para predecir los resultados de futuras políticas económicas.
La desigualdad económica no depende de un factor aislado, sino de varios. Uno de ellos, y muy importante, es la capacidad de ahorro. Algo con lo que los autores se encontraron en el estudio. Es el factor más importante en este asunto en los últimos 30 años en EEUU, según los autores.
Otra cosa que han estudiado es la movilidad económica o, en otras palabras, cómo de fácil es cambiar de clase económica. Esta movilidad juega un papel importante a la hora de restringir la desigualdad económica, pero termina siendo más importante cuando la economía está dominada por la renta del capital, como en la actualidad.
Si en el modelo se elimina esta movilidad la capacidad predicativa del mismo desaparece.
Sin embargo, también se predice que un aumento de la movilidad no tiene un gran efecto sobre la desigualdad social. Esto sugiere que las futuras políticas no tienen que tener como blanco esa movilidad si quieren ser efectivas contra la desigualdad económica. Lo ideal es que el blanco sea la capacidad de ahorro personal y la reducción del dominio de la renta del capital sobre la renta del trabajo.
Los autores esperan estudiar en el futuro cómo las políticas económicas pueden afectar otros aspectos distintos a la desigualdad económica, por ejemplo, si el ahorro afecta al producto interior bruto. También estaría bien estudiar distintos tipos de estrategias impositivas para ver cómo los impuestos contribuyen a la dinámica de la desigualdad económica y a la economía de los países.
En otros países como España este tipo de estudios o bien no se hacen o no son publicitados, así que nos quedamos sin saber qué pasa. Pero el modelo se podría aplicar igualmente a cualquier país sobre el que se tengan los datos pertinentes. Probamente los resultados no serán muy diferentes.
Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=4743
Fuentes y referencias:
Artículo original
Gráfico: Berman y colaboradores.
26 Comentarios
RSS feed for comments on this post.
Lo sentimos, esta noticia está ya cerrada a comentarios.
domingo 2 agosto, 2015 @ 2:09 pm
Hace más de un siglo que los economistas (y muchos que no lo son) saben que la desigualdad se produce por las diferencias en la tasa de ahorro (y también por las dotaciones iniciales de capital). ¿Nos hemos caído de un guindo ahora?
Tres físicos se reúnen para salvar al mundo y descubren que el escaso ahorro es el que produce la desigualdad. Millones de economistas desde el siglo XIX hasta hoy en día eran tontos y jamás se habían percatado.
La cuestión es hacer comprender a la población el valor que tiene ahorrar, y no consumir, como se pregona una y otra vez desde los medios. ¿Y saben que hay que hacer para ahorrar? Austeridad ¡¡ horror !!
lunes 3 agosto, 2015 @ 3:55 am
Según mi opinión, hacer reductio ad absurdum con un tema como la economía, como es este caso nos lleva exclusivamente a absurdos como es el caso.
Las clases bajas de los países desarrollados sufren actualmente una falta de trabajo y reducción de sueldos provocada por la globalización, ya que las actividades fabriles con utilización intensiva de mano de obra se han traspasado a países subdesarrollados y las pocas que quedan tiene que competir en precio eliminando trabajadores y reduciendo sueldos.
A las clases medias les sucede que están ahogadas a base de impuestos que se utilizan para pagar prestaciones que se destinan a favorecer a esta clase baja, para beneficiar a los adláteres del gobierno de turno incluyendo a los funcionarios, y teniendo que pagar artículos de primera necesidad como electricidad, agua, comisiones bancarias, combustibles, etc. que utilizan para desarrollar su actividad a precios artificialmente altos. Los gobiernos no hacen nada para ajustar estos precios porque las puertas giratorias lo impiden.
Cualquier político favorecido por una puerta giratoria que les lleve por ejemplo a un consejo de administración de una gran empresa se convierte automáticamente en clase alta, que como sabemos todos no pagan impuestos.
Y ese es el motivo de la actual deriva de la economía, todo lo demás es ensarzarse en debates estériles y distraer la atención del respetable, objetivo conseguido por estos poderes que así consigue perpetuar esta situación.
lunes 3 agosto, 2015 @ 8:35 am
Asombrosamente vergonzoso ese 343 de USA. Un 10, y hasta un 15, podrían ser aceptables, ¡¿pero un 343?!!! Y, ciertamente, poco les importa a los neoliberales esta situación. Para ellos el IVA, el ST (USA) o los equivalentes en otros países, -los más injustos de los impuestos, salvo que su % fuese irrelevante; algo así como entre el 1 y el 2%-, es fundamental. Sólo tenemos que ver el caso de Grecia en el que la «Dama de niquel» apoyada por su corte €-pea ha obligado al 23 % e impedido un incremento de los impuestos directos. La imposición de las medidas a Grecia no remedia nada; solo es un débil respiro para un ahogo posterior profundo. Una vergüenza que el resto de Europa consiente, porque los que consienten se benefician de ello; no así las poblaciones a las que dicen representar.
martes 4 agosto, 2015 @ 10:40 am
El parámetro ahorro no es más que una medida grosera que puede englobar otros aspectos como los impuestos excesivos sobre la renta del trabajo, la externalización, el escaso reparto del trabajo, etc. Si nos vamos a los detalles la cosa se complica demasiado como para poder simularlo.
La economía no es una ciencia al uso. Es más fácil la Física, pues los átomos no piensan, ni tienen intereses, ni emociones, etc.
Este tipo de modelos nos dan ideas básicas en una disciplina que tiene muchas escuelas y que está sujeta a ideología y, sobre todo a intereses dogmáticos. El neoliberalismo, además ser contradictorio en su aplicación (pues se socializan las pérdidas de los grandes agentes) se ha convertido en una especie de religión fanática. Como en toda religión, no cabe el razonamiento.
martes 4 agosto, 2015 @ 11:02 am
Estimado Tomás:
El caso griego evidencia algo que no queremos ver. La verdad es que un finlandés o un alemán considera a los países del sur y sus habitantes como inferiores, incluso racialmente. No es más que un aspecto más del nazismo que estaba agazapado esperando a poder salir al mínimo revés. Ni me imagino lo que pasará cuando el clima y los ecosistemas colapsen.
Mientras que durante las vacas flacas podían vender sus productos en ese sur todos éramos amiguetes. Ahora resulta que somos vagos, nos jubilamos prontísimo, tenemos pocos impuestos, etc. Cuando todo esto es absolutamente falso. La escasa prosperidad se debe a muchos otros factores.
Se trata incluso de humillar. Ya sólo queda que pidan entregar a 100 muchachas vírgenes cada mes para ser sacrificadas en algún altar ario.
La realidad es que Europa, como idea, ha muerto. Es y era un mero mercado. Nada más. La idea del euro incluso podría haber funcionado si se hubiera hecho bien. Bajo este neoliberalismo ciego, fanático y vengativo tiene los días contados. Han hecho más por la Europa unida los vuelos low cost y las becas Erasmus que los mezquinos políticos. ¿Qué se puede esperar de un parlamento europeo decorativo que es el lugar de retiro de políticos inútiles que no saben hacer otra cosa que apretar un botón de votación y volver a casa en primera clase el miércoles o el jueves?
Está visto que los europeos no aprendemos de nuestra historia.
martes 4 agosto, 2015 @ 11:15 am
Renaissance:
Ahorrar está bien, pero hay que pensar bien qué se hace con él. ¿Con ese dinero ahorrado que se hace? ¿Lo invertirá nuestro banco en fondos buitre o planes de jubilación para ir destruyendo economías propias y ajenas? ¿Lo prestará a irresponsables que se comprarán una casa por encima de las posibilidades de cualquiera? ¿Será reducido y aniquilado por la inflación? ¿Se aplicará sobre ese dinero fruto del trabajo un impuesto del patrimonio o trasmisiones?
martes 4 agosto, 2015 @ 1:00 pm
Atentos al párrafo:
«Este tipo de modelos nos dan ideas básicas en una disciplina que tiene muchas escuelas y que está sujeta a ideología y, sobre todo a intereses dogmáticos. El neoliberalismo, además ser contradictorio en su aplicación (pues se socializan las pérdidas de los grandes agentes) se ha convertido en una especie de religión fanática. Como en toda religión, no cabe el razonamiento.»
Socializar pérdidas no es ni nunca será liberalismo. Construir estereotipos de paja para atacarlos mejor es una falacia argumental que se llama Falacia del hombre de paja. Curioso que hables de intereses dogmáticos.
Y lo demás… asimilar liberalismo a «religión fanática en que no cabe el razonamiento«, ¿Para qué comentar? Ya te has hecho el retrato tú sólo.
Respecto al ahorro, en el último mensaje: La inversión es el sustento de nuestro sistema productivo, y por lo tanto, de nuestro nivel de vida. Sólo con ahorro se puede progresar. ¿Y quién dice dónde invertir mi dinero? Yo, tú no. Ningún fondo de inversión destruye países, y dudo que tú sepas nada de eso a parte de los remanidos típicos de la TeleSecta.
martes 4 agosto, 2015 @ 1:30 pm
Y vuelvo a escribir, porque acabo de leer el mensaje de:
NeoFronteras:
Martes 4 Agosto, 2015 @ 11:02 am
Y estoy flipándolo.
Este personaje, que se expresa y habla así de zafio, dice que el liberalismo «es una religión fanática en que no cabe el razonamiento«. ¿No serás tú el fanático ideológico?
Obviamente no es una cuestión de racismo, por mucho gramática parda que escribamos. Es una cuestión de responsabilidad.
Los más duros contra el rescate griego no han sido los alemanes, han sido los países bálticos y Eslovenía. ¿Sabes por qué? Porque los países bálticos se han comido un ajuste brutal del 20% del presupuesto público, desde el primer momento, y nunca permitieron que su deuda subiera del 30%. Nunca pidieron rescate ni a la UE ni al FMI ni a nadie, ni nunca echaron la culpa a nadie de su situación. A pesar de ello, tienen que poner dinero, proporcionalmente a su PIB, para rescatar a Grecia, y que encima, para colmo, Grecia en más rica que ellos.
Si fueras Estonio, no estarías un poquito indignado? Yo sí, desde luego. Y no es que me crea mejor o peor que los griegos. Simplemente creería que los griegos tienen muy, pero que muy poca vergüenza.
Los griegos llevan diez años con una balanza comercial en negativo con picos que rozaban el -12% del PIB en 2007. Esto es un «VIVIR POR ENCIMA DE TUS POSIBILIDADES» de libro. Tienes un estado que dice que tiene un déficit del 3%, y luego te das cuenta de que era un embuste y de que era de un 14% (en serio, esto pasó de verdad), y que se estaban endeudando hasta las trancas con una irresponsabilidad total y absoluta.
E increíblemente, para cierta gente poco entendida de la España de hoy, la culpa es de los alemanes que son racistas y de los fondos que les prestan dinero. Alucinen como está el patio.
martes 4 agosto, 2015 @ 8:21 pm
En cuanto a Grecia, también se puede decir que es cierto que el descontrol gubernamental fue total. Ni sabían cuantos funcionarios tenían,muchos de esos funcionarios ni siquiera eran funcionarios ni aparecían por el puesto de trabajo algunos de los que lo eran. Grecia tiene uno de los ejércitos más poderosos de Europa, la Iglesía Ortodoxa Griega,posee casi la mitad de las fincas ( y las mejores) del país, sus privilegios (al igual que el de los militares) acarrean graves pérdidas al erario público (no pagan ni un solo impuesto), los pensionistas griegos tienen pensiones más altas que las de muchos españoles ( y se jubilan antes que el resto de los europeos), los transportes públicos eran gratuítos hasta hace cuatro días, y la evasión fiscal, uno de los deportes más practicados en Grecia.. etc. No todo son «finlandeses y alemanes».
– En cuanto a Japón, el gobierno se vió obligado a estimular el consumo, puesto que los japoneses sólo ahorraban y apenas consumian, y esta situación duró más de diez años. El ahorro es bueno y necesario, pero un exceso de ahorro conduce a lo que los economistas denominan » estanflación» ( estancamiento de la economía, con inflación alta y tasas de paro considerables)
– Y que no se piense que estoy de parte del neoliberalismo, ni mucho menos. Las injustícias en el reparto del «pastel» son brutales. Y efectivamente unos pocos amasan y otros muchos,no solo no pueden ahorrar sinó que ni siquiera llegan a final de més.
– En resumen, la desaparición de las clases medias acarreará el surgimiento de movimientos populistas, demagógicos y también nazi-fascitas. De hecho ya empieza a suceder. Y si encima el clima y los ecosistemas colapsan, pues definitivamente: » This is the end of the world as we know it», que cantaban los del grupo REM.
jueves 6 agosto, 2015 @ 9:03 am
Renaissance:
Voy por la mayor de lo que Neo dice en su 4 y me refiero a tu crítica en «Atentos al párrafo» de tu 7.
El neoliberalismo, como otros varios conceptos económico-sociológico-políticos tiene varias escuelas y el que nos ocupa -como los demás- constituye una ideología, aunque con ligeras diferencias, como suele suceder, por ejemplo en el cristianismo, islamismo, etc., dicho esto como comparación, en este caso, sólo por su extensión internacional. Por supuesto -creo que cualquiera lo admite- toda ideología es dogmática.
Lo contradictorio del neoliberalismo, en mi opinión, creo que se refiere a que sus premisas más destacadas: limitación de la dimensión del estado, flexibilización laboral, limitación de las obligaciones empresariales, eliminación de trabas fronterizas para el capital, entre otras que favorecen cualquier operación incluso improductiva, como sucede, por ejemplo con la especulación, son engañosas con los beneficios que prometen: a que la riqueza del país crezca le dan el significado que parece afectar a todos sus habitantes y, sin embargo, lo que ha crecido es la riqueza de los más ricos, mientras se ha empobrecido al resto de la población. Y es en su aplicación, pues en efecto se socializan las pérdidas. El ejemplo más cercano lo tenemos en España: se ha capitalizado a los bancos a costa de endeudar al pueblo que es quien está pagando el préstamo, cosa que se negó repetidas veces, pero que está resultando ser cierta sin discusión posible, lo cual ya reconoce el propio gobierno actual cuando alaba el sacrificio (impuesto, que no voluntario) del pueblo español.
En cuanto a las palabras de Neo sobre el fanatismo, digo yo que serán fanáticos por conveniencia evidente, los que poseen el capital. No, desde luego el «currante». Si alguno de ellos lo es, se le puede aplicar la frase: «es más tonto que un obrero de derechas» -neoliberal le llamaría yo en la actualidad-.
Saludos.
jueves 6 agosto, 2015 @ 10:05 am
Es muy posible, encarecido amigo «lluís», que la población griega, en general, como pudo suceder en España, haya vivido ligeramente por encima de sus posibilidades, pero sin duda, los que han vivido muy por encima de las suyas, han sido la conjunción político-empresarial, conseguidora, otorgante de contratos lesivos para ti, para mi y para cualquier persona corriente, a empresas, muchas veces fantasmas, o sea, inexistentes salvo para cobrar.
¿Es el pueblo griego responsable del poderoso ejército del que hablas? ¿Lo es de que la Iglesia Ortodoxa posea esas grandes extensiones de las mejores tierras? ¿Lo es de que no paguen impuestos? ¿Son altas las pensiones en España? Esto sería opinable, pero es objetivo que se hayan desvinculado del IPC y rebajado a un mínimo, el 0,25%, que empobrece año tras año a quienes las perciben.
Las cuestiones de las que hablas: autobuses gratuitos, etc. no son otra cosa que el resultado de las promesas de políticos para hacer populismo y ganar elecciones. Tampoco el pueblo confeccionó los engaños de la economía presentada a la UE. Los políticos, como en España, se fabricaron un país al que desplumar y lo han logrado con la mayor honorabilidad, «impunicia», «erecia» o «correicia» entre otros muchos casos de menos prestigio. Desgraciadamente, la gente se sigue dejando engañar por falsas -porque llevan trampa- promesas que, además, luego no se cumplen.
Pero hay una cosa que, económicamente, no entiendo: ¿cómo el ahorro excesivo puede llevar a la inflación? Si se retira dinero del mercado, lo lógico sería una deflación, no la inflación que acompaña a la estanflación.
Un gran saludo, amigo «lluís».
jueves 6 agosto, 2015 @ 7:17 pm
Ya comprendo, «lluís». Al haber un excesivo ahorro, no puede invertirse en producción de bienes, por lo que el desabastecimiento supera la escasez de dinero en el mercado, dando lugar a inflación.
Es cuestión de pensar un poco. Lógicamente, será más complejo, pero puedo conformarme.
jueves 6 agosto, 2015 @ 7:18 pm
Querido amigo tomás, permiteme que te diga que «el pueblo» no es del todo inocente. A no ser que sea completamente estúpido, cosa que no creo. Me refiero claro está al pueblo griego. Supongo que el pueblo griego debe saber que todos los servicios públicos se pagan con impuestos.No he visto por ninguna parte que los griegos hayan protestado nunca por la dimensión de su ejército, ni menos por las prebendas de su iglésia. En mi opinión, los griegos sin ser responsables de todo lo que dices, han estado demasiado acostumbrados a vivir del trapicheo y si se creen lo que les prometen sus políticos, casi vivir de regalo, es que en alguna parte algo tienen que ver con todo lo que les está pasando.
– Bueno, en cuanto al ahorro excesivo puede a medio plazo conducir a una disminución de la oferta, puesto que las fábricas e industrias no tienen pedidos y a medida que agotan los «stocks», producir nuevas unidades resulta más caro o simplemente no se producen más, y ello encarece los remanentes.También es cierto, que en principio una caida de la demanda o del consumo interno, si hay un exceso de oferta, hace que los precios se hundan, pero luego se da o se puede dar un efecto «rebote».
– Otro gran saludo para ti, tomás.
jueves 6 agosto, 2015 @ 7:54 pm
No había leído el 8 del Sr. (por llamarle de alguna forma) Renaissance.
Y ya que Neo es tan educado que ni le responde, quisiera decirle que en los comentarios podemos estar de acuerdo o no, pero, entre los que nos tratamos con frecuencia, se usa la educación y, desde luego, no nos insultamos. Usted no merece ser leído.
viernes 7 agosto, 2015 @ 11:10 pm
Ya está servida la eterna discusión estéril sobre economía, incluso llegando a la descalificación personal y sin analizar las causas profundas y sencillas.
El origen de todo es que los partidos políticos deben orquestar unas campañas electorales que cuestan una fortuna (comilonas, mítines, etc) con el objetivo de captar el voto de los indecisos. Éstos suelen ser la parte más desinformada de la población y más fácil de convencer o comprar con cualquier regalito o promesas incumplibles.
Un ejemplo de esto, en Huelva desde donde escribo, la empresa semipública Giahsa controlada por el PSOE regaló unas 25000 botellas de agua a quienes hacían el camino del Rocío en periodo casi preelectoral, aprovechando las histerias colectivas que se producen en estas peregrinaciones para rebañar algún voto.
Pues los partidos políticos no tienen dinero para estas campañas y lo piden de una u otra forma a las empresas que venden estos productos imprescindibles (bancos, eléctricas, etc.) que ya lo repercuten con creces en sus precios. Luego estas empresas retroalimentan el círculo mediante las puertas giratorias.
Como puede deducirse de esta explicación la única manera de romper el círculo es desalojar a los grandes partidos, corrompidos por igual, de las instituciones y ahora existe la oportunidad con los partidos políticos nuevos.
Me ha salido un discurso de lo más revolucionario y pediría perdón, pero no me desdigo de nada. Saludos a todos menos a uno.
sábado 8 agosto, 2015 @ 8:56 am
Estimado «apalancator» (el filtro que la tiene tomada con la ca):
Sólo espero que no ser yo ese uno, porque me limité a recriminar una actitud impropia de esta web; aunque, si te he molestado por hacerlo, ciertamente, lo lamento mucho.
Y, aunque esté de acuerdo en los derroches y malas costumbres giratorias de las que hablas, realmente la discusión se centraba en el neorileralismo. Pero, como dices en tus 2 y 15 esas corrupciones, esos engaños, son una causa importantísima de que las cosas vayan como van, pero eso sucede en todos los sistemas, incluso en las dictaduras, donde no hay elecciones.
Yo vivo en una ciudad pequeña de Tarragona, y el alcalde acudió, en las penúltimas elecciones, con un par de adláteres a la residencia geriátrica donde estaba mi padre alojado. Como regalo entregó a cada residente una botellita de agua, diciendo de ella que «como nuestro, partido, no se corrompe nunca» -creo recordar más o menos fielmente-. Pero yo vi la fecha de caducidad y me fui a él, y se la enseñé. No sabiendo qué decir, se excusó mientras señalaba a su acompañante: «sí, ya, pero quien se ocupa de eso es ese señor de ahí». En las últimas elecciones fue domicilio por domicilio hablando con los electores. Venía con una persona de menos de 30 años y presumió diciendo que formaban un equipo joven. Yo le dije con evidente sorna que, por quien llevaba las papeletas, podría ser, pero que él era bastante mayorcito, que habría de estar ya hace tiempo jubilado. Dijo que, con varias legislaturas -tres o cuatro creo- él representaba la experiencia. Cierto es que, pese a su apariencia garrula y discurso poco culto, listo, para esos lances, debe ser.
Por supuesto, estoy contigo en que es preciso desalojar a los grandes partidos, pues su forma de perpetuarse es: hoy gobierno yo, pero no te preocupes que, seguramente, en la próxima, lo harás tú, así que poco varía uno de otro y pueden darse los parabienes en los mismos consejos de administración si es que acuden alguna vez y si coinciden.
Ya ves que tu historia y la mía tienen cierta coincidencia.
También yo saludo a todos menos a uno, asegurándote que ese, no eres tú. Pero lo cierto es que quisiera dar ese enojoso asunto por terminado.
domingo 9 agosto, 2015 @ 1:30 am
Apreciado Tomás,
Es usted el colmo de la moderación y la mesura en todo lo que escribe y me tragaría un hierro al rojo antes de ofenderle en lo más mínimo, no me refería a usted en ese ¨a todos menos a uno¨, sino al autor de las descalificaciones personales.
Quiero insistir en mi teoría, cualquiera que tenga una fábrica, por ejemplo una panadería gasta 10 veces más en electricidad, combustible, agua, gastos financieros e impuestos que cualquier particular, si estos artículos están encarecidos un 5% de media, se que provoca una erosión en los beneficios de por ejemplo un 20%.
Esta pérdida de beneficios espanta a cualquier empresario que quiera fabricar en estos países, con lo cual se aumenta el paro.
El 20% de beneficios perdidos por el pequeño empresario financia mediante puertas giratorias a expolíticos y a la antes llamada alta burguesía que así ve crecer sus ahorros.
Así se explica el empobrecimiento de la clase media, el alto índice de paro y el enriquecimiento de la clase alta. Es el único diagnóstico de la situación económica actual y la única posible solución es deshacerse de los grandes partidos políticos para romper el círculo vicioso.
Me parece que los economistas ocultan esta información y se dedican a discutir el sexo de los ángeles para distraer a la población.
No hay que olvidar que son los gobiernos o grandes empresas quienes financian los estudios de los economistas, ellos no van a morder la mano de quien los alimenta y por eso estos estudios no tienen la más mínima credibilidad.
Y claro que en una dictadura es todo mucho peor, eso es indiscutible.
No puedo despedirme sin disculparme otra vez, querido Tomás, un saludo.
domingo 9 agosto, 2015 @ 7:29 am
Apreciado amigo:
Gracias por el inmerecido comienzo de tu comentario.
Creo que en éste se corrobora que estamos de acuerdo, como te digo en mi último. Tampoco a mí me gustan las mayorías absolutas -lo que es fácilmente deducible de tu escrito- porque son casi como dictaduras de menor duración, pero que, con el otro partido mayoritario, forman una cadena que nos esclaviza permanentemente a todos los que no estamos entre los poseedores del capital o en la clase política. Niegan los que componen esta última formar una clase, pero no es así. Son una clase con muy pocas excepciones, que algún político habrá con voluntad de servicio, pero son rarísimos y se oculta su comportamiento honrado para no dar mal ejemplo entre ellos.
Un cordial saludo.
miércoles 12 agosto, 2015 @ 10:38 pm
«Lo ideal es que el blanco sea la capacidad de ahorro personal y la reducción del dominio de la renta del capital sobre la renta del trabajo.» Este es el plusvalor al que Marx ya hacía alución hace más de un siglo. En eso acertó, ojo, no soy marxista, en otras Marx se perdió totalmente. Al final se trata de que los seres humanos hagamos los cambios para un sistema más distrivutivo o necesariamente se cae en la dialéctica social, la que Marx llamó guerra de clases y lo va ser por lo que pasa ya en EE.UU. Pero ninguna guerra es buena, nunca jamás.
jueves 13 agosto, 2015 @ 2:47 pm
Ahorrar para que se lo lleven otros y quedarse igual. Ahorrar esta bien cuando te marcas un objetivo: voy a ahorrar para pasar unas buenas vacaciones este Verano próximo, … para comprarme una buena videoconsolas de juegos, … para un nuevo televisor, de muchas pulgadas, para un nuevo coche, una casa, un solar o terreno.
Si ahorras para un plan de pensiones, viene hacienda y te da un buen mordisco a esos ahorros. Gente que se ha ido a vivir a Filandia, y salia por televisión en programas como «Viajeros por el mundo», afirman que en España se paga tres veces mas por los mismos servicios que tienen en Finlandia: tasas de basura, limpieza y mantenimiento de calles, … Cuando compras una casa, tienes que pagar un Ibi, si no lo haces pasado algunos plazos, te quitan la casa que as pagado o terminado de pagar, la venden, y se cobran lo que debes de Ibi mas la demora (aunque esto también lo hacen en otros países, parece). Pero, bueno, no hay propietarios de una vivienda, pues debemos pagar una especie de alquiler al Estado. (Todo eso, después de comprar un terreno, obtener los permisos, adaptarte a la norma urbanística, hacer tus sesiones. Aparte de del proyecto y coste de la construcción.)
Cuando trabajaba, lo primero que aprendí, es a no hacer planes a largo plazo, pues todos se caen. (Se tuercen, se retuercen y se caen. Esto también lo viví, cuando estudiaba y hacia planes, para la FP, y para después, si todo iba bien…) Hoy pienso que es mejor vivir el día a día, e ir tirando por la vida. No pensar en mañana, pensar en hoy. Se termina de estudiar, y no se sabe cuando se va a empezar a trabajar (termine en el 2001, y tuve un primer trabajo en el Verano del 2004, de dos meses -Antes había trabajado una semana en una construcción, y otra semana, en una imprenta-. Un segundo trabajo, como electricista, lo tuve a finales del 2007, para cuatro meses. Y en el 2011-12, un mes en un trabajo municipal de mantenimiento de señalizaciones. Total, desde el 2001 – 2015, he trabajado 8 meses y 8 días. Estudios: Bachillerato tecnológico, Ciclo Formativo de Grado medio de electrónica de consumo. FPO: electricista de edificios 350h., auxiliar de montajes electrónicos (110h), informática (500h), climatización (500h), energía solar, agua caliente sanitaria (350h)-casi, como si hubiese hecho otro Ciclo Formativo LOGSE (FP). Después del colegio, no hay vida, era todo de mentira. Nos tenían a todos engañados. Ahora digo con humor, cuando hablo de ello.
En Occidente, la cultura nos lleva a preocuparnos por el pasado y por el futuro, pero nos perdemos el presente.
viernes 14 agosto, 2015 @ 8:57 am
Queridos amigos Alejandro y David. Según exponéis, ambos tenéis razón. En general, el ahorro es una buena costumbre para la economía propia y la del estado. Y es necesario, puesto que uno de los medios fundamentales para la empresa es contar con un capital y éste no puede salir sino del ahorro. También ahorrar puede considerarse un bien para el planeta, pues gastar menos significa explotar menos la Tierra de la cual extraemos todo bien.
Pero ahorrar también implica privare de gozar hoy con vistas a poderlo hacer mañana. Lo que sucede es que ese mañana está por ver; quizá no llegue nunca, precisamente por llegar demasiado pronto -es una de las contradicciones del tiempo-. Es decir que puedes estar sacrificándote para nada. Y sólo hay una vida.
Yo diría que como en las filosofías orientales, lo mejor es el «camino del medio»: ahorrar con moderación y proporcionalidad.
Como David habla de España, aquí no andamos nada mal en el capítulo del ahorro; un tanto forzoso, por decirlo de alguna forma. Un altísimo % de la población sufre una hipoteca y eso es un ahorro. Lo malo es que tal y como se han hecho las cosas, no ha sido bueno para el país ni, en la mayoría de los casos, para el ahorrador que ve cómo lleva, quizá diez años pagando y, si vende ahora, posiblemente no obtenga ni lo que aún debe.
¿Entonces donde ha ido y sigue yendo su ahorro? Fue a las empresas de construcción y sigue yendo a los bancos que hicieron su agosto y siguen haciéndolo.
La cuestión está entonces cómo debe ahorrarse. Una de las formas es consumir menos. Reparar el coche y los electrodomésticos en vez de comprarlos nuevos. Pero, claro los fabricantes son unos listillos y hacen que algunas piezas tengan su obsolescencia programada y que su precio sea tan alto que al cliente le interese más comprar nuevo que reparar. Es decir que, de ese modo, la obsolescencia es del total del aparato. La solución puede estar en utilizarlo menos. Si puedes ir andando o en bici, no utilices el coche; o, si está más lejos, coge el autobús o el medio público que sea.
En resumen que ahorrar sí, pero sabiendo en qué y como, para que tu sacrificio de hoy redunde en ti mañana y no en esas grandes empresas y entidades financieras que, además son las más voraces devoradoras de nuestro mundo. Y no hacer ningún caso de la publicidad, desde luego.
Saludos a ambos.
sábado 15 agosto, 2015 @ 4:36 am
¿En los países occidentales?
Yo diría que en los demás también. En los paises árabes cada vez es peor, es los asiáticos también, y luego están los supuestamente «comunistas» en los que la clase social más allegada al poder se convierte en todopoderosa. Hace poco ha salido la noticia de la hija de Chavez, la mujer más rica de Venezuela, y sus cuentas en varios paraísos fiscales
martes 18 agosto, 2015 @ 2:19 am
¡Buff!, pues lo que dice Neo en su 5 me inquieta enormemente…creo que lo que me pasa es que no quiero admitirlo, que prefiero mantenerme en mi ilusa idea de una Pangea que, al parecer, no existe ni siquiera en el reino de Utopía. Pero es que si los norteuropeos se sienten racistamente superiores a los mediterráneos; los vascos, una raza superior a los andaluces y así sucesivamente, no me queda otra que admitir que vamos asistir a un nuevo colapso.
miércoles 19 agosto, 2015 @ 8:05 pm
En lo que te refieres del comentario 5 de Neo, yo creo que exagera. Por mi experiencia personal he recorrido unos cuantos países europeos y sus islas (lo digo por el RU especialmente) y nunca tuve la sensación de sentirme menospreciado. Incluso una especie de gigante alemán cuya cintura pasaba de la parte superior de la silla mientras que ésta, a mí, me alcanzaba sólo hasta los omóplatos, se rindió a mi superior capacidad de beber cerveza y me felicitó por la proeza. Fue en el curso de una comida de negocios. El pedía entrecot, yo, lo mismo; él, jarra de cerveza, yo también. Sí, le gané, pero el se marchó andando -un poco de lado, eso sí- y yo no me pude levantar, así que seguí con la cerveza: burradas de juventud. Pero es que claro, soy aragonés y, aunque ellos ni lo saben, la cosa da mucha moral. ¿Ves Neo?, racismo garrulo de los Monegros. ¡Teutones o vascos a mí! !Ja! ¿Ja? Mejor Ga y prou.
Hombre, que el nazismo no ha acabado, pues sí. ¡Pero al terminar la guerra hubo una milagrosa desaparición de cualquier nazi! Como en Madrid, que se llenaba desde Cibeles a la Plaza de España de vítores y brazos levantados y, de pronto, todos se evaporaron y no estuvieron en las cárceles porque el número de éstas no daba para tanto.
Sin embargo las formaciones políticas de extrema derecha no son muy relevantes. Algo parecen progresar, pero no es importante al lado de los movimientos que estamos viendo en el sur hacia la izquierda menos honorable -cosa que habrán de demostrar si llegan al poder (¡qué lástima de p!; ¿por qué no j?)-.
Pero tiene absoluta razón en que la idea de una Europa unida nunca ha existido salvo en las mentes de los ilusos como yo mismo, y en boca de los políticos tan honorables como pueden serlo sin renunciar a sus privilegios (¿pa qué?). Europa no se hizo para el pueblo europeo, sino para el capital de unos pocos europeos. Ya ves cómo comenzó: la Comunidad del Carbón y el Acero. Era cuestión de añadir más productos, más mano de obra baratilla y más mercado. Y para eso estaba el más atrasado Sur, a donde tanto le gustaba venir a Rafaela a eso de poder hacer bien el amor.
Pero, ciertamente, lo de Grecia no tiene nombre. Porque ¿que hubiera sucedido si, realmente, hubiera conseguido hacer más llevadera su deuda? En los demás países endeudados hubieran triunfado partidos similares a Podemos. Estoy seguro que la Dama de Niquel y su séquito -no numeroso, pero dominado por el gran capital- hubieran preferido una Grecia fuera del Euro. ¿Y por qué no? ¡Ah si Putín no lo fuera tanto! Podrían haberse tirado un buen farol. ¡O si la URRS no lo hubiera hecho tan mal que todavía perdurase! Me refiero, a una posible URRS de Gorvachov…
El problema es muy gordo.
En cuanto en lo de jubilarse prontísimo, personalmente preferiría que fuese más tarde, y dependiendo de las profesiones (porque no envejece al mismo ritmo un minero con su enfisema que un buen infuncionario de los de cafecito tras el postre, copa, periódico y compra en el tiempo del desayuno» -que hay funcionarios muy responsables, sí, pero también quedan de los que menciono, por eso, los llamo in…-) porque la vida humana se ha alargado mucho y la tasa de natalidad -afortunadamente y en espera de remedios que equilibren la renovación poblacional- es más baja que nunca, aunque por motivos poco deseables: falta de trabajo para los jóvenes que les impide crear una familia -yo sigo creyendo en la familia como centro de responsabilidad y de cariño-. Es decir que tenemos un problemón importante y urgente: el incremento poblacional que nos acarrea un consumo cada vez más acelerado del planeta, y un problema inmediato: la renovación poblacional, que con los esquemas del pasado no tiene solución viable. El envejecimiento en el mundo desarrollado tiene su solución en la inmigración, pero la tremenda falta de trabajo -al menos en España-, lo hace casi imposible. Los puestos de trabajo deben aumentar y podrían hacerlo aquí, donde conozco un poco, por ejemplo intentando y consiguiendo ser uno de los principales países en energías renovables o repoblando bosques como se debe, con flora autóctona. Pero con puertas giratorias y leyes que las lubrican hemos topado. Y en todo el mundo, limpiando los mares, que hay trajín para generaciones.
Yo, que reconozco ser un tanto radical, cerraría los crematorios y pondría a cada muerto con su árbol decorado con una placa donde figurase el nombre del difunto y algún breve epitafio. Por ejemplo algo así como «yo fui un hombre muy viajero y ahora aquí me quedo». Al final, serían más de siete mil millones de árboles por generación. No es demasiado, pero, poco a poco…
Nada, Miguel Ángel, que lo dejo porque me enrollo. ¡Como envidio tu brevedad y comedimiento!
jueves 20 agosto, 2015 @ 3:19 am
¡Hombre!, ¡ mi querido pirata!, lo que tenías que haber hecho era haber trasladado la batalla a un campo que te fuese más favorable. No parece muy sensato plantear una competición con ese angelote que, por las señas que das, se diría de la mismísima Bavaria, a base de jarrazos y entrecotes. Es cierto que le echaste pelotas, pero te faltó anotarte una victoria de las de verdad, mi querido amigo: ¿y si le hubieses dejado ganar y que, a cambio, te presentase a alguna hermana? En caso de megalozana nórdica, desplegar tu mejor repertorio a ver si la cosa acaba, o mejor todavía, «empieza», con ella en taconazos vestida de camarera de la Oktoberfest.
Un saludo esta vez, que sé que ahora mismo estás pensando en otro tipo de abrazos.
jueves 20 agosto, 2015 @ 7:54 am
No fue en Bavaria, sino en Colonia. Y tampoco en octubre, sino en verano, aunque no recuerdo el mes. De todas formas, sin comer nunca he bebido -es cosa de mi tierra, o de algunos de mi tierra-, así que no podría competir, y, de todas formas, no me considero capaz de atreverme con esos fenómenos del trago, ni tampoco me apetece. Pero ciertamente de joven era un gargantúa de categoría. Una vez, precisamente la noche que, con mi exposa fuimos a ver al Teatro Alcalá a Camilo Sexto en Jesucristo Superstar -para mí mejor que el original- cenamos en un bar-restaurante que se llama o llamaba National Geografic. Y, entre otros, había un plato combinado que llevaba un entrecot -es que me encantan- de un kg. Pedí uno y, ante mi sorpresa, porque siempre ha sido muy comedida, mi ex pidió otro. Pero no pudo pasar de unos bocaditos, así que comí los dos, con sus adornos, naturalmente. Y, en otra ocasión comí tres veces. Porque no recordé que había quedado con dos personas para comer, aunque a diferente hora, y daba tiempo. Pero luego llegué a casa un tanto tarde y tenía esperándome a mi ex con una comida que la ilusionaba. Así que, para no decepcionarla, me la zampé también. Ahora me conformo con dos litros de leche para desayunar y no hago más excesos. Incluso me he prohibido ir a los self-service porque tengo la mala suerte de que me gusta todo. Lo que menos los dulces, afortunadamente.
En cuanto al resto, ¿abrazo de osa quizás? No, gracias, que me gustan las tallas más bien normales tirando a pequeñas. Y sin tanta carne por todos los lados. Mis abrazos ahora son para mi perrita Luna que es un encanto, la yorkshire más inteligente y cariñosa de los tres perritos de esta raza que he tenido en mi vida -es que pienso que no son nada listos, salvo ésta-. Asombrosamente su cara es capaz de expresar varios gestos perfectamente reconocibles.
Pero ya veo que el abuelo Cebolleta asoma el tallo, así que corto por lo sano.
Un fuerte abrazo.