ESPECIALES

Juan Antonio Bernedo nos habla esta vez de otro logro de la ESA: el acople y primer experimento del modulo Columbus en las estación espacial internacional.

El trasbordador “Atlantis” llevó en enero el módulo científico europeo «Columbus» hasta la Estación Espacial Internacional (ISS), en una misión de 11 días en la que se instaló con éxito el laboratorio científico de la ESA.
La misión, que fue suspendida en varias ocasiones el pasado mes de diciembre, debido a problemas en los sensores situados en el tanque exterior de combustible, tenía como objetivo principal el acoplamiento, instalación y puesta en funcionamiento del Columbus que constituye la principal aportación de la Agencia Espacial Europea a la estructura de la Estación Espacial Internacional (ISS).
Los cometidos del Columbus serán la experimentación sobre ingravidez, en sus diversos aspectos fisiológicos, biológicos, física de fluidos, comportamiento de materiales, tecnología y educación. También contribuirá con medios para el estudio del espacio y para la observación de la Tierra.
El laboratorio europeo, de 7 metros de largo y 4.5 de diámetro, pesa 13 toneladas, 2.5 de las cuales corresponden al equipamiento científico, que se distribuye entre cinco “racks”: Biolab, laboratorio de fluidos, de Fisiología, el de ciencia europea y el de transporte. Otros dos equipos han sido transportados separadamente en la bodega del trasbordador y van montados en plataformas exteriores y otros serán añadidos en un futuro.

Aunque ésta es la mayor contribución de la ESA al programa de la ISS, ha habido y habrá otras, como las colaboraciones en cuanto a manejo de datos del módulo ruso DMS-R y otros equipos ya en funcionamiento de la parte rusa, el módulo de interconexión conocido como Harmony, o Nodo 2, los lanzadores Ariane que se usaran para elevar el “Julio Verne” y otros cargueros espaciales automáticos de suministro y servicio de la estación, el brazo robótico europeo o el módulo del Nodo 3 y el puesto de la Cúpula de Observación.
Pero el paso may importante es quizá el que supone que Europa tendrá a partir de ahora una presencia permanente en la ISS, controlada desde centros europeos y con importantes retornos tecnológicos para las empresas y entidades participantes en el proyecto.

Primer experimento en el Columbus

El primer experimento estudia el crecimiento de las raíces de algunas semillas en ingravidez para compararlo con su desarrollo en condiciones terrestres. Se ha iniciado el ensayo para medir el rizado y ondulado de raíces de semillas de “Arabidopsis” (semillas resistentes a ambientes hostiles) de dos tipos diferentes, uno natural y otro modificado genéticamente. A la hora de cerrar estas líneas el experimento cuya duración era de 15 días, estaba todavía en curso dentro del equipo para experimentos de biología “BIOLAB”, que se muestra en la imagen.

Por Juan Antonio Bernedo.

Fuentes y referencias: Notas de prensa de ESA, del 7 de febrero al 5 de marzo de 2008.