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Meteorito de Puerto Lápice

Área: Espacio — marzo 17, 2008

España está siendo afortunada en los últimos años con la caída de meteoritos. Juan Antonio Bernedo nos habla en este artículo del último evento de este tipo.

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Imagen de las 18 de las 20 piezas recuperadas por miembros y colaboradores de la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos. Imagen: Alejandro Sánchez (ASAAF-UCM).

El pasado 31 de enero se presentaron, en la sala de prensa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid, los resultados de la investigación sobre el meteorito de Puerto Lápice, en la que han colaborado varios socios de la AAM.
La caída de este meteorito pudo verse desde casi toda España, el día 10 de mayo de 2007, contándose con observaciones desde Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Madrid, Murcia, Málaga, Sevilla, Toledo y Valencia, que transmitieron la alarma refiriendo haber visto “una bola de fuego” a los centros de emergencias del 112.
Se cree que el meteoroide inicial, a su entrada en la atmósfera tenía medio metro de diámetro, con una velocidad de 20 km/s y produjo el suficiente ruido para poder ser escuchada su caída unos minutos más tarde, como un estallido, desde cientos de km de distancia. El meteoro sucedió a las 19:57 hora peninsular española, observándose varias fragmentaciones, estelas persistentes y una gran luminosidad.
Tras las primeras llamadas al teléfono 112, el servicio de emergencia alertó a la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos que comenzó la recopilación de testimonios a través de la página web. Dado que los testimonios más favorables indicaban que la bola de fuego había sobrevolado la provincia de Ciudad Real, una primera expedición de la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos recopiló testimonios in situ del bólido, tan sólo dos días después del evento.
Pese a no haber sido registrado por ninguna cámara automática de la red de Bólidos y Meteoritos, se obtuvieron medidas con teodolito basadas en los relatos de diversos testigos visuales desde diversos municipios de la provincia de Ciudad Real. A partir de esos datos se obtuvo una trayectoria preliminar tan sólo una semana después. La fatalidad hizo que las inundaciones asolasen la zona de la Sierra de las Labores, donde fue estimado el lugar de caída. Las tareas de recuperación del meteorito por parte de esta red de investigación comenzaron a mediados de junio, después que un buscador alemán (Thomas Grau) encontrase los primeros fragmentos del meteorito y los mostrase en el Congreso Internacional Meteoroides 2007, en Barcelona.
A partir de ese momento varios investigadores de la Red Española de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos realizaron, con la ayuda de aficionados a la astronomía, una serie de campañas de búsqueda consecutivas entre junio y septiembre de 2007, que han tenido su fruto. Veinte piezas han podido ser recuperadas después de un trabajo muy arduo (se recuperó un meteorito cada sesenta horas de búsqueda). Todo esto ha sido posible gracias a la labor desinteresada de los investigadores de esta red pero también gracias al esfuerzo de voluntarios pertenecientes a la Agrupación Astronómica de Madrid (AAM), la Asociación de Astrónomos Aficionados de la Universidad Complutense (ASAAF-UCM) y del colaborador José Vicente Casado (Lithos). La custodia de las piezas recae ahora en los centros de investigación y museos para que sean exhibidos y estudiados.

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Uno de los pequeños fragmentos encontrados del meteorito «Puerto Lápice», una roca basáltica extraterrestre con una brillante y característica corteza negra.

De todo el material caído, el equipo investigador liderado por J.M. Trigo, del SOMYCE y del CSIC, ha recuperado 20 fragmentos que miden entre 0,5 y 4 centímetros y pesan entre 0,1 y 10 gramos. De ellos, se mostraron 16 piezas en el acto citado.
El suceso es especialmente importante porque se trata de una “eucrita”, una de las pocas rocas espaciales sometidas a un proceso ígneo (enfriamiento y solidificación) similares a las del asteroide Vesta. Las eucritas son muy poco comunes. Sólo se conocen 8 casos en Europa y ninguna en España anteriormente. El equipo pretende saber si realmente procede de Vesta o de otro cuerpo celeste y si colisionó con otro asteroide antes de su llegada a la Tierra.

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Acto de presentación del meteorito Puerto Lápice en la sala de prensa del CSIC en Madrid. De izda. a dcha. los Dres. José M. Madiedo (UHU), Josep M. Trigo (CSIC-IEEC) y Jordi Llorca (UPC). Imagen Alejandro Sánchez (ASAAF-UCM).

Los meteoritos denominados acondritas, entre los que se incluyen las eucritas, proceden de objetos planetarios diferenciados como la Luna, Marte y Vesta, principalmente. Las eucritas son acondritas ricas en piroxeno y plagioclasa, materiales formados en asteroides. Estos asteroides, de varios cientos de kilómetros de diámetro, sufrieron una diferenciación química como consecuencia del calentamiento sufrido en la desintegración de los elementos radiactivos contenidos en los materiales que los formaron.
La identificación de los fragmentos como “eucritas” se confirmó mediante análisis isotópicos del meteorito. Su estructura interna indica que se trata de una brecha regolítica, un material superficial que estuvo expuesto al impacto de otros objetos durante millones de años, lo que aporta aún mayor singularidad al meteorito.
Vesta, lugar del que con mayor probabilidad procedía el meteoroide, tiene un diámetro de 525 kilómetros, posee cerca del 9% de la masa total del cinturón principal de asteroides y es el más masivo después de Ceres. Por su tamaño, pudo retener el calor necesario para convertirse en un cuerpo geológicamente diferenciado poco después de su formación, lo que originó distintos tipos de rocas en su interior. La superficie de Vesta ha sufrido grandes impactos, como el que tuvo lugar hace unos 1.000 millones de años, que ocasionó un cráter de 460 kilómetros de diámetro cerca de su polo sur. La hipótesis es que, fruto de colisiones similares, se desprendieron grandes bloques, conocidos como Vestoides, que se trasladaron a otras regiones en las que tienen más probabilidades de entrar en colisión con la Tierra.
Tras el acto de presentación, La Red de Investigación sobre Bólidos y Meteoritos, ha donado un ejemplar al Museo Nacional de Ciencias Naturales del CSIC, en Madrid, para que sea expuesto al público junto al resto de la colección de meteoritos del museo.

Por Juan Antonio Bernedo.

Fuentes y referencias:
Nota de prensa de la Red de Bólidos y Meteoritos de 31 de enero de 2008.
SPMN.
Público.

1 Comentario

  1. ANIBAL BRANDI:

    que tal, mi nombre es anibal brandi y resido en la ciudad de cancun.
    tengo un meteorito muy raro color oro y superpesado.
    me gustaria que me asesoren como podria realizarle
    un estudio para saber de que se trata.
    de antemano muchas gracias por su atencion.

    ANIBAL BRANDI MORRONE

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