La ESA aprueba Platón
LA ESA aprueba Platón como misión en su programa Cosmic Vision. Platón buscará exoplanetas de una forma similar a como lo hacía la misión Kepler.
Pese a los miles de exoplanetas descubiertos, pocos de ellos son planetas rocosos similares a la Tierra. La mayoría son gigantes gaseosos con pocas o nulas posibilidades de albergar vida. Todavía no hemos descubierto Tierra II. El problema es que los métodos al uso tienen un sesgo que favorece planetas grandes o que orbitan muy cerca de la estrella.
Para remediar esta situación la ESA ha aprobado para su programa Cosmic Vision la misión Platón o Plato (PLAnetary Transits and Oscillations of stars). Esta misión de presupuesto medio ha ganado a otras, como la del observatorio de rayos X y a otra que pretendía traer muestras de un asteroide.
Se espera que este telescopio sea lanzado en 2024 y que sea capaz de encontrar cientos de planetas rocosos y miles de otros tipos.
Platón usará la misma técnica de tránsito que ha venido usando la misión de la NASA Kepler, que fue lanzada en 2009 y que ya no puede seguir con si tarea original debido a un fallo técnico.
Básicamente, si de da una orientación casi perfecta, el planeta en cuestión pasa por delante del disco solar de su estrella bajo nuestro punto de vista y se reduce la luz que recibimos de la estrella. Esto es más fácil de realizar desde el espacio, pues los telescopios terrestres se las tienen que ver con las turbulencias atmosféricas. Desafortunadamente lo interesante es tomar un espectro durante el tránsito lo que nos diría, por ejemplo, la composición atmosférica. Esto, que también es muy complicado desde tierra, no lo podía hacer Kepler. Tampoco lo podrá hacer Platón.
Platón usará una formación de 34 pequeños telescopios con sus respectivas cámaras que operarán de forma conjunta, por lo que conseguirá cubrir un campo de visión muy amplio. Esto le permitirá vigilar muchas más estrellas de una misma región de cielo de manera permanente (algo muy similar a lo que hacía Kepler). En concreto vigilará más de 1 millón de estrellas a la vez. Los 136 CCD usados en sus cámaras cubrirán un total de 0,9 metros cuadrados.
Cada región será observada por Platón durante tres años consecutivos, frente al mes que empleará de la misión TESS (Transiting Exoplanet Survey Satellite) de la NASA para una tarea, misión similar que será lanzada en 2017. En principio la misión Platón será de 6 años.
Además de este objetivo, Platón investigar las estrellas observadas en el área de la Astrosismología. Pequeñas oscilaciones en la estrella se traducen en pequeñas variaciones de brillo, por lo que se pueden saber aspectos interesantes de la estrella, como su edad.
Se espera que Platón identifique planetas de tipo rocoso en la zona de habitabilidad de su estrella. Platón medirá tamaños, masas y edades de los planetas que encuentre, así como sus capacidades de mantener agua líquida en su superficie. Gracias a esta misión se sabrá la estadística real de planetas en los sistemas planetarios, pues no habrá casi sesgo introducido por el sistema de detección. Según Don Pollacco, de University of Warwick y líder del consorcio que ha propuesto Platón, esta misión buscará indicadores de vida en planetas que orbiten estrellas cercanas, en una declaración quizás demasiado optimista.
Se espera que el telescopio extra grande europeo del ESO pueda confirmar y estudiar los planetas que encuentre Platón.
La misión, de sólo 850 millones de euros, será lanzada por un cohete Soyuz desde Guayana y operará en el punto de Langrage L2, a 1.500.000 km de la Tierra, lugar en donde se compensan el campo gravitatorio terrestre y solar.
Para cuando se lance Platón la misión de búsqueda de exoplanetas CHEOPS (CHaracterizing ExOPlanet Satellite) de la ESA ya habrá rendido frutos, pues se espera lanzarla en 2017.
Además de Platón, la ESA lanzará en 2017 el Solar Orbiter para estudiar el Sol y el viento solar. Y en 2020 lanzará Euclides, que estudiará la geometría del sector oscuro del Universo, en concreto la forma y corrimiento al rojo de cúmulos de galaxias situados a 10.000 millones de años luz, una distancia que se corresponde al periodo en el que la energía oscura tomó un papel relevante.
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Fuentes y referencias:
Nota de prensa.
Foto: ESA.
13 Comentarios
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domingo 23 febrero, 2014 @ 9:46 pm
También el satélite Gaia, lanzado el pasado diciembre y ahora en fase de pruebas hasta Mayo, buscará exoplanetas, aunque no es su función primordial. Es una pena que Platón no vaya a tomar espectros de las atmósferas, eso sí que sería interesante. A fin de cuentas todo lo que sabemos de los exoplanetas conocidos se deduce de sus órbitas. En fin, menos es nada en tiempos de escasez. Hasta que no nos invadan y entren en juego los militares, la «defensa nacional» y demás tendremos que conformarnos.
Saludos
martes 25 febrero, 2014 @ 12:48 am
En realidad todo el tema es increíblemente triste, pese a que lo vendan como un éxito.
El presupuesto del programa científico de la ESA para 2014 es de 506 millones de euros, lo que representa un 12,3% del presupuesto total de la ESA. La ESA esta compuesta por los países de la UE más algunos otros. Sólo la UE tiene más de 500 millones de habitantes. Lo que significa que cada europeo paga menos de un euro al año por el programa científico.
Lo científicamente rentable es sólo ese 12,3%, el resto se va en otras cosas que no tienen que ver con la ciencia.
En cuanto a la NASA se podrían decir cosas parecidas, aunque comparativamente la NASA invierte más.
La realidad es que se avanza muy poco y lentamente. Se repiten ideas una y otra vez. ¿Cuántos rovers tenemos que mandar a Marte para saber algo significativamente importante del planeta rojo?
Encima se necesitan años de desarrollo y, a veces, años para lanzar la misión y que alcance el objetivo. A este paso nos moriremos de viejos sin haber avanzado realmente.
No podemos seguir sin saber cosas tan importantes como si la vida es algo común o no en el Universo. Y esto se puede saber si queremos.
Ahora imaginemos que cada europeo va al cine una vez al año en promedio (que es tirar mucho por lo bajo) y que se gasta 10 euros de media en ello. Imaginemos que ve una película de ciencia ficción sobre alienígenas. Al salir del cine no habrá contribuido en nada al avance del conocimiento sobre si hay o no vida más allá. Puede estar, eso sí, más motivado a rascarse el bolsillo en ese aspecto.
Pero imaginemos que no va al cine y ese dinero va al programa científico de la ESA. Eso significaría multiplicar por 10 dicho presupuesto. Es decir, multiplicar por 10 las misiones.
Además se puede hacer algo similar en América con la NASA. Todo sería muy distinto.
O que la gente vaya al cine y que se destine un porcentaje mínimo de la ayuda a la banca a ese fin en lugar que para rellenar los agujeros que unos cuantos impresentables que no pagarán por ello han creado.
Eso por no hablar de presupuestos militares, que es un dinero que directamente es tirado a la basura o dedicado a crear destrucción.
martes 25 febrero, 2014 @ 9:34 am
Por no mencionar cuántas misiones se podrían lanzar con lo que ha costado la compra de WhatsApp por parte del infame e impresentable «granhermano» Facebook.
De hecho se podrían construir 4 o 5 LHC con ese dinero.
El género humano tiene mal pensadas sus prioridades.
miércoles 26 febrero, 2014 @ 2:26 pm
«No podemos seguir sin saber cosas tan importantes como si la vida es algo común o no en el Universo. Y esto se puede saber si queremos. »
Neo,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,,
«Por no mencionar cuántas misiones se podrían lanzar con lo que ha costado la compra de WhatsApp por parte del infame e impresentable “granhermano” Facebook.
De hecho se podrían construir 4 o 5 LHC con ese dinero.
El género humano tiene mal pensadas sus prioridades.»
Neo, neo,,,,,,,,,
Tu espíritu siempre me acaba haciendo reír como cuando veo a un niño con su sentido común, y su espíritu de confianza, confiado en la razón de lo que sus dedos pueden contar, que grita cuando mayores le dicen que sus cuentas no importan.
La ciencia es bella, es grande, pero se aleja de un concepto clave, el mal.
Un concepto real (Y muy humano).
Hace casi 10 años que he leído que los objetivos de las naves que han ido a marte (Que cuestan (mucho)^n , con n-> infinito, dinero), NO es determinar si hay o no vida.
En este momento puede haber perfectamente extremo-filos en marte, con su propia evolución.
¿Pagan?.
Pues una de dos, o no molestan, y se los deja, o molestan, y se los elimina.
Sabes que para 2023 hay previsto un lanzamiento PRIVADO de pequeños ‘actores vivos tipo truman’ (‘El show de truman’) para marte.
¿Como se paga ese viaje?.
Derechos de transmisión a todo el mundo, en tiempo real, de sus vidas.
ESE es el ‘genero humano ‘, neo.
Una raza, mayormente, bastarda.
TE aseguro que habrá casas de apuestas que se enriquecerán apostando quien muere primero en marte.
Incluso quien matará a quien para sobrevivir.
Animo con tu trabajo.
J.
miércoles 26 febrero, 2014 @ 9:57 pm
Efectivamente no hay misiones a Marte para buscar vida, se buscan otras cosas, generalmente sobre la historia geológica del planeta. Los lugares elegidos no son propicios para ese tipo de búsqueda y las naves ni siquiera se mandan esterilizadas.
La razón es que si se busca vida y no se encuentra, como es natural que así sea, entonces el entusiasmo baja y no hay más financiación.
En cuanto a los proyectos privados no son más que sistemas para que algunos vivan del cuento aquí en la Tierra. Ni pueden ni tienen el capital ni la tecnología.
viernes 28 febrero, 2014 @ 8:00 am
Amigo «theti…»:
A veces me resulta difícil entenderte. La ciencia, en sí, no puede tener ética, por lo que no puede ser buena ni mala. El bien o el mal se da en ella cuando la aplicamos y más cuando para hacerlo es preciso asignar recursos -léase dinero-, lo que significa escoger. La cosa está clarísima en algunos casos, como en los presupuestos militares mencionados por Neo y, con toda razón calificados de basura. Pero en la mayoría de las situaciones resulta difícil la elección. Quizá debiéramos dar un orden de prioridades consensuadas -el problema es por quién- y dejar que decidiera un programa instalado en un ordenador. Al menos la cosa parece sería más objetiva. Posiblemente habría que hacer lo mismo con la justicia y con la misma política.
Un saludo cordial hacia las alturas del pensamiento.
viernes 28 febrero, 2014 @ 10:01 pm
Desde luego, Tomás, y eso por no hablar de la definición del mal, que es, por supuesto, esa palabra siniestra: relativo. Si los dinosaurios no se hubieran extinguido quizá nosotros no estaríamos aquí. Lo que fue malo para ellos no lo fue para nosotros, aunque eso depende de si consideramos que existir «durante un rato» es «mejor» que no haber existido «nunca». Probablemente cuando la especie humana no sea ni un recuerdo, el bien y el mal se mudarán a otro planeta para seguir haciendo de las suyas.
Saludos
viernes 28 febrero, 2014 @ 10:33 pm
Desde luego, estimado tomás, la ciencia no puede tener ética, como no la tienen las matemáticas ni el saber en general, pero sí deben tenerla, o eso se espera, quienes las aplican y las desarrollan. No tener ética significaría estar dispuesto a cualquier acción sin considerar en ella otra vertiente que el incremento del saber… y eso trae al recuerdo científicos de siniestro recuerdo medrando con el dolor y la muerte de otros seres humanos. El problema es encontrar una raíz para una ética universalmente aceptable.
En otro orden de cosas, si las naves no han sido esterilizadas, entonces ¿ cómo sabremos que una hipotética vida marciana hallada no ha sido el resultado de nuestra siembra más o menos voluntaria ?
sábado 1 marzo, 2014 @ 7:25 am
Amigo petrus:
Tienes toda la razón. No solo cuando la aplicamos como yo digo, sino también cuando se investiga o se desarrolla, como señalas.
Buscando esa ética, que ha de estar plena de objetividad se me ocurre que existen jueces que se diferencian poco de un ordenador mal programado. Por ejemplo cuando acaban por meter en la cárcel casi de por vida a un delincuente que reitera en delitos menores. He leído alguna vez el razonamiento de «me limito a aplicar la ley». Si es así, si no tiene elasticidad y criterio para interpretar, incluso para echar un pulso a lo evidentemente injusto de algunas sentencias, tanto para bien como para mal del encausado, ¿no sería más útil y rápido encargar la tarea a un programa de ordenador sin conciencia alguna?
Pensando en ello y sin otro ánimo que el de elucubrar sobre el tema -que asombra el que nos haya traído hasta aquí- se me ha ocurrido echar mano y adaptar al sujeto humano las tres leyes de la robótica de Asimov:
1ª Un ser humano no puede hacer daño a otro ser humano o, por inacción, permitir que sufra daño.
2ª Un ser humano ha de obedecer LAS LEYES DE LA SOCIEDAD EN QUE VIVE SALVO QUE ESTAS SE OPONGAN A LA PRIMERA LEY o que, al obedecer, la conculquen. (Consecuencia: nadie podría ser obligado a ir a la guerra (ni a ejecutar a un condenado), ni podría hacerlo por su voluntad.
3º Un ser humano PUEDE proteger su propia existencia siempre que ello no entre en conflicto con las leyes anteriores.(Ese PUEDE permitiría una eutanasia voluntaria)
Bueno, esto, en realidad, es muy complejo y habría que afinar mucho más, supongo. De todas formas he puesto en mayúsculas lo que, para mi tiene relevancia.
Saludos Asimovianos.
sábado 1 marzo, 2014 @ 10:49 am
Todo abogado dirá que el Derecho no busca la justicia, sino la aplicación de la ley. Nada más.
La ley incluso puede ser injusta. Un juez tiene que aplicar la ley, pese a que, a sabiendas, la sentencia sea una injusticia. De otro modo le acusarían de prevaricación.
Es la sociedad la que, en el mejor de los mundos posibles, crea la ley y, por tanto, la ley tiende a ser justa. Digamos que se persigue la utopía. La ley no es más que un consenso social.
La realidad es que son los políticos los que dictan las leyes y muchas veces lo hacen a favor de los poderosos o los intereses de unos pocos o de ellos mismos. Si se mete de por medio el dinero y el soborno todavía más. Al final se dictan leyes injustas a sabiendas. LO que implica, necesariamente, sentencias injustas.
Obviamente esto crea tensiones entre los legisladores y el pueblo sobre el que se legisla. La única solución suele ser el uso de la violencia. La Historia así lo cuenta.
La ciencia no es más que un producto cultural obtenido mediante la aplicación de un método específico, nada más.
La ciencia no es ética o inmoral, en sí, porque esas categorías están fuera de ella. Es el ser humano, al aplicar la ciencia o al hacer ciencia, el que la limita al tener en cuenta los factores éticos que están en el ser humano.
La ciencia no dice nada sobre el sufrimiento innecesario de un animal, el resultado científicos va ser el mismo, tengamos o no empatía por el conejo. Pero nosotros, como humanos empáticos que somos, preferimos no infligir daños innecesarios a una animal que entrega involuntariamente su vida para que algún día algunos humanos se puedan curar de una enfermedad.
domingo 2 marzo, 2014 @ 9:08 am
Claro, Neo, claro. El Derecho, así, es sólo el conjunto de leyes pero, al menos en teoría esas leyes se supone que han de ser justas, o que han de pretender serlo. Y esperamos de nuestros legisladores que aprueben leyes justas. Entonces deberíamos acusar de prevaricación a quienes aprueban leyes injustas. Ellos consideran, pues les conviene, que representan al pueblo, pero no suele ser así. Repito, no suele ser así. Lo malo es que los elegimos por un periodo casi inapelable. Y, como dices, aunque en ese mejor de los mundos posibles, la ley tiende a ser justa, en realidad está en mentes y manos interesadas. Lo malo es que también han legislado que la violencia les pertenece y por tanto resulta necesario que el abuso sea insoportable para que las gentes se movilicen. Incluso el mero protestar puede salir muy caro. Te acusan de terrorista en menos que canta un gallo.
Pues eso, la Historia así lo cuenta. Pero solo puede contar contadas veces -excúseme la redundancia-, cuando la injusticia rebasa todo límite. Y ¿por qué llegar a eso?
En cuanto a tu comentario sobre la ciencia, nada he de añadir, salvo que estoy de acuerdo con tu opinión.
Muy cordiales saludos.
domingo 2 marzo, 2014 @ 11:38 am
La única solución es cambiar a los que legislan.
miércoles 19 marzo, 2014 @ 6:32 pm
Más que cambiar a los que legislan solucione algo. Creo que se debería cambiar el sistema legislativo, Mía que los cambiamos cada elecciones y los nuevos copian lo que hacen los viejos.
Creo que los legisladores deben efectivamente representar sus municipios. Tener oficina allí y llevar los proyectos de ley a discutir en la sociedad. E igual que tenemos representantes por municipios deberíamos tener representantes por actores sociales… Científicos, Empresarios.. Cada uno llevaría más propuestas de ley que las que generaría un político…
Referente al telescopio Platón. ¿Porque un proyecto a tan largo plazo ofrece lo mismo que teníamos ahora con el kepler? Creo qué No hay una exigencia sería de parte de la comunidad científica hacia la ESA. O la NASA. En cierta forma se conforman con que se les da y listo.