NeoFronteras

Higueras castigadoras

Área: Biología — lunes, 18 de enero de 2010

Las higueras castigan a las avispas que no cooperan correctamente con ellas y tratan de obtener beneficios sin pagar el precio acordado.

Foto
Higos. Fuente: Marcos Guerra.

De entre todas las frutas, los higos son aquellos cuya historia es mejor olvidar a la hora de comérselos. Pero son un bello ejemplo de colaboración o cooperación entre especies muy distintas.
Las higueras, pese a lo que parece, son unos árboles muy modernos. La carencia de flores es sólo aparente, pues éstas se encuentran en el interior de los higos inmaduros. El problema viene a la hora de polinizarlas.
Las higueras han encomendado la tarea de su polinización a las avispas. Es aquí donde la historia se hace interesante, representando el ejemplo favorito de relación mutuamente beneficiosa entre dos especies.
El higo inmaduro constituye el lugar donde determinadas especies de avispas van a poner los huevos, un sitio que sus larvas van a considerar acogedor para crecer, pues están protegidas y tienen aporte de comida. La maduración del higo, la cría de las larvas de avispa y la generación de polen están sincronizadas de tal modo que las avispas pueden polinizar las flores de otros higos. La higuera proporciona el incentivo de comida gratis y un refugio, pero a cambio consigue la polinización cruzada. Este tipo de relación se remonta a hace unos 80 millones de años, cuando se cree que surgió por primera vez.
Pero esto no siempre es así. Como en toda relación social compleja siempre puede haber tramposos que quieran aprovecharse del sistema y obtener los beneficios sin pagar un precio. En este caso puede haber avispas que quieran usar los higos, pero que no quieran polinizarlos.
La higuera se las ha ingeniado para crear un sistema de castigo para que la simbiosis no se transforme en parasitismo: dejar caer los higos que no han sido polinizados por la avispas, matando así a su descendencia. Este castigo podría ser esencial a la hora de mantener la relación tal y como es.
Charlotte Jandér, del Smithsonian Tropical Research Institute, publica en Proceedings of the Royal Society este hallazgo sobre el destino de la descendencia de las avispas tramposas.
Jandér evaluó la habilidad de seis especies diferentes de higueras para regular la relación y evitar a las avispas tramposas. Introdujo manualmente avispas libres de polen y avispas que portaban polen en unas bolsas especiales que rodeaban ramas de higuera con sus respectivos higos. Las avispas se abrieron paso al interior de los higos para depositar allí sus huevos. La investigadora pudo comprobar que la higuera dejaba caer los higos en los que se habían introducido avispas libres de polen antes de que las crías de avispa maduraran.
Algunas especies de avispas transportan el polen de manera pasiva en sus cuerpos, mientras que otras lo recolectan activamente en unos receptáculos especialmente diseñados.
Cuando las avispas gastan tiempo o energía en recolectar polen son premiadas, cuando no es así son sancionadas. Curiosamente, en los casos de polinización pasiva, en los que las avispas no necesitan realizar ningún esfuerzo, el castigo está ausente, incluso cuando no hay polinización. Parece que la sanción está presente sólo en los casos en los que ésta es necesaria o tiene sentido aplicarla.
Según esta investigadora la sanción parece ser una fuerza necesaria en el mantenimiento de ésta y otras relaciones de beneficio mutuo. Según ella, en su estudio vieron menos engaño cuando las sanciones eran más fuertes. Resultados similares se han encontrado en las sociedades humanas y en los insectos sociales. “Es muy atractivo pensar que los mismos principios generales podrían ayudar a mantener la cooperación tanto entre las especies como dentro de ellas”, afirma.

Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=2974

Fuentes y referencias:
Nota de prensa en EurekaAltert.
Artículo en Proceedings of the Royal Society (resumen).

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
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15 Comentarios

  1. tomás:

    Muy bonito el artículo. Los otros del día son muy interesantes, hasta el recreativo sentimental. Es que hoy no es mi día, pero este me lo ha alegrado por lo insospechable de la relación, aunque quizá sea más significativo el de las branquias.
    Gracias por vuestras noticias que tanto me animan.
    Un cordial saludo.

  2. Erlik Khan:

    …. de castigo nada. eso es solo una accion humana.
    Si la flor no es fecundada, sencillamete se marchita y cae, como cualquier otra flor. la naturaleza es sabia, pero lo de suponer que la higera castiga, ya va mucho. estamos ortogando a las plantas unos sentimientos humanos, la decision de castigar.
    no hay que ir tan lejos. posiblemente se den casos de que una avispa fecunde una flor de higo y marche, y que posteriormente, otra avispa, sin polen, pero cargada de huevos alcance ese mismo higo y este no caiga por estar ya fecundado y esa supuesta avispa listilla, pueda sacar adelante su prole.

    Erlik Khan.

  3. NeoFronteras:

    Apreciado Tomás:
    ¡De nada! Si al menos sirven para alegrar el día a alguien entonces merece la pena.

  4. Mariela Educultura:

    Excelente artículo! Mi familia tiene higueras y estoy ansiosa para ir a observar esta relación!

  5. NeoFronteras:

    Estimado Erlik Khan:
    Puediera ser cierto lo que apunta, pero ocurre que cuando la avispa no tiene que polinizar activamente el mecanismo no se da, así que la hipótesis del marchitamiento no es correcta.

    Obviamente la higuera no es consciente de este tipo de cosas (ni la avispa). Simplemente la selección natural logra seleccionar individuos con un mejor éxito reproductor, cosa que ocurre cuando hay cooperación y no cuando hay engaño. Las higueras que no «castigan» se reproducen menos que las demás y al final se van seleccionando higueras castigadoras dentro de la población total.

  6. NeoFronteras:

    Estimada Mariela:
    No siempre se da este tipo de relación, sobre todo fuera de los ambientes tropicales. Tampoco se suele dar en cultivo. Muchas higueras se tienen que conformar con otro tipo de polinización o prescindir de ella.
    Al menos en esos casos uno se puede comer el higo con más tranquilidad. Aunque según ciertos estudios los humanos ingerimos, sin querer, una apreciable cantidad de insectos con nuestra dieta.

  7. NeoFronteras:

    Para el que quiera saber más sobre este asunto:
    http://en.wikipedia.org/wiki/Fig_wasp

  8. Anonimo:

    Muy interesante el artículo; bien explicado y ágil de leer. Les agrego a feeds.

  9. lluís:

    ¿»Cuya historia es mejor olvidar a la hora de comérselos? No creo. Esa historia es realmente cómica. O, ¿acaso no resulta gracioso maldecir una higuera por no tener higos a pesar de no ser tiempo de higos? ¿Y sus superpoderes?.

  10. alfonso:

    Solo dar aviso que desde Google Reader al hacer click este articulo así como a otros da como resultado htt-p://s-tor-edr-ug.com/neo-front-eras.com … lo cual es claramente es un error.

  11. NeoFronteras:

    Por favor, si a alguien le pasa lo mismo que a alfonso que lo comente (la dirección errónea ha sido convenientemente editada para que no lo indexen los robots). Aparte de los típicos comentarios de spam, últimamente NeoFronteras ha sufrido ataques bastante graves que han incluido uno de denegación de servicio desde 5000 ordenadores (supuestamente zombis).
    También algún spammer se aprovechó de una vulnerabilidad del software para introducir código que creaba spam dirigido al robot de google. Ésta fue difícil de resolver, pues no se veía con el navegador. Sólo era visible para dicho robot para que así Google indexase spam asociado a las noticias que aquí aparecen, cambiando los títulos de los artículos entre otras cosas.
    Otro caso relacionado con los lectores de feeds fue solucionado. Sin embargo, éste del lector de feeds de google no se puede resolver si no se ve. No soy capaz reproducir el problema, todo sale bien y correctamente.
    Si alguien tiene alguna teoría que por favor la aporte. Borrar la caché del navegador puede ser una buena idea. Si después de esa acción ya no aparece la basura es que ya está solucionado.

    La principal conclusión es que este tipo de software es una basura, principalmente porque se gastan todos los esfuerzos en cuestiones cosméticas (a veces internas que sólo el editor ve) y demasiados pocos en seguridad. Además tiene problemas de diseño a nivel de su filosofía de trabajo.
    La segunda es que si esto sigue así se cierra para siempre esta web y santas pascuas. El esfuerzo de tratar de evitar estos problemas es ya muy excesivo.
    La tercera es que si alguien está decido a eliminar físicamente a algún spammer que por favor lo haga, pero que lo haga lentamente :-)

    Por cierto, muchas gracias a Alfonso y a otros que informan de este tipo de problemas.

  12. NeoFronteras:

    Aclaración sobre la higueras cultivadas:
    Las higueras que se cultivan para producir higos son en realidad mutantes de higueras silvestres. Se cree que se empezaron a cultivar por esquejes hace unos 10.000 años. Son una variedad llamada partenocárpica, en la que la fruta madura sin necesidad de polinización. Además se queda pegada al árbol y su fruto es más dulce y agradable. Este tipo de higueras domesticadas son estériles ya que no producen semillas, recordemos que las reproducimos por esquejes.
    En las silvestres, cuando la avispilla pone los huevos (y deposita el polen) la higuera premia a las larvas produciendo un fruto más suculento que se queda en la rama y no cae al suelo. A la vez que las larvas crecen se producen las semillas.
    En realidad, para el caso de la variante mutante que cultivamos, el árbol «se equivoca» y produce un premio similar al destinado a las avispas sin que medie contraprestación alguna. En la naturaleza esta variedad mutante habría desaparecido en la primera generación. ¡Suerte que alguien la encontró y cultivó! Aunque dado el éxito del cultivo, la higuera doméstica sí saca algo de esta nueva relación simbiótica, pues se reproduce gracias al ser humano, aunque se obtengan clones. Nuestro papel es similar al de las avispas.
    Otros mutantes que también comemos: almendras dulces, nectarinas, plátanos…

  13. RicardM:

    Simplemente por provocar: ¿Podríamos considerar los frutales mutantes mencionados como transgénicos de origen natural?

    Saludos.

  14. tomás:

    A RicardM:
    Por la mutación, pienso que sí, pero dada la necesaria intervención del hombre para su pervivencia, según explica Neo y si por natural entendemos que no mediemos, entonces será no.
    Así que si y no.
    Un cordial saludo.

  15. Juan Díaz:

    El filósofo Paul Chauchard fué de los primeros en detectar esta ecología inteligente al interior de insectos sociales, y fenómenos rituales de especies inferiores. Del mismo modo el filósofo Inglés Spencer fué el primero en hablar de evolución desde al ámbito de las ideas generales, aún no testeadas. Este artículo habla bien no sólo de la ciencia experimental, sino de la ciencia naturalista, y del humaniso filosófico, pero, sin embargo, no puede generalizarse sin más a la sociedad humana, como el propio Chauchard nos advertía.

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