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La minería ilegal del oro amenaza la reserva amazónica peruana de Madre de Dios.

La región amazónica de Madre de Dios en Perú está siendo destruida por los mineros ilegales que talan la selva y contaminan el medio con mercurio. Esta parte del mundo de 400 km de ancho limítrofe con Brasil constituye uno de las pocas regiones selváticas vírgenes interrumpidas que aún quedan en la selva amazónica. Atrae a unos 100.000 turistas que cada año quieren ver la exultante selva tropical.
Perú va ser la sede del congreso COP20 de la Naciones Unidas sobre el clima del 1 al 12 de este mes de diciembre, congreso en el que los delegados trataran de llegar a acuerdos y medidas sobre las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto contrasta con que en Madre de Dios 50.000 cazadores de fortuna usan maquinaria pesada todos los días para destruir la selva, eliminar el suelo y extraer el oro que hay en el subsuelo, dejando todo envenenado con mercurio, un metal pesado neurotóxico.
Ya se han destruido con estas prácticas mineras 50.000 hectáreas de bosque tropical húmedo en la parte del sur de Madre de Dios, según las autoridades peruanas, y se tardarían 40 años en recuperarlas.
Hay una auténtica invasión de buscadores de todo el mundo que van a esa región a extraer oro de forma ilegal. Algunos grupos llegan a extraer 400 gramos de oro del al día, que es pagado a 25.000 dólares el kilo en el mercado negro. Las reservas de oro de Madre de Dios son importantes y una suculenta gran tentación. Nada parece que se vaya a parar la destrucción. Ahora mismo Perú es el quinto productor mundial de oro, con unas exportaciones anuales de 164 toneladas de las que un 20% tienen una procedencia ilegal.
Los 50.000 mineros ilegales de Madre de Dios se organizan en campamentos en donde reina la violencia con armas de fuego, produciéndose varios muertos a la semana. A veces los cuerpos de los asesinados pasan días a la intemperie sin que nadie haga nada y otras veces a las personas, simplemente, se le hace desaparecer y nadie vuelve a saber nada de ellas. La policía, si hace acto de presencia, es pagada en oro para que haga la vista gorda. Una vez se la sobornó con 160 kilos del precioso metal.
Estas explotaciones ilegales arrojan de 30 a 40 toneladas de mercurio al año en la región y este metal pesado pasa a la cadena alimenticia, sobre todo al pasar a los peces. El mercurio se usa para purificar el oro.
Ciertas partes de la selva están ya permanentemente dañadas. Las poblaciones indígenas tienen niveles de mercurio en sus cuerpos de hasta 5 veces superiores a lo aceptado internacionalmente
El gobierno peruano ha lanzado diversas medidas, incluidas las militares, para tratara de acabar con la minería ilegal en la región, de momento sin mucho éxito. Pero dice que tiene como objetivo su eliminación.
Según Eduardo Salhuana, jefe de la federación de mineros de Madre de Dios, se trata de una economía de la extracción y la gente vive de lo que extrae de la Naturaleza. En otras regiones se extrae caucho o madera y ahí oro. “Con la llegada del congreso COP20 van a mentir al mundo entero porque nada ha mejorado aquí. No reina la ley y el estado está ausente”, añade.

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Fuentes y referencias:
Nota de prensa de la AFP.
Foto: MinningPress.