Se inaugura la astronomía multimensajero
Al final se confirman los rumores: el pasado agosto la colaboración LIGO-Virgo detectó una colisión de estrellas de neutrones y se encontró la contrapartida electromagnética.
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Como ya saben los lectores de NeoFronteras, desde este verano se comentaba que era posible que la colaboración Ligo-Virgo hubiera detectado la emisión de ondas gravitacionales (OG) procedentes de la colisión y posterior fusión de dos estrellas de neutrones. Además, según decía el rumor, se habrían encontrado las contrapartidas en diversas regiones del espectro electromagnético, pues se había apuntado con diversos telescopios a la supuesta zona de procedencia de dichas OG. Hoy, en una conferencia de prensa, han confirmado los rumores. Con esto se inaugura la astronomía multimensajero y una revolución en Astrofísica.
La detección de OG y se produjo el pasado 14 de agosto, así que el evento ha sido denominado GW170817. Ese día se hizo historia. La traducción a sonido de esta OG se puede escuchar aquí.
Como todos ya sabemos, las ondas gravitacionales se desprenden de manera natural de la Relatividad General. De la misma manera que una carga eléctrica acelerada emite ondas electromagnéticas, una masa acelerada produce ondas gravitacionales. Pero las ondas gravitacionales no son ondas que se transmitan dentro del espacio, como les pasa a las electromagnéticas, sino que son distorsiones del propio espacio en propagación.
Las ondas gravitacionales son muy débiles. Tan débiles que se necesitan fenómenos cataclísmicos relativamente cercanos para poder detectarlas directamente al límite de la tecnología actual. Las explosiones de supernovas o la colisión de estrellas de neutrones, por ejemplo, generan ondas gravitacionales que aquí vemos como una contracción de una fracción del tamaño de un protón sobre una escala de 1 km. Para poder medir esto se usan interferómetros láser de tamaño kilométrico (LIGO y Virgo).
Como las estrellas de neutrones son menos masivas que los agujeros negros, la fase final de colisión entre estos dos objetos dura más y la emisión de OG detectable es también más prolongada. En este caso duró nada menos y nada más que 100 segundos. Este plazo de tiempo permite estudiar en detalle las OG y, además, apuntar radiotelescopios y telescopios infrarrojos, ópticos, ultravioleta, rayos X y rayos gamma. La contrapartida fue observada en todas estas gamas de frecuencias.
Dada la naturaleza de los rayos gamma, los detectores de este tipo de fotones no pueden apuntarse y están viendo casi todo el cielo a la vez, siempre por encima de la atmósfera. En este caso los observatorios de rayos gamma Fermi e Integral detectaron estallidos de rayos gamma procedentes de la misma región del cielo. Era un estallido normal como los que usualmente se detectan. El mensaje de LIGO-Virgo llegó a los responsables de estos observatorios cuando ya se había detectado el estallido de rayos gamma correspondiente. La comparación final de tiempos nos dice que las OG llegaron 2 segundos antes que el estallido de rayos gamma.
Los estallidos de rayos gamma han sido una misterio hasta ahora, pues no se sabía su origen. Existía la teoría de que eran producidos por la colisión de estrella de neutrones, aunque faltaba la confirmación.
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Pero hay más. Se apuntó con telescopios convencionales a la zona del cielo en donde se produjo el evento y se encontró también su contrapartida óptica en la galaxia elíptica NGC 4993 (imagen de arriba) y también en la banda infrarroja, de radio, X, etc en los minutos, horas y días posteriores. El punto de luz visible que se observó de esta kilonova comenzó con un color azul y con los días se hizo rojizo. Es la primera vez que se ve una fuente de ondas gravitacionales. Algunas de las observaciones sólo fueron posible gracias que algunos telescopios estaban automatizados.
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El telescopio espacial Hubble también observó el evento en repetidas ocasiones. En esta imagen tomada por él se aprecia la evolución de la kilonova.
Las observaciones realizadas han confirmado otra teoría: parte de los elementos pesados proceden de la colisión de estrellas de neutrones. Oro y platino, por ejemplo, se formaron durante esta colisión. Esto se ha confirmado estudiando la contrapartida electromagnética por espectroscopía.
Por tanto, amigo lector, quizás ese oro de su anillo se sintetizó hace millones de años en el horno termonuclear de la colisión de dos estrellas de neutrones.
Así que el 14 de agosto pasado se confirmo la predicción de Einstein de que objeto pesados orbitando uno alrededor de otro emiten OG (otra vez), que la fuente de los estallidos de rayos gamma está en la colisión de estrellas de neutrones y que estas colisiones producen elementos pesados de la tabla periódica. Todo encaja como las piezas de puzzle maravilloso.
La galaxia NGC 4993 está situada a una distancia de 130 millones de años luz de nosotros en dirección a la constelación de Hidra, por lo que esta quinta detección de OG es la más cercana detectada, algo necesario, dado el escaso brillo en OG producido por este tipo de choques en comparación con la colisión de agujeros negros.
Veremos en próximas fechas un aluvión de los distintos estudios y observaciones sobre este evento.
Esto no es más que el principio. Posteriores observaciones nos dirán más cosas de este tipo de objetos. Así, por ejemplo, se cree que quizás se pueda estudiar el interior de estrellas de neutrones, sus posibles terremotos y sus montañas de un centímetro y de masa planetaria usando OG.
Hoy también ha nacido la Cosmología basada en ondas gravitacionales al poderse determinar la constante de Hubble usando la onda gravitacional GW170817. Es posible usar su contrapartida óptica como candela estándar que permita estudiar la expansión del Universo. Aunque, de momento, el error es relativamente grande, en el futuro se conseguirá refinar más cuando se tenga mejor estadística (se espera detectar cientos de estos eventos en un futuro cercano). La ventaja es que es independiente de otros métodos.
Para poder detectar la emisión de OG procedente de una explosión de supernova tendremos que tener un suerte, pues en ese caso son mucho más débiles. Se cree que, con la actual tecnología, se puede detectar uno de estos casos cada 50 años, lo que corresponde a supernovas cercanas.
Se calcula que estas estrellas de neutrones se formaron a partir de explosiones de supernovas cuando el Universo sólo tenía 2000 millones de años. Necesitaron más de 11.000 millones de años para colisionar. Durante todo ese tiempo el sistema estuvo emitiendo OG y perdiendo energía, por lo que se acercaban cada vez más. Sólo hemos podido detectar la última fase.
En este caso, una estrella de neutrones con una masa de entre 1,36 y 1,60 masas solares colisionó con otra estrella de neutrones con una masa de entre 1,17 y 1,36 masas solares para dar lugar a un objeto de unas 2,74 masas solares. En el proceso se emitió un equivalente en energía gravitacional de 0,025 masas solares.
No se sabe seguro si el resultado de esta colisión es un agujero negro o una estrella de neutrones muy pesada, pues su masa está en la frontera de los dos casos considerando la barra de error. Chandra fue capaz de detectar la emisión de rayos X y es muy posible que se deba a la emisión del agujero negro recién formado.
Algún día, usted, amigo lector o el que esto escribe, moriremos. Pero personas como nosotros hemos vivido este momento, este día en el que hemos visto cambiar el conocimiento del ser humano. Nadie nos lo puede robar. Agradezcamos a los que nos precedieron el poder beber ahora del cáliz del éxito científico, del conocimiento que nos abre los ojos y nos quita prejuicios de esta mente que evolucionó una vez, hace no tanto tiempo, en la sabana africana.
Esta hazaña intelectual, este logro histórico, nos habla de la mejor parte del ser humano, la parte que le acerca a las estrellas, la parte que nos muestra que si nos unimos, si colaboramos, somos capaces realizar las cosas más grandes, nobles y bellas. Estos seres, que son una de las maneras, quizás la única, que tiene el Universo de contemplarse a sí mismo, estas hormigas perplejas tienen la posibilidad de superar los problemas que se ciernen sobre ellas, que en gran parte han creado ellas mismas, y buscar la justicia, la belleza y la sabiduría que sólo el conocimiento puede proporcionar. Tenemos el poder y la inteligencia, sólo nos falta voluntad.
Hoy somos más grandes que hace unos días, hemos llegado más lejos, somos más sabios. Nos hemos puesto de puntillas y con la punta de los dedos estamos acariciando las estrellas.
Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=5760
Fuentes y referencias:
Artículo original.
Sobre el origen de los elementos pesados.
Confirman el origen de los elementos pesados.
Se detectan directamente ondas gravitacionales.
Actualizan LIGO.
LIGO anuncia la detección de ondas gravitacionales por segunda vez.
Tercer evento detectado por LIGO.
Primer evento Ligo-Virgo.
Expectativas en ondas gravitacionales.
Imágenes tomadas de la conferencia de prensa.
37 Comentarios
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lunes 16 octubre, 2017 @ 8:34 pm
Esta entrada ha sido escrita en directo según avanzaba la rueda de prensa. Desde su publicación se han corregido erratas y actualizado contenido.
martes 17 octubre, 2017 @ 12:08 am
«Las observaciones realizadas han confirmado otra teoría: parte de los elementos pesados proceden de la colisión de estrellas de neutrones. Oro y platino, por ejemplo, se formaron durante esta colisión. Esto se ha confirmado estudiando la contrapartida electromagnética por espectroscopía»
Una pregunta que quiero hacer: ¿se generarían elementos más pesados por el método de que el núcleo del átomo empiece ganando neutrones y después alguno de esos neutrones se sustituya por protones, o qué otra hipótesis manejamos?
martes 17 octubre, 2017 @ 3:53 am
Esta muy buena la pregunta de Miguel… Yo también tengo otra.
¿Porque a las ondas gravitacionales no las ralentiza la expansión del espacio? Si hay más espacio, la oscilación del mismo debe demorar lo mismo que la luz.
martes 17 octubre, 2017 @ 5:31 pm
Estimado Miguel Ángel:
La belleza de todo esto es que aúna astrofísica, física nuclear, relatividad general, cosmología, etc. Los expertos en nuclear pueden explicar la formación de esos elementos. En la segunda y tercera referencia de habla de ello.
martes 17 octubre, 2017 @ 5:32 pm
JavierL:
Las OG viajan a la velocidad de la luz, no se ralentizan con la expansión cosmológica, aunque su longitud de onda sí se puede ver alargada por dicha expansión.
martes 17 octubre, 2017 @ 5:37 pm
Otro vídeo:
https://youtu.be/FT8I4p15LBY
martes 17 octubre, 2017 @ 6:06 pm
Estuve viendo todo esto en directo. ¡ Que fascinante momento!. La astronomía multimensajero dará mucho de sí. No solamente en el tema de la nucleosíntesis, que parece confirmada tal como se venía entendiendo,además en qué lugares del espacio se forman los elementos pesados. Y en general entender mejor la física atómica. Acaso sirva también para cuestiones como la materia/energía oscura.
En cuanto a la pregunta del amigo Miguel Ángel, no sé si la entiendo bien, pero en general los neutrones sirven para impedir que los protones queden estabilizados en los nucleones y no se repelan, puesto que, de repelerse el átomo se desintegraría.Por tanto lo de sustituir protones por neutrones, podría tener consecuencias nefastas. Pero ya dije que igual no entiendo su pregunta.
martes 17 octubre, 2017 @ 8:11 pm
Si de la chistera del Big Bang salimos nosotros, hormigas perplejas, es necesario que la chistera, de una u otra forma, en el momento cero, tuviera la capacidad , el potencial adecuado, para producirlas. Y no debemos contar con el azar, porque el azar puro no existe. Por el mero hecho de definirlo, deja de serlo, pues tiene una norma y una ley que es :» No debe tener ninguna ley «, luego es contradictorio . De algún modo, las hormigas y su proceso productivo estaban en la chistera desde el principio. Lo mismo que mi preciosa nariz estaba en mi precioso y desnarigado embrión de dos días. Tal vez no seamos solo hormigas, sino embriones de algo mucho más valioso. Para mi coleto, quiero suponer que solo soy una larva o una ninfa de algo que llegaré a ser más adelante. En resumen, que no hormiga perpleja , sino larva de hormiga sabia…
martes 17 octubre, 2017 @ 8:21 pm
Gracias por la respuesta maese neo… Pero aun quedo con dudas. A ver.. Entiendo que si viajan a la velocidad de la luz, igualmente la diferencia de 2seg lo ratifica así… Pero lo que no logro entender es por qué
la expansión del espacio crea nuevo espacio. Pero si la og no se ralentiza es como si no tuviese que atravesar Ese nuevo espacio. A diferencia de la luz..
Seguro estoy entendido mal la naturaleza de la oscilación.. Pero busco ese punto en Internet y no consigo algo esclarecedor.. Si alguno me hecha una mano lo agradezco
martes 17 octubre, 2017 @ 11:19 pm
NO, no se ralentizan, sólo puede cambiar su longitud de onda. Lo de los 2 segundos no tiene nada que ver, entre otras cosas porque ambos fenómenos no son simultáneos.
miércoles 18 octubre, 2017 @ 4:08 am
Ah OK… Pensé que eran simultáneos.. Pero verdad que las ondas que empezamos a identificar empiezan en los momentos finales antes de fundirse…
Y claro me decía que si tanto la luz como las og viajaban a la velocidad de la luz… Pero ya con eso queda claro… Y aprovecho para aclarar que escogí la peor palabra (ralentización) ya que no me refería que fuera más lenta que la luz sino a que recorriera mayor espacio…
Pero ya esta todo aclarado a saber que no son simultáneos. Muchas gracias
jueves 19 octubre, 2017 @ 9:09 am
Querido «petrus»: Muy fina tu original contradicción -al menos para mí, que no había tenido noticia de ella nunca-. Estoy de acuerdo en cuanto dices salvo en la bella frase final: bella, pero incierta, pues la evolución no es predecible; quizá la hormiga perpleja derive, no hacia la sabia, sino hacia muy estúpida; al menos a la vista del estado presente de nuestra sociedad.
jueves 19 octubre, 2017 @ 10:06 am
Querido amigo Miguel Ángel:
Tampoco estoy, como Lluís, muy seguro de comprender tu cuestión, ni soy un experto en física nuclear como propone Neo -salvo excepciones, comentamos por aquí, aficionados enamorados de la ciencia que nos atrevemos a pensar-. Mi idea es que esas fuentes tremendas de neutrones que son las EN, en su choque, además de las ondas OG, emiten energía y se desprenden de grandes cantidades de paquetes de neutrones. Supongamos que uno de esos paquetes lleva 235 neutrones, que es bombardeado por algún rayo gamma, capaz de romperlo, entre otras posibilidades, en 143 neutrones más 92 protones y 92 antineutrinos, de los que se sospecha son neutrinos mas que con un espín algo así como contrario. Sabemos que las emisiones de energía en forma de neutrinos son enormes en estos procesos. Bueno, no sé, pero me parece que tendríamos un átomo de uranio.
De todas formas me remito a correcciones de Neo o de Llís, y de cualquier otro más enterado que yo.
Un fuerte abrazo.
viernes 20 octubre, 2017 @ 9:14 pm
Es interesante mencionar que Virgo no detectó esta señal. Sin embargo, las señales en los interferómetros de Livingston y de Hanford eran tan grandes que Virgo tendría que haber observado la señal. Por tanto, la señal tuvo que llegar desde el punto del cielo que está en el ángulo muerto de Virgo. Gracias a esta casualidad se ha podido triangular la fuente de GW170817 con mayor precisión que en el caso de GW170814.
domingo 22 octubre, 2017 @ 8:24 am
Había preguntado en. http://neofronteras.com/?p=5746#comments
Sobre la amplitud de las ondas gravitatorias y si también disminuye por el cuadrado de la distancia… Y en caso afirmativo. Quite peligro sería esas ondas para la vida si estuviera a pocos años luz de nosotros…
Si a esa distancia es la longitud de un proton, más cercano ¿sería un metro? ¿Algo así se sentiría?
domingo 22 octubre, 2017 @ 11:27 am
Sí, es una cuestión geométrica. La intensidad de casi cualquier fenómeno disminuye con el cuadrado de la distancia en un espacio tridimensional euclídeo.
martes 24 octubre, 2017 @ 5:02 pm
Pues en ese caso estuve jugando con la calculadora y si recibimos variaciones del radio de un proton 10^-15.. .es un verdadero tsunami lo que dice en el origen… Pero ya a 10 años luz es una variación por 10^-8
No creo que sea nada catastrófico que suceda cerca.
Sin embargo que raro que no hubieramos detectado antes ondas más cercanas.
miércoles 25 octubre, 2017 @ 2:18 pm
No sé de qué datos has partido, pero me parece que no me gustaría estar cerca de dos EN o dos AN que colisionen.
miércoles 25 octubre, 2017 @ 7:55 pm
Solo me fui a Wikipedia y busque que la distribución tridimensional te da una intensidad por la ecuación i=Ao^2/r^2
Y como dije me puse a jugar con la calculadora para tener una aproximación del comportamiento…
Meti como intensidad el radio del proton que son las occilaciones que detecta ligo. Distancia de 1 40 millones de a años luz a metros. Y me dice que tendrias obsilaciones de decenas de kilómetros en el origen
Luego como no quiero estar cerca y mi curiosidad es que le pasaría a un planeta a 10 años luz y note que ya había disminuido bastante. Como dije me daba 10^-8 metros.. Y es que decrece muy rápido..
Obviamente… Es un cálculo aproximado.
Pero me queda la duda de si un evento sucediera en nuestra galaxia, ¿no lo podíamos detectar antes con la sensibilidad anterior?
jueves 26 octubre, 2017 @ 10:10 am
Es que yo creo que no debe hacerse así. No es el protón en que oscila, sino el espacio. La medida en los interferómetros es una comparación de que lo detectado mide una deformación del tamaño de un protón. Según tu cálculo, al ser tan amplias las oscilaciones serían, en origen, tan largas como ondas de radio; vamos que ni notaríamos el choque de esas masas descomunales. Piensa que algo ha de estar mal, a no ser que yo no te esté entendiendo.
Un abrazo.
jueves 26 octubre, 2017 @ 3:52 pm
No amigo tomas, no estoy hablando de que el proton oscile.
Es el espacio el que oscila como bien dices. Yo indico que si Acá detectamos oscilaciones (del espacio) cuya amplitud es del orden del radio del proton. Allá en el origen habría oscilaciones (del espacio) en torno a decenas de kilómetros
jueves 26 octubre, 2017 @ 4:12 pm
Y lo peor, es que esas oscilaciones son del espacio tiempo así que esas decenas de kilómetros tendrían su análogo en tiempo. Haría ir al futuro y «pasado» no se en que medida.
Si no estoy equivocado entonces estas ondas (sin importar la amplitud) seria una prueba que se puede viajar al pasado.
Ya escucharé sus opiniones
viernes 27 octubre, 2017 @ 10:06 pm
Amigo Javier L
Desde mi “especulativa” opinión creo que es imposible viajar para el pasado, menos aún para el futuro, por ambos no existir. Para más detalles de mi razonamiento mira mi entrada de; NeoFronteras de 03/04/2016 La Luna y el Campo terrestre..
Veamos lo del viaje para el pasado.
Supongamos que tenemos un reloj funcionando en condiciones “normales” cerca y antes de producirse el choque de las estrellas de neutrones. Pongo normales entre comillas porque este ritmo no puede ser como el de aquí en Tierra, por causa de la gran deformación allí del Espacio-Tiempo (gravedad), pero sigo adelante.
Sabes que aquí se ha comprobado, que relojes atómicos colocados a diferentes alturas tienen diferente ritmo de funcionamiento, precisamente por ser diferente la densidad de energía del campo gravitacional terrestre en ellos.
En el momento del choque (también antes, aunque menos) se produce la OG Tsunami. Cuando esta llegue al reloj traerá junto una gran densidad de energía (gran deformación del Espacio-Tiempo -aumentando su densidad -Gravedad-) Esta modificará el ritmo de evolución de cualquier proceso que allí se esté realizando (en este caso reloj disminuyendo su ritmo). Enseguida el espacio se distenderá (disminuirá de densidad de energía) en un valor aproximadamente idéntico y opuesto al anterior. Como consecuencia el ritmo del reloj debe aumentar en valor prácticamente idéntico, compensando el efecto anterior.
O sea, lo que se acelera primero se pierde justamente después. Entonces si el reloj no se desintegra, no se nota en su total de tiempo, que ha pasado el Tsunami.
Independientemente de este proceso, la información que parte del evento (reloj) se hace en forma de radiación Electro-Magnética con la velocidad de la Luz, por tanto, acompañando la OG en todas las direcciones del Espacio-Tiempo, y disminuyendo su intensidad con el cuadrado de la distancia.
Ya me dirás.
sábado 28 octubre, 2017 @ 12:20 am
Mi querido amigo Tomás:
Sobre la formación del oro y otros elementos pesados que le preguntaba a Neo:
https://es.wikipedia.org/wiki/Captura_neutr%C3%B3nica
Abrazos.
sábado 28 octubre, 2017 @ 12:53 am
Un hipotético viaje al pasado generaría paradojas del tipo que señalas, amigo Eduardo Rincón, y es una de las razones por las que la Física actual también se inclina a pronosticar que quizá no sea posible.
Pero el viaje al futuro no solamente es posible, sino que es una de las predicciones de la relatividad de Einstein que ya hemos podido comprobar, por ejemplo, con el sistema GPS. Si has viajado alguna vez en avión ya has viajado también al futuro, aunque creo que recordar que solo serían unas cienmillonésimas de segundo.
https://lidiaconlaquimica.wordpress.com/2015/11/27/el-gps-y-la-relatividad/
Un abrazo.
sábado 28 octubre, 2017 @ 8:22 am
No estoy tan seguro amigo Eduardo
Una onda partiría del medio luego tendría una cresta y no vuelve al medio sino que hace un pico hacia el otro lado (valle) y luego es que vuelve al medio
Así que del medio a la cresta acelera el reloj, de la cresta al medio desacelera ¿y del medio al valle? No se ve como que se ralentiza, sino que agarra reversa… Y luego se vuelve a compensar
sábado 28 octubre, 2017 @ 12:35 pm
Amigo Javier L
Creo que da igual cualquiera que sea el punto de partida del que se inicia el análisis del evento. La onda la considero con un máximo de energía en su cresta, nula en su medio y mínima en su valle
En tu último párrafo preguntas, ¿“y del medio al valle?”
Respuesta, pues continúa desacelerando hasta un mínimo.
Después, en el momento que se inicia el “nuevo “aumento de densidad de energía (siguiente onda), el reloj empezará a acelerar, pasará por el punto neutro (medio de la onda) y continúa acelerando hasta el pico de esta, para volver a empezar un nuevo ciclo. Claro que cada ciclo tendrá un poco menos de Energía que su anterior.
sábado 28 octubre, 2017 @ 1:29 pm
Amigo Miguel Ángel.
Particularmente sustituyo el Tiempo por Ritmo de Evolución. Creo que Einstein no llegó a definir la objetividad de su tiempo. Tengo entendido (no sé si correcto) que lo definió como operativo (lo que marcan los relojes). E infelizmente por ahí paró.
Entonces si un determinado objeto lo aislamos completamente de la influencia externa de su entorno y evitamos totalmente su evolución (lo que implica que también tendríamos que dejarlo Absolutamente parado- creo que esto es imposible-). Él Tiempo en él pararía.
Mientras tanto los objetos de su entorno continuarían evolucionando (envejeciendo) y alejándose de él.
Al desactivar el proceso y reiniciar su evolución, este objeto estará en otro entorno seguramente con objetos bastante diferentes y (muy lejos espacialmente) del entorno primitivo. O sea, creo que este no es su futuro.
Para alcanzar su entorno primitivo tendría que acelerar bastante, modificando drásticamente su ritmo de evolución. Creo que esta parte acelerada de su evolución no puede ser idéntica a la que hubiese tenido sin “congelar” (acompañando normalmente su entorno). Ya que, en ese intermedio, el Espacio-Tiempo ha mudado por causa de su expansión, y fatalmente influye en él. Por tanto, el objeto que alcanzará al entorno primitivo será diferente del original.
Si este raciocinio es correcto, creo que es imposible viajar para “nuestro” futuro, pues, aunque consiguiéramos viajar para el futuro de nuestro entorno, nosotros seriamos diferentes, y automáticamente m0dificariamos por influencia, el del propio entorno.
Lo del GPS es totalmente coherente y normal, que los relojes entre ellos y con el de Tierra funcionen a ritmos diferentes, ya que están en puntos del Espacio-Tiempo con diferente densidad de energía, (gravedad) y además moviéndose relativamente a Tierra.
Menudo rollo… ya me dirás.
Un abrazo.
sábado 28 octubre, 2017 @ 2:06 pm
Perdon, voy a colocar de nuevo el cuarto parragrfo pues faltó su final para dejarlo mas claro
Al desactivar el proceso y reiniciar su evolución, este objeto estará en otro entorno seguramente con objetos bastante diferentes y (muy lejos espacialmente) del entorno primitivo. O sea, creo que este no es su futuro. Este sería su presente, coincidiendo con el presente del nuevo entorno.
sábado 28 octubre, 2017 @ 11:47 pm
Amigo Eduardo, no sabemos si es el cuerpo humano resistiría velocidades próximas a la de la luz, pero suponiendo que así fuese, un cosmonauta podría hacer un viaje de ida y vuelta por el espacio y regresar, siendo todavía joven, a una Tierra en la que ya no encontraría ninguna cara conocida porque aquí habría pasado mucho más tiempo.
A partir de ahí, cabe cierta especulación si planteamos la pregunta de si el futuro cambiaría al irse el cosmonauta. Pero tenemos el mismo problema: que no podemos rebobinar la cinta para ver que hubiese ocurrido en otro caso.
A modo de ejercicio teórico, podemos imaginar que rebobinamos la cinta muchas veces y en alguna de esas simulaciones el futuro cambia drásticamente porque el cosmonauta se queda en la Tierra y uno de sus nietos acaba siendo presidente de EEUU, por ejemplo. O en otro caso, el cosmonauta tampoco viaja y se muere al día siguiente del hipotético viaje que tendría que haber hecho: ¿no cambiaría el futuro, o se daría alguna suerte de efecto mariposa?
Un par de abrazos.
domingo 29 octubre, 2017 @ 10:15 am
Creo que el problema, Miguel, no es la velocidad. Me parece que el cuerpo humano y cualquier otra cosa puede reisitirla por grande que sea. El problema son las aceleraciones, pero no la velocidad uniforme.
Viajar hacia el futuro lo hacemos continuamente y eso no hay quien lo pare. Para mí es incrementar el desorden. De todas formas, mirado, desde la relatividad, también tenemos la vida propia de los mesones mu que se desintegran espontáneamente en un electrón y una partícula neutra. Según la física clásica, la duración propia de su vida media, estadísticamente, es de dos millonésimas de segundo, lo cual, con una velocidad del 99,5 % de la de la luz, haría que recorriesen una distancia de unos 600 m Pero utilizando la relatividad calculamos que el recorrido es de 6000 m, que concuerda con las mediciones. Ello permite que algunos mesones que llegan del espacio alcancen la superficie terrestre. (He tenido que repasar mis antiguos apuntes que ya no sé si estarán al día)
En cuanto a tu razonamiento en tu 30, parece evidente que el «adelantamiento» del tiempo de unos respecto de otros de manera que sea posible cambiar el futuro, es altamente especulativo. Porque alguien irá en la nave, ya que si va sola, nada tiene sentido; ese alguien es como el notario que da fe del estado en que se fue y en el que llega. Todos han viajado hacia el futuro; solo el astronauta ha permanecido yendo hacia el futuro más lentamente. En todo caso, poniendo las cosas al límite, podría resultar que su nieto fuese más viejo que él.
Un gran abrazo.
domingo 29 octubre, 2017 @ 12:52 pm
Amigo Tomas
Esta vez estoy casi de acuerdo con tus propuestas, solo matizar, (entiendo que), en el hipotético viaje del cosmonauta que propone Miguel Ángel, este tiene forzosamente que acelerar en la partida, desacelerar y girar 180º, volver a acelerar (trayectoria de vuelta) en sentido contrario para desacelerar nuevamente al tocar Tierra.
Como la aceleración es una magnitud vectorial, también serán vectoriales las energías correspondientes que suministramos en las cuatro fases del evento. Creo que se anulan, y por esto intuyo que la evolución (tiempo) resultante en nuestro cosmonauta, seria idéntica a la que tendría sin viaje. O sea, creo que no volvería más joven que su gemelo en Tierra.
Amigo Miguel Àngel.
Creo que cualquier modificación en cualquier elemento del entorno (extiéndase a todo el Universo Posible) influye en el resto de los elementos de este. (Seria el tal Efecto Mariposa).
La sumatoria de todos estos efectos actuando sobre la estructura del “presente “, es la que empuja inexorablemente este para el siguiente presente, que visto desde la perspectiva del anterior seria futuro. Según esto, entiendo que el futuro no existe, está por hacer. Por tanto, no podemos viajar a él. Aunque lo tengamos en nuestra imaginación
Pero esto no quiere decir (en mi opinión) que todos los posibles futuros ya estén concretizados previamente (que existan, sean objetivos-aunque invisibles-), y nosotros o cualquier ente, al ir pasando por ellos, los hagamos reales, colapsando con nuestra influencia, su digamos función de onda.
Fuertes abrazos.
domingo 29 octubre, 2017 @ 10:57 pm
Las OG sí alteran el tiempo. Pero el viaje en el tiempo hacia atrás es imposible, de otro modo no se conserva la causalidad y se incurre en paradojas. La fecha del tiempo está siempre ahí.
Yo creo que está en el propio espacio-tiempo, pero es una opinión.
lunes 30 octubre, 2017 @ 3:26 am
Parece lo más consistente, Maestro Neo.
Amigo Eduardo:
Creo que quieres decir que, en el ejemplo del cosmonauta, aunque a su regreso llegue al futuro del planeta, el cosmonauta siempre vive en su propio presente. O sea, que lo que ocurre no es que se mete en el modulo espacial y de repente aparece en «su» futuro (más envejecido, por tanto).
Lo que podríamos discutir también es si el cosmonauta tiene la percepción de que el tiempo pasa muy lentamente, o no.
Sobre si se da efecto mariposa, podemos decir que fenómenos como el clima parecen sustentarlo claramente.
Querido Tomás:
No sé si me has entendido. En ejercicio teórico que propongo, sería como un juego iterado en que el cosmonauta unas veces viaja y otras se queda, unas veces tiene hijos y otras no, unas veces se queda y muere de viejo y otras se queda, pero muere de joven. Yo sí que creo que repitiendo la partida millones de veces, al menos en alguna, llegaríamos a futuros diferentes.
Lo que le planteaba a Eduardo es si llegaríamos a futuros diferentes en todas.
lunes 30 octubre, 2017 @ 5:54 am
Gracias Eduardo y neo.
Si, estuve pensando sobre el tema. Y entonces ya creo que el medio de la cresta es el paso de tiempo que tenemos hacia el futuro ahora mismo, (llamemosle Normal) la cresta es una paso del tiempo más rápido hacia el futuro, el valle es una lago del tiempo más lento que el normal pero igual hacia el futuro.
lunes 30 octubre, 2017 @ 11:14 am
¡Leñe, Miguel, que no sé si tendrá tiempo de morir tantas veces!
Es broma.
Abrazos.
lunes 30 octubre, 2017 @ 12:01 pm
Amigo Miguel Ángel.
Lo que quiero decir en el ejemplo del cosmonauta, es que, si va y vuelve, llegaría viejo igual que si se hubiese quedado en Tierra. Por causa de que, pienso que, en este experimento, solo las aceleraciones influencian modificando el ritmo de pasar del tiempo. Y como en este caso, las cuatro que aparecen se anulan. El cómputo total debido a estas es cero. Pero esto no elimina el flujo del tiempo durante los periodos del viaje a velocidad constante. Es por este motivo que envejece igual que su gemelo en Tierra.
Ahora pienso, que para esto ser completamente cierto, la Tierra tendría que permanecer parada en el punto del Espacio-Tiempo que estaba en el momento de la partida. Pues de lo contrario, la longitud de la trayectoria de vuelta del astronauta sería diferente. Lo que, puede que altere el cómputo total de su tiempo con respecto a su gemelo.
Creo que a este detalle hay que dedicarle más pensamiento y (discusión)
En cuanto a discutir, si el cosmonauta percibe si el tiempo en la nave pasa a ritmo diferente, opino que, no nota nada (incluido los periodos de aceleraciones). Pues estas de la misma forma e intensidad, afectarán el ritmo de fluir del tiempo de cualquier otro proceso en ella, (sea mecánico o biológico).
Abrazos.