El aire acondicionado y la falta de sueño producen obesidad
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Según un nuevo estudio la obesidad podría estar causada tanto por el aire acondicionado y la falta de sueño como por la vida sedentaria y la agresividad de la industria alimentaria. Este resultado desafía las concepciones establecidas sobre este problema.
En los EEUU por ejemplo, la proporción de la población que tiene problemas de obesidad aumentó un 60% entre 1991 y 2000, por lo que un cuarto de la población de ese país es ahora obesa. Los investigadores del campo atribuyen esto a la falta de ejercicio y la presión de la industria alimentaria.
David Allison de la University of Alabama en Birmingham (EEUU) y sus colaboradores han publicado un artículo que cuestiona que esos dos grandes factores que hasta ahora se habían considerado como factores fundamentales sean las principales causas de la obesidad aunque parezcan los más obvios.
Algunos estudios no encuentran correlación entre el número de horas que los niños dedican a las clases de educación física en las escuelas y el sobrepeso. Otros estudios fallan a la hora de encontrar una conexión entre obesidad y la proximidad a los restaurantes de comida rápida o el consumo de bebidas edulcoradas.
Los investigadores elaboraron una lista con los 10 factores que podrían ser tan culpables como los dos considerados habitualmente. Así, sevio que a la gente que no duerme lo suficiente les aumenta el apetito, y esto concuerda con la disminución en los últimos años de horas de sueño del norteamericano medio que han pasado de 9 a 7 en las últimas décadas.
Calefacciones y aires acondicionados pueden se también culpables. Cuando las personas o animales están por encima o por debajo de una determinada temperatura media pierden peso. Si hace frío queman grasa para mantener la temperatura y si hace calor el apetito disminuye. Como la gente mantiene su casa caliente en invierno y fría en verano esto podría tener influencia en el sobrepeso. Aunque este comportamiento se ha venido haciendo desde hace décadas y por tanto se ha negado la influencia.
Otra posibilidad está en la proporción de gente que ha dejado de fumar, ya que el tabaco suprime el apetito. También se dice que los niños nacidos de madre con mayor edad tienden a padecer más problemas de obesidad. Incluso que la gente obesa tiende a casarse más veces, preferiblemente entre ellos y tener más hijos, con lo que hay más niños genéticamente predispuestos a la obesidad. El envejecimiento de la población también podría ser un factor, así como disruptores endocrinos medioambientales y como el uso de ciertos fármacos…
Barbara Rolls, investigadora de la obesidad en Penn State University dice que el artículo es provocativo pero que da en la diana al considerar que la obesidad esté causada por diversos factores, pero que cuánto comemos y cuánto gastamos al hacer ejercicio son los principales factores.
Referencia: International Journal of Obesity (DOI:10.1038/sj.ijo.0803326)
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