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El equilibrio entre resistencia y longevidad

Área: Genética,Medicina — viernes, 7 de junio de 2019

En algunos aspectos, la resistencia al estres es incompatible con una longevidad larga.

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Los organismos unicelulares son básicamente inmortales a no ser que sufran un accidente o sean depredados por otros seres. Esto cambió radicalmente cuando apareció la vida multicelular.

Los organismos multicelulares se las tienen que ver con muchos retos y algo que es buena para una cosa puede no serlo para otra, incluida la longevidad. La muerte parece algo inherente a los seres complejos.

Pero la supervivencia y adaptación de este tipo de organismos están asociadas con la capacidad de los tejidos de renovarse y repararse. En particular algunos tejidos están permanentemente expuestos a las agresiones del ambiente, como en el caso de los epitelios del tracto digestivo.

Un grupo de investigadores liderados por Mirka Uhlirova (Universidad de Colonia) ha colaborado con el laboratorio de Tony Southall (Imperial College London) y han logrado descubrir el papel vital, como regulador en el programa regenerativo, que tiene el factor de transcripción Ets21c en el intestino de la mosca de la fruta adulta. Algo que también tiene implicaciones para el ser humano.

Lo más interesante en este caso es haber descubierto los mecanismos de compensación entre la resistencia al estrés y la longevidad.

El epitelio intestinal sirve principalmente como sistema para absorber los nutrientes, pero también funciona como barrera que restringe el paso de patógenos y sustancia tóxicas. La renovación de los tejidos del intestino es realizada por células madre que proliferan y se diferencias para así mantener la integridad y funciones de estos tejidos a lo largo de la vida del organismo.

Si las células madre no funcionan bien entonces se produce una degeneración de los tejidos o se desarrolla un tumor.

Este estudio contribuye a la mejor comprensión de los mecanismos moleculares subyacentes a los procesos regenerativos, tanto bajo condiciones favorables como bajo condiciones de estrés.

Los factores de transcripción son proteínas que se unen directamente al ADN y regulan así la expresión de ciertos genes. A lo largo de los últimos años se ha podido ver que el factor de transcripción Ets21c puede sobre-regularse frente al estrés, infección bacteriana o bajo el envejecimiento. Sin embargo, el significado biológico de esto era todo un enigma hasta ahora.

Así que estos investigadores decidieron usar a la mosca de la fruta como modelo animal y ver qué pasaba si, genéticamente, se silenciaba la función de este factor regulador en todo el cuerpo de la mosca o sólo en el epitelio del intestino de la misma.

Comprobaron que las moscas que carecían totalmente de Ets21c vivían más que las moscas de control cuando estaban en buenas condiciones (ambiente limpio y suministro de comida adecuado) y no sometidas a estrés. Sin embargo, tan pronto como estas moscas mutantes eran sometidas al estrés provocado por el añadido de herbicida en la comida morían rápidamente, algo que no le ocurría a las de control. Básicamente, el intestino de la mosca adulta necesita de la función de Ets21c para tener tolerancia al estrés.

Además, usaron además un método que combinaban distintas aproximaciones genéticas y con ello demostraron que Ets21c promueve la renovación del epitelio intestinal mediante la regulación de un conjunto específico de genes que coordinan la proliferación de células madre intestinales y la eliminación de células maduras.

Sin embargo, la actividad de Ets21c tiene que ser controlada fuertemente. Cuando se reduce la renovación epitelial se obtienen beneficios respecto a la esperanza de vida, pero entonces el organismo es vulnerable al estrés, pues no puede reparar los daños que se producen. Por otro lado, demasiado Ets21c acelera la renovación, lo que da lugar a sobrecrecimiento y a un envejecimiento prematuro.

Lo más destacable es que el factor de transcripción Ets21c y su red asociada en la que opera se ha conservado a lo largo de árbol filogenético desde las moscas a los humanos. Así que este resultado puede servir quizás para aplicaciones médicas en seres humanos para casos en los estén implicados tejidos epiteliales y su renovación.

En futuros estudios los investigadores implicados quieren centrase en los mecanismos que controlan el nivel de Ets21c y su actividad y así descubrir si tejidos de otras partes distintas al intestino requieren de la función de Ets21c para su mantenimiento y respuesta al estrés.

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Fuentes y referencias:
Artículo original.
Foto del intestino de Drosophila melanogaster: Juliane Mundorf y Mirka Uhlirova.

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
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10 Comentarios

  1. Desde el Sur:

    Es decir, si te resistís y sos combativo, vivirás poco. En cambio, si sos sumiso y obediente vivirás mucho… Como un esclavo pero vivirás mucho.

    «Quiero más una libertad peligrosa que una esclavitud tranquila» Mariano Moreno

  2. tomás:

    O sea que el juego de «las siete y media» -o te pasas o no llegas- funciona para todo en esta vida. Menos complejidad -bacterias y pequeños bichos- son suficientemente simples para ser inmortales, pero nos «acomplejamos» y ya nos hemos pasado, es decir, que nos morimos. Y lo mismo para el Ets21c-renovavión epitelial.

    RicardM leerá encantado este artículo y yo se lo contaré a mi vecino y compañero de infancia que solo se interesa por el golf y el baloncesto. Sé que me dirá: «¿Eeeh?»
    Chao.

  3. Miguel Ángel:

    Pues, si se cumple lo que dices, también podría ser mi sentencia, amigo Desde el Sur, porque aunque soy un combatiente muy pobre (me causa mucha ansiedad entrar en batalla), estoy dispuesto tanto si se trata del futuro de nuestro planeta, como cuando ejerzo mi profesión y recibo algún tipo de coacción, amenaza o vejación del tipo que sea.
    Ayer le rayaron el coche al enfermero que estaba haciendo conmigo la guardia solo por decirle ambos a una paciente que las seis de la mañana no son horas para venir a urgencias por dolor de garganta, la nena de 34 añitosy su acompañante que es la que se puso flamenca y encima pidió la hoja de reclamaciones. Han tenido suerte de que no les haya pillado la cámara del centro, pero vamos a declarar los hechos en la Guardia Civil y si vamos a juicio les caen van a caer unos 200 euros solo por las descalificaciones y coacciones que se permitieron. Solo estamos un médico y un enfermero de guardia para un pueblo de 7.000 habitantes y otros dos más pequeños.
    Los estudios indican que las agresiones a mi sanitarios esta aumentando a pesar de que tiene la misma repercusion que agredir a un policía o un guardia civil, lo cual demuestra la cobardía asquerosa de este tipo de gente, porque con los policías no se atreven.
    Mi profesión está entre las tres primeras que presentan más incidencia de síndrome del trabajador quemado. Y la segunda en porcentaje de suicidios.
    Ya he tenido algún altercado más en este mismo centro de salud y en otros de los que ya me he ido asqueado con anterioridad por cuestionar mi derecho a terminar de comer si el motivo de consulta es muy leve, que ni siquiera deben ir a urgencias este tipo de casos, sino pedir cita a su médico de cabecera ( por ley: 30 minutos para desayunar y los mismos para comer y cenar en una guardia de 24 horas).
    Ya he ido a juicio en un buen puñado de ocasiones por este tipo de motivos, de modo que debería servir de aviso a camicazes y gentucilla que va con sus derechos por delante a intentar pisar los del médico. En los bolsillos siempre llevo gadgets de autodefensa, cámara oculta en el coche y cuatro alarmas manuales de autodefensa cada una de 130 decibelios que solo usaría en caso de extremo peligro, porque me provocarían también un trauma acústico a mí, pero si alguien vuelve a intentar agredirme no me va a importar quedar tuerto si puedo dejar ciego a varios. Cuando empiece a haber noticias de médicos que repelen las agresiones como lo haría un policía quizá empiece a cambiar el asunto, porque en ninguna parte de nuestro contrato dice que tengamos que dejar que nos inmolen los acompañantes (los que causan la mayoría de agresiones).

  4. tomás:

    No sé, mi queridísimo amigo. Yo he visto y oído la dos jóvenes de unos veinte años llamar h.d.p. y otras lindezas a dos policías y estos pasar del hecho como si nada. Debe ser que la pena posible no merecerá la misma y saldrán por donde han entrado. Dicen que no, que si lo griegos ya se quejaban, pero creo que no se enseña respeto y eso es tan fundamental para una sociedad como la mayor de las obligaciones. Creo que nos estamos poniendo demasiado blandos con nuestros hijos, influidos por esas películas USA donde los niños dan un portazo a sus padres y estos van a pedirles perdón. No estoy de acuerdo con eso.

  5. Miguel Ángel:

    Das de lleno en el clavo. Y, efectivamente, somos muy pocos los que se atreven a enfrentarse:, pero es que a mí me ha dado todavía peor resultado cuando he intentado ir en todo momento por las buenas,, aunque me duele tener que decirlo. En el caso que cuento, si atiendes a las 6 de la mañana sin rechistar, la próxima guardia la vuelves a tener, solo que con un grano de mosquito, a las 5 de la mañana y exigiendote que le regales la crema antipicor. Luego tienes al hiperfrecuentador de urgencias que no va nunca al médico de cabecera porque yendo a urgencias no tiene que pedir cita y no le toca esperar, y a ese también hay que decirle que está haciendo un uso inadecuado del servicio, un abuso. Uno de los cometidos del médico es la educación sanitaria y eso incluye indicar a un paciente que no está usando el servicio adecuado, que no le guste la información es su problema.
    Recuerda que estamos hablando de la gente más chunga, querido Tomás, al resto no se le ocurre venir a esas horas por dolor de garganta. De hecho, te puedo decir que prscticamente todos los que he tenido que denunciar eran personas con un historial muy conflictivo que muchas veces ya han dado problemas en otras visitas al médico, gente enganchada a sustancias, delincuentes y tal.
    Los de mi entorno familiar también me dicen que tenga cuidado, pero que vayas de pacífico tampoco supone que estés a salvo de todas las agresiones: en el penúltimo pueblo en que he estado trabajando, el jefe del cuartel de la Guardia Civil me aconsejó que no me arrugada con los gitanos: «te ponen a prueba, y si ven que eres flojito, van a por tí». Así lo hice a las primeras que se me puso uno chulo uno que iba a entrar pronto en la cárcel: le metí un puñetazo a la mesa de la consulta, al tiempo que me puse de pie desplantandome y le dije que a ver si tenía cojines de enfrentarse conmigo. Me mantuvo el pulso otro poco, pero se acabó arrugando del todo en cuanto vinieron los de la Guardia Civil. Y lo mismo hice cuando otros del mismo clan intentaron desafiarme, con amenazas de venir a mi casa y otras lindezas.
    Les he plantado cara todas las veces que era menester y no me ha pasado nada, excepto miedo, eso no lo niego.

    «Cuando sientas mucho miedo por ahí, corre directamente hacia ello».

  6. tomás:

    Yo creo que es cuestión cultural. Como siempre, cada día -soy persona de costumbres casi inmuebles, como los edificios- escucho la radio mientras me preparo el desayuno e intento recordar lo que he de hacer (hoy me toca ir a ver a mi hija), así que suelo escuchar malas noticias: las especies de plantas se están extinguiendo a una velocidad asombrosa, los niños empiezan ya a los 8 años a enredar con los móviles-sexo donde se reproducen acontecimientos como los de «la manada». Sigue habiendo sucesos malos o machistas y buenos o feministas -se olvidan de los ancianos maltratados por garridas mozas que serán feministas pues se trata de caricias demasiado impulsivas de puro amor-. Por ello pienso que no es porque sean gitanos, sino porque aunque no lo fueran -nótese la sutil diferencia- carecen de la cultura a que estamos acostumbrados. Así que lo de siempre: educar.

  7. Miguel Ángel:

    Sí, que según lo he puesto da la impresión de que estaba generalizando y no es así, me estaba refiriendo a los que había
    más conflictivos. Con los que no se saltaron las normas no hubo problemas ni sombra de animadversión por mi parte: si eran correctos, tenían o buscaban trabajo o se preocupaban un mínimo de atender a sus hijos, recibían mi mejor atención y los felicitaba con toda sinceridad. No hace falta que repita que en lo que creo es en las buenas formas y la colaboración: relaciones win-win.

  8. tomás:

    Estoy seguro de ello, mi buen amigo. Tu distinción es por la educación, por formas de proceder; lo que sucede es que el buen o el mal hacer se da más en unas sociedades que en otras por el mero hecho, muchas veces, de su historia, de su sociedad actual. Ya sé que no es por otra cosa.
    Un fuerte abrazo.

  9. RicardM:

    Amigo Miguel Angel, continuo con el off-topic y conste que no lo he empezado yo…

    Ser mèdico de CAP en según que sitios es casi tan peligroso como ser maestro de escuela (En el segundo caso los conflictos más graves suelen relacionarse con los padres). Convivir con estrès sicològico es incluso peor que el riesgo físico (que te voy a contar que no sepas).

    Tengo el convencimiento de que la especie humana no ha tenido tiempo evolutivo para canalizar correctamente la agresividad que en hombre primitivo le permitió huir de las amenazas y, además, procurarse el sustento en forma de caza. «Porquè las cebras no tiene úlcera? se preguntaba Sapolsky. Porque sólo se estresan cuando huelen al león. Nosotros olemos al león continuamente y lo que nos diferencia a unos de otros es la manera en que canalizamos nuestro estrés. Unos lo hacen hacia la violencia mientras que otros, paradójicamente, lo hacen hacia el altruísmo.

    He de hacer (hemos de hacer) el esfuerzo de no tomar el todo por la parte. Los violentos son minoria, pero se hacen notar. Los altruístas son mayoria, pero son discretos. Obviamente, los altruistas cargais con los violentos aunque sean menos. Es lo que hay.

    Y a partir de ahí, educar a nuestros hijos en la dirección correcta…

    Saludos cordiales

  10. Miguel Ángel:

    Muchas gracias, querido RicardM, recojo y te reenvío tus ánimos y apoyo.
    Muy acertada tu referencia al libro de Sapolsky que ratifica mi propio comentario: el suceso que he comentado me ha provocado ansiedad unos cuantos días (aunque el león ya estaba lejos y, además, no era tan grande). Pero es que la forma en que se presenta el miedo en el inconsciente es siempre en el tiempo presente (no distingue pasado, presente y futuro cuando se presenta esta emoción). Y tampoco discrimina unos recuerdos de otros: cuando algo a alguien nos causa miedo o ira, el cerebro no reacciona solo en respuesta a ese último estímulo, sino que reacciona como si se presentasen a la vez todas las vivencias que nos han causado miedo o ira a lo largo de nuestra existencia.

    Mucha suerte y toda mi admiración por tu noble labor, querido amigo.

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