NeoFronteras

Sobre las huellas del Asperillo

Área: Antropología — jueves, 24 de noviembre de 2022

Huellas encontradas en Huelva indican presencia humana en España en el Pleistoceno medio, unos 200 000 años antes de lo que se pensaba.

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Un grupo de investigadores españoles ha realizado un descubrimiento único en Europa que determina que unas huellas de homínidos encontradas en Matalascañas (Huelva, España) en 2020 tienen en realidad 200 000 años más de lo que se creía.

Esto significaría que los preneandertales habrían vivido en la zona de Doñana durante el Pleistoceno Medio, hace unos 295 800 años. Para obtener este resultado, el equipo utilizó luminiscencia estimulada ópticamente, un método utilizado para encontrar la edad absoluta de los sedimentos que han estado completamente expuestos a la luz solar.

El descubrimiento, en el que han participado Jorge Rivera (Universidad de Sevilla) y Eduardo Mayoral (Universidad de Huelva), ha sido publicado en Scientific Reports el pasado octubre.

El hallazgo en junio de 2020 de huellas de homínidos de más de 106 000 años junto a el Asperillo (Matalascañas, Huelva) supuso una revolución para La Paleoantropología, tanto que se consideró uno de los descubrimientos más importantes de ese año. Ahora, la publicación de este nuevo artículo ha confirmado lo que algunos expertos sospechaban en ese momento: esas huellas eran mucho más antiguas y, de hecho, tienen 200 000 años más de lo que se pensaba.

Si bien anteriormente se estimó su origen en el Pleistoceno superior, las pruebas ahora apunta claramente al Pleistoceno medio y a que tienen 295 800 años, lo que lo convierte en un registro único en Europa, ya que no hay mejor sitio en el mundo para las huellas fósiles de homínidos en número, antigüedad y superficie como las de la playa de el Asperillo.

El Pleistoceno Medio fue un momento crucial entre diferentes etapas climáticas, pues se dio entre el período cálido MIS 9 (entre hace 360 000 y 300 000 años) y la transición al MIS 8 (entre hace 300 000 y 240 000) en la que tuvo lugar una gran glaciación.

Tras la recogida de muestras de los distintos niveles, y otras dos posteriores para contrastar los primeros resultados, se estableció la edad de los restos fósiles en 295 800 años, con un margen de error de 17 800 años.

En el Asperillo se hallaron inicialmente 87 huellas, pero ahora se tiene un registro de más de 300 huellas, de las cuales el 10% se consideran bien conservadas. A excepción de las de Matalascañas, no se conocen otras huellas de homínidos entre los estadios climáticos MIS9 y MIS 8 del Pleistoceno Medio. Por eso no está claro si las huellas procedían de los neandertales.

Al principio se pensó que las huellas eran de los neandertales, pero eso ahora está en duda. La principal hipótesis entre los científicos es que las huellas procedían de individuos del linaje neandertal, al que se ha asociado el Homo heidelbergensis y el Homo neanderthalensis. La hipótesis de que las huellas pertenecían a homínidos pre-neandertales es ahora factible. Precisamente por eso, las huellas de Matalascañas son ahora más valiosas por su aportación al registro fósil de homínidos del Pleistoceno medio, muy pobre en Europa por la escasez de yacimientos con huellas.

Según el artículo de Scientific Reports, hasta ahora las huellas de este período solo se han encontrado en Terra Amata y Roccamonfina (Italia) y datan de hace entre 380 000 y 345 000 años. Son los únicos más antiguos que los de Huelva en esta época. Después de estos, los hallazgos en los yacimientos de Biache-Vaast (Francia) y Theopetra (Grecia), de hace 236 000 a 130 000 años, se atribuyen a Homo neanderthalensis. En este contexto, la gama en longitudes de todas las huellas encontradas en Matalascañas, de 14 a 29 centímetros, es similar a lo encontrado en yacimientos europeos, como Theopetra (14-15 centímetros), Roccamonfina (24-27 cm) y Terra Amata (24 cm).

En cualquier caso, los expertos destacan la singularidad del hallazgo de Matalascañas, cuya nueva datación desafía los paradigmas existentes y ha requerido un análisis profundo antes de poder aceptar conclusiones.

La nueva cronología establece ahora un cambio en el escenario que entonces imperaba en la costa del golfo de Cádiz, con asentamientos humanos en un clima más templado y húmedo que en el resto de Europa, con niveles freáticos elevados y abundante vegetación.

En ese mismo período el nivel del mar habría estado unos 60 metros por debajo de su nivel actual. Esto implica que la costa estaría a más de 20 kilómetros de donde está hoy, por lo que habría sido una gran planicie costera, con grandes zonas inundables y en la que se habrían dejado las huellas descubiertas a mediados de 2020.

La nueva datación del sitio también afecta a los animales vertebrados encontrados, ya que entre, las huellas de homínidos, también hay huellas de grandes mamíferos como elefantes de colmillos rectos, toros gigantes (uros) y jabalíes. Era la fauna que habitaba Doñana hace 300 000 años y no hace 100 000 años, como afirmaban otras investigaciones.

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Fuentes y referencias:
Artículo original.
Foto: Scientific Reports (2022). DOI: 10.1038/s41598-022-22524-2.

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
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1 Comentario

  1. tomás:

    Veo que, aunque el el título se utiliza bien la contracción «del Asperillo», luego se escribe «a el Asperillo» y «de el Asperillo». No tiene importancia pero lo señalo por ser tan quisquilloso. Seguro que yo meto el pie en mis comentarios, pero nadie me lo dice…
    Pienso que los neandertales -o pre- debieron ir trasladándose hacia el sur hasta que el mar les impidió seguir y, por eso acabaron allí, aunque estando Gibraltar tan cerca y más al sur, con tan bajo nivel de las aguas, África les quedaba muy cerca; podían haber llegado allí fácilmente. ¿Por qué no lo hicieron? ¿O sí?

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