NeoFronteras

El clima podría influir en la tectónica

Área: Geología — viernes, 23 de mayo de 2008

Según un estudio una temperatura prolongada superior a los 38 grados y de origen climático detendría la tectónica de placas de la Tierra.

Foto

Los continentes se mueven lenta e imperceptiblemente sobre el manto terrestre. Las placas tectónicas subducen unas sobre otras levantando las cordilleras más altas de este planeta. En su devenir han creado y moldeado nuevos continentes que a veces fueron uno solo. Aunque de vez en cuando esta actividad tectónica produce terremotos, la vida sobre este planeta no sería posible sin la geología que la soporta, y cualquier inestabilidad de este sistema podría en peligro a la biosfera que cubre este planeta.
La temperatura interior de la Tierra es superior a la exterior, y las rocas se comportan como un fluido bajo las tremendas presiones allí reinantes. Estas rocas del manto sufren convección y las corrientes generadas empujan las placas continentales de la superficie. En el fondo la Tierra funciona a este nivel como una máquina térmica que, debido a una diferencia de temperaturas, produce trabajo. Pero, ¿qué pasaría si la temperatura de la superficie fuera mayor?
Ahora un estudio liderado por Adrian Lenardic de Rice University pone en relación el clima y la geofísica de nuestro planeta y de planetas similares. Llegan a la conclusión de que si el efecto invernadero es lo suficientemente intenso puede detener la tectónica y que la corteza se detenga.
No sólo la actividad humana puede cambiar el clima, las erupciones volcánicas o una mayor irradiación solar puede también hacerlo. El ejemplo típico es Venus que está más cerca del Sol y además tiene una densa atmósfera (10 veces más densa que la terrestre) de dióxido de carbono que le produce un potente efecto invernadero (su superficie está más caliente que la de Mercurio y sobre ella el plomo se fundiría). Según han revelado las misiones espaciales Venus parece no tener tectónica de placas, aunque sí volcanes.
Lenardic ha querido poner un límite de temperatura superior por encima del cual la tectónica de nuestro planeta también se detendría. Un artículo con el estudio de estos científicos se publica en la revista Earth and Planetary Science Letters.
Estos investigadores han determinado que la tectónica de la Tierra se haría inestable si la temperatura superficial subiera por encima de 38 grados centígrados en promedio. Según Lenardic, el periodo de tiempo y el aumento de temperatura, aunque sería drástico para los humanos, son razonables para la escala geológica, en particular comparado con lo que se creía anteriormente que podría afectar a la geodinámica del planeta.
Se creía que la tectónica de placas era estable y se autocorregía, pero este punto de vista descansa en la presunción de que el exceso de calor del manto puede escapar fácilmente a través de la corteza. Además, a mayor temperatura el manto se hace menos viscoso. El nuevo estudio afirma que si la corteza está demasiado caliente durante un tiempo prolongado, debido a condicionantes climatológicos, la tectónica de placas se puede detener.
Según estos investigadores el efecto inicial de esta parada de la deriva continental sería un aumento de la actividad volcánica. Esto explicaría las huellas de vulcanismos que se pueden observar en Venus.
Anteriormente se echó la culpa de la falta de tectónica de placas en ese planeta a la ausencia de agua que lubricara el sistema.
Lo más significativo del estudio, según Lenardic, es que el calentamiento de la atmósfera que puede detener la tectónica de placas está bastante por debajo de la temperatura más allá de la cual el agua no estaría en agua líquida sobre la superficie de la Tierra. El agua no necesita hervir, sólo es necesario un periodo prolongado de calentamiento superficial que produzca un ciclo de retroalimentación positiva en el ciclo de convención del manto.

Fuentes y referencias:
Nota de Rice University.
Foto: USGS

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
Compartir »

4 Comentarios

  1. tomás:

    Encuentro afirmaciones de difícil aceptación:
    1º «…la vida sobre el planeta no sería posible sin la geología que la soporta…». Cierto es que la geología ha sido determinante en la conformación de la vida actual, pero considero que sin su concurso otra vida hubiera sido posible y que una vez en el estado actual su detención influiría tanto positiva como negativamente: modificaría tanto la emisión de CO2 como la de vapor de agua, entre otros gases.
    2º El ejemplo de Venus no parece propio por ser más pequeño, no tener campo magnético y si el movimiento de convección es debido en última instancia, como parece, al reactor de fisión del interior de la Tierra.
    3º Parece dudosa la existencia de volcanes a muy largo plazo geológico sin algún tipo de tectónica.
    4º Si se refiere, a los 38º más los 15º promedio actuales, es decir 53º, desde luego habría pocos lugares en la Tierra para el hombre y un entorno posible, pero 38º parecen escasos para incrementar lo suficiente la viscosidad del manto y, de todos modos la reacción sería una mayor temperatura interna que podría compensar esa mayor viscosidad por mayor energía acumulada, ergo mayor fuerza de empuje.
    5º Respecto del agua, aumentaría mucho la cantidad de vapor con el consiguiente incremento del efecto invernadero, pero supongo que eso ya está contemplado y que la temperatura calculada es un equilibrio a largo plazo. En cuanto a su efecto sobre la viscosidad ha de basarse en una pérdida del agua contenida en el manto que debería ser explicada.
    De todas formas el artículo tiene la gran virtud de demostrar cómo todo está interrelacionado, aun aquello que no sospechamos y, desde luego, el que algunas afirmaciones me parezcan dudosas, ello no quita que puedan ser ciertas o se aproximen a la certeza. Por supuesto, alguna consecuencia ha de tener todo aumento de temperatura o la alteración de cualquier variable unido a los periodos que afectan a lo geológico. Y desde luego, mejores fundamentos que yo ha de tener el autor del artículo.

  2. NeoFronteras:

    Por desgracia, como el único ejemplo que conocemos es la vida sobre la Tierra, desde el punto de vista científico usarla como modelo es la mejor opción posible. Lo demás son especulaciones.
    La temperatura mencionada es absoluta y no un incremento, aunque promediada, luego habría picos de temperatura terribles. Esas condiciones nos parecerían simplemente horrorosas y muy lejanas de las actuales. Aún así la vida sería posible. En todo caso para detener la deriva continental se necesitaría muchísimo tiempo en esas condiciones.
    Por otra parte Venus tiene prácticamente el mismo tamaño (98%) que la Tierra.

  3. Alejadro Sánchez:

    Este estudio es extremo, pero… ¿y con pequeños incrementos promedios de temperatura? ¿Serían proporcionales las variaciones en la dinámica de tectónicas, como un leve incremento de la actividad volcánica?

  4. NeoFronteras:

    Solamente han calculado una temperatura límite por encima de la cual la deriva se detiene.

RSS feed for comments on this post.

Lo sentimos, esta noticia está ya cerrada a comentarios.