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Cómo detectar dimensiones extras

Área: Física — domingo, 7 de mayo de 2017

Proponen el uso de ondas gravitacionales generadas en la colisión de agujeros negros para detectar, si existen, dimensiones extras del espacio.

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Es importante recordar de vez en cuando cómo funciona la ciencia o la Física en particular. O, más bien, cómo debería de funcionar, pues no siempre se hacen bien las cosas.

Una manera muy sencilla es presentar primero un problema. Para solucionar este problema se presenta un idea o hipótesis que supuestamente lo soluciona. Luego se comprueba con algún experimento u observación (a veces el Universo hace los experimentos por nosotros) si esa hipótesis es realmente válida. Si al final se tiene éxito entonces se llega a un teoría científica.

Hay un fenómeno que todo el mundo puede experimentar, pero que nadie puede explicar. Es la debilidad del campo gravitatorio. Quizás pueda parecernos que la gravedad es importante, sobre todo si tenemos una caída desde la bicicleta o rodamos por unas escaleras. La realidad es que la gravedad es muy débil.

Basta con frotar un trozo de plástico para que este se quede cargado eléctricamente. Entonces, si arrimamos este plástico cargado a unos trocitos de papel veremos cómo son atraídos y se quedan pegados. Una fuerza electrostática tan simple habrá conseguido vencer al campo gravitatorio de todo un planeta. Es un auténtico misterio. La fuerza electromagnética es mucho más fuerte que la gravedad y la constante que lo determina es muchos órdenes de magnitud mayor que la pequeña constante de gravedad universal o G. Pero lo mismo se puede decir la fuerza nuclear fuerte que mantiene los núcleos de los átomos o de la fuerza nuclear débil (que sigue siendo más fuerte que la gravedad), aunque estas dos fuerza nucleares sean de corto alcance.

Según la Teoría Cuántica de Campos, la fuerza electromagnética o las fuerzas nucleares no son más el resultado del intercambio de partículas (bosones o partículas de spin entero) entre otras partículas. Se ha tenido mucho éxito con esta descripción. Así que se ha asumido que la gravedad tiene que comportarse del mismo modo y ser el resultado del intercambio de gravitones. Quizás este prejuicio sea un error, pero se lleva persistiendo en él durante décadas.

Sin embargo, incluso si asume que la gravedad es el resultado de la acción de los gravitones, es muy difícil explicar su debilidad. Por eso hace ya bastantes años se propuso que los gravitones podría escapar de nuestra brana tridimensional e ir a otras dimensiones espaciales, cosa que no podrían hacer otros bosones de intercambio. Sólo los gravitones podrían escapar del universo hacia otras dimensiones exteriores. Este reparto multidimensional de los gravitones haría que la fuerza ejercida por ellos sobre esta brana sería más débil y por eso la gravedad sería tan débil. Lo curioso es que, bajo esta premisa, también nos podrían visitar gravitones de otras branas o universos.

De la idea rápidamente se apropiaron los cuerdistas, pues ellos, desde hace décadas, juegan con espacios multidimensionales en los que todas las dimensiones espaciales salvo tres están compactificadas. Estos no han tenido mucho éxito en casi 40 años a la hora de describir la realidad, aunque una idea tan compleja sea capaz de describir cualquier cosa.

Pero si los gravitones escapan a otras dimensiones, aunque sea sin cuerdas, entonces quizás haya desviaciones a la ley de gravedad de Newton a escalas menores de 1 milímetro. Desafortunadamente, los experimentos realizados han dado resultados negativos al respecto. Si hay dimensiones ocultas u otras branas su efecto se tiene que dejar sentir a escalas de lo muy pequeño. Pero esperar que esto se vea en un colisionador del tipo LHC es una esperanza vana, pues este tipo de máquinas nunca podrán alcanzar la energía necesaria para explorar la textura del espacio a escalas de lo muy pequeño.

Saber si hay o no estas dimensiones o si el espacio tiene o no textura (del tipo que sea) puede ayudarnos en la búsqueda de una teoría cuántica de la gravedad. Así que no es ninguna tontería estudiar el asunto, por muy exótico que todo esto parezca.

Así que lo ideal, ya que no podemos hacer experimentos en el laboratorio al respecto, será estudiar los experimentos que la Naturaleza hace por nosotros. Tienen que ser fenómenos muy energéticos, así que nada mejor que la colisión de agujeros negros. Las ondas gravitacionales generadas por este tipo de eventos pueden darnos pistas sobre este asunto, ya que, si hay estas dimensiones extras, las ondas gravitacionales (OG) pueden viajar por ellas. La idea es prometedora pues ahora que ya podemos detectar este tipo de ondas y eventos.

Gustavo Lucena Gómez y David Andriot (Instituto Max Planck de Postdam) han trabajado sobre el asunto y hallado las características que habría que buscar en la señal recibida en este caso gracias a dos efectos que han encontrado. Uno se vería a altas frecuencias en las OG y otro en la manera en la que estas ondas deforman el espacio según avanzan.

Según las OG se escapan hacia las dimensiones extras se generaría una señal extra a altas frecuencias sobre un fondo de una distribución normal en la señal recibida de estas ondas. Lo malo es que, de momento, no se cuenta con detectores que midan estas ondas a altas frecuencias, así que no sirve de mucho. Lo bueno de este tipo de señal es que sería atribuido en exclusiva a las dimensiones extras.

El segundo fenómeno sí sería detectable en la actualidad, pues modificaría la idea que tenemos de cómo se deben comportar las OG, que sería diferente si hay dimensiones extras.

Según viajan, las OG van estirando y contrayendo el espacio a su paso en diversos “modos de vibración” . Así, una pelota de fútbol tomará la forma de una rugby al paso de estas ondas y lo hará de una determinada manera predicha por la Relatividad General, que es consecuencia del estirado y compresión del espacio en el que está. Pero, si hay dimensiones extras, además el espacio se expandirá al paso de estas OG y la pelota crecerá y disminuirá en tamaño. Lo malo es que este tipo de modo puede explicarse sin necesidad de dimensiones extras, así que no sirve para confirmar la hipótesis.

Los autores dicen que cuando se cuente con más detectores de estas ondas se podrán ver o descartar estos nuevos modos de vibración del espacio.

Obviamente este y otro tipo de estudios están señalado la necesidad de construir más detectores de OG y que además operen a distintas frecuencias. A ver si la cooperación internacional nos proporciona pronto estos instrumentos.

Si al final no se confirman las dimensiones extras, entonces tendremos que replantearnos muchas cosas, incluso el concepto de unificación. Quizás, el que la gravedad sea tan débil se deba a que su origen es muy distinto al de las otras fuerzas (¿estamos llamando ‘fuerzas’ a fenómenos muy distintos?) y entonces tengamos que abandonar algunos prejuicios.

Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=5509

Fuentes y referencias:
Artículo original.
Ilustración: Harvard-Smithsonian Center for Astrophysics (CfA).

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
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20 Comentarios

  1. lluís:

    Quizá algún día se detecte una cuerda cósmica, puesto que las energías presentes en el nacimiento del universo habrían sido tan elevadas como para producir un estado de cuerda vibratoria lo suficientemente pesada (más allá de la masa de Planck, incluso)y que a pesar de ser tan pesada y correr el riesgo de desintegrarse en un chorro de partículas más liegeras cada vez, podría haber sobrevivido como una reliquía del Big-Bang. Si se pudiera detectar una cuerda cósmica desde luego la teoría de supercuerdas recibiría un empujón definitivo.

    Además respecto al gravitón, parece que debería estar ahí, puesto que sería el paquete mínimo del campo gravitatorio, y dado que la teoría cuántica de campos ha tenido tanto éxito con las restantes fuerzas no gravitatorias y la teoría de supercuerdas no deja de ser una teoría cuántica de campos, pues eso, que hasta cierto punto el gravitón debería andar por ahí.

    Aún no sé realmente si las modificaciones más recientes de la teoría de supercuerdas pueden aportar en un futuro alguna novedad, pero se sigue en la brecha.

  2. NeoFronteras:

    Estimado Lluís:
    No hay ninguna prueba de la existencia de cuerdas cósmicas. Además, estas no sería un producto de las supercuerdas pese a la similitud de nombres. Las cuerdas cósmicas, los monopolos y las paredes de dominio serían residuos del estado de la materia en el Big Bang. Si la inflación es correcta tales entidades serían inobservables y es uno de los argumentos en los que apoyan la inflación.

    En cuanto a los cuerdistas les da igual, pues se observe lo que se observe siempre querrán apuntarse el tanto. Es lo que tiene apoyar y vivir de una idea no falsable.

  3. Dr. Thriller:

    Bueno, para mí el fenómeno más anómalo, con mucho (y los citados no son moco de pavo) es precisamente ese bicho llamado «agujero negro». Decir anomalía respecto a las otras fuerzas a respecto de esto no es hacer justicia. De hecho, o al menos a mis calzadores les gusta recrearse en ello, pone muy en serios aprietos la hipótesis del gravitón como transmisor de campo, porque para escapar del horizonte de sucesos que yo sepa sólo existe la chapuza de los pares virtuales, y supongo que las cantidades involucradas son tremebundas, y digo yo que a mayores la propagación debe explicar una cierta geometría de ídem. Ahora, como decía el sobrevalorado Philip K. Dick (aunque a mí me gusta, según el grado de intoxicación a la hora de parir sus creaciones), «la realidad es eso que sigue estando ahí cuando dejas de creer en ello». Este aforismo es muy útil para muchas cosas y en particular para abordar los veredictos inapelables del método científico, a nivel emocional se entiende.

    Por lo demás, ya se echaban de menos estas cosas a raíz de las famosas detecciones. Es otra cosa estupenda de la ciencia, cada puerta que abres en realidad es un muro que derribas.

  4. Tomás:

    Sería más sencillo llamar a los cazafantasmas y que detecten lo que haya.

  5. lluís:

    Es que me expresé mal, no quise referirme a ese tipo de cuerda cósmica que nada tiene que ver con la supersimetría. Me quise referir a una cuerda de la teoría de supercuerdas, un estado de cuerda vibratoria tan pesada, que también podría ser una reliquia del Big-Bang, y que habría sido muy estirada por la propia expansión del espacio.

    En cuanto a teorías de gravedad cuántica,la mejor teoría por ahora, puesto que al menos ha generado un montón de matemáticas nuevas y en cierto modo «da» la gravedad,y todo el asunto de la teoría M, con mundos brana o extradimensiones en las formas o espacios de Calabi-Yau,no deja de ser la teoría de supercuerdas, puesto que otras como la teoría de lazos ( QLG) parece aportar aún menos a una teoría cuántica de gravedad. Y como dice Sean Carroll » si nuestra mejor teoría predice que algo es cierto, deberíamos asignarle una probalidad bayesiana relativamente elevada de que realmente es cierto, hasta que aparezca una teoría mejor.» Este argumento resulta ciertamente convincente, aunque desde luego no sirva para demostrar que la teoría de supercuerdas es cierta. Y quizá no se pueda demostrar nunca como cierta tal teoría. Pero es que indirectamente ha solucionado algunos problemas e incluso es aplicable a la formación de diminutos agujeros negros en determinadas formas Calabi-Yau.

    Es tan bonita que debería ser verdad.Como dijo alguien.

  6. NeoFronteras:

    Estimado Lluís:
    Es cierto que no tenemos una teoría cuántica de la gravedad, pues eso, no la tenemos. Cualquier idea lo suficientemente compleja describe la gravedad, hay muchas.

    Podemos ser platónicos y creer en un mundo de las ideas en donde habitan las matemáticas o asumir que estas son un mero lenguaje para describir la realidad. Si es lo segundo entonces nos valen para describir cualquier cosa.

    Veamos una analogía. Podemos por ejemplo, situar las posiciones de cada átomo de una célula bacteriana. Esto ocuparía muchos gigabits, pero cumpliría su misión. O podemos describir el código genético, saber cómo funciona una célula y entonces describir la bacteria por su genoma. Esto nos permitiría replicar la bacteria de un modo «algorítmico» a través de una receta. Incluso podríamos crear una población nueva de bacterias y modificarlas, hacerlas evolucionar, etc. Este método ocupa «pocos» gigabits a cambio de ser un poco más complejo.

    Lo malo de las cuerdas es que a la Física es como tener una receta muy complicada que además ocupa muchos bits para crear algo que no sabemos si es o no una bacteria funcional, porque además permitiría hacer casi cualquier célula o ente. Básicamente no es funcional al ser muy complejo y tampoco es predictivo porque tiene un número inmenso de grados de libertad (estados de vacío).

    Ahora, los cuerdistas venden las cuerdas como «el nuevo cálculo», pero es precisamente en donde fallan. Pues no son útiles, funcionales o cómodas. Fallan precisamente porque sus matemáticas no son una buena herramienta. Hasta ahora todas las teorías físicas se basan en una idea y unas matemáticas sencillas (aunque al profano no se lo parezca). Podemos tener un machete y decir que es bueno para cortar grandes árboles. Incluso se podría usar. Pero al menos podemos esperar que alguien logre inventar el hacha.

    También defienden su alto número de estados de vacío diciendo que cada uno correspondería a un universo en el multiverso. Esto es la derrota de la Física como herramienta de descripción de la realidad, pues viene a decir que las cosas son así, pero podrían ser de cualquier manera.

    Algún día harán una tesis de sociología sobre las cuerdas.

    De Carlo Rovelli le recomiento que lea «Reality Is Not What It Seems: The Journey to Quantum Gravity», 2016. Al menos le dará otro punto de vista.

  7. NeoFronteras:

    Al final puede que nuestras mentes no puedan llegar a describir, asimilar o entender ciertas cosas como la gravedad cuántica, la consciencia o la interpretación de la Mecánica Cuántica. Al fin y al cabo, nuestra mente sólo apareció para que sobreviviéramos en la sabana africana. La Cuántica, la teoría del Caos, 1984, El halcón maltés o el preludio número 1 del primer libro de La Clave Bien Temperada de Bach son sólo subproductos.

    Realmente nos cuesta descubrir. Todos hemos sentido alguna vez eso de «¿y por qué no se me habrá ocurrido a mí esto antes?». Lo vemos claro sólo cuando alguien nos lo muestra.

  8. lluís:

    Sí,bien, de acuerdo. Tenemos una mente que «sólo apareció para que sobreviéramos en la sabana africana», pero resulta que muchos, quizá pocos, más bien pocos, no se resignaron a quedarse en «estado mental sabana» y se dedicaron a tratar de desvelar los secretos de la «mother nature», y llegaron señores como Galileo, que anticipó la relatividad especial, luego Newton ( bastante «sabana africana» y un poquitín magufillo.pero genial en sus formulaciones, aunque Laplace lo puntualizó mejor) y más tarde Einstein y luego los caballeros de la Mecánica Cuántica, de la que aunque haya distintas interpretaciones y se desconozca cuál de ellas es la correcta,o si hay alguna que sea la correcta,pues resulta que hace predicciones muy precisas. Entre paréntisis, me atrae la versión de Everett, sin colapso de la funcion de onda, una cosa un tanto extraña por otra parte, pero que a muchos disgusta por el asunto de los multiversos.

    Lo que quiero decir es que no queda otro remedio que seguir explorando toda clase de «locuras», puesto que ya de por sí, la naturaleza parece bastante locuela. También pareció una «locura» lo que Einstein sugirió con sus ideas relativistas, y durante mucho tiempo sus teorías fueron descartadas y calificadas de extravagante divertimento matemático.

    Y sólo hace 500 años que se hace ciencia en sentido estricto. Como aquel que dice,acabamos de empezar y desde el flogisto y el calórico hemos avanzado bastante. Vamos saliendo,lentamente, de la sabana africana.

    En cuanto a ese libro, el de Carlo Rovelli, tiene buena pinta. Lo pongo en la lista.Y gracias por el consejo.

    Un saludo, Neo.

  9. NeoFronteras:

    Estimado Lluís:
    Sí, esa es la maravilla, que pese a que nuestro cerebro evolucionó para otras cosas y que aunque para la mayoría de nosotros de muy difícil descubrir algo nuevo, ha habido humanos que han empujado esa frontera de la ignorancia un poco más allá. Gracias a la acumulación de empujones durante estos últimos 400 años, ahora podemos entender bastante mejor la realidad que nos rodea. Pero sigue siendo difícil y a veces sólo nos guía la belleza y la coherencia, esperemos que no la fe.

    En algunos aspectos menos intelectuales todavía no hemos salido de esa sabana.

    Y sí, hay que seguir explorando locuras, abandonarlas cuando no funcionan y buscar otras.

  10. Miguel Ángel:

    Por cierto que he visto -creo que en Wikipedia- presentar a Michiu Caku como astrónomo, cuerdista…y futurólogo. No es coña.

  11. Troskylab:

    Sí, en Wikipedia Michiu Caku aparece catalogado como futurólogo y se dice cuáles son sus predicciones: para el 2100 el humano será capaz de manipular objetos con la mente, los computadores leerán los pensamientos, se crearán cuerpos perfectos y se alargará la esperanza de vida, según el artículo.

  12. Dr. Thriller:

    Los seres humanos llevan manipulando objetos con la mente desde que existen (objetos y sujetos, para ser precisos), por supuesto se ayudan de manos y estas de herramientas, pero las más de las veces de otros seres humanos; las máquinas ya «leen» nuestra mente de siempre también, para eso tienen dispositivos, obedecen de una forma u otra, desde un espada hasta un bolígrafo; los cuerpos ya son perfectos, etimológicamente hablando, si se refiere a que sean todos del mismo patrón estético eso lo veo muy godido; y la esperanza de vida ya se alarga o acorta en función de las condiciones de la época. Como futurólogo este hombre no vale ni para tomar… Viento. Yo también predigo el futuro: en una galaxia lejana muy lejana, más lejana que la de Theresa May y su tropa de botarates, seguirá habiendo gente que caliente orejas y que venda humo, y que, salvo que se pasen de frenada, les irá medianamente mal. En cambio, los que dicen lo que nadie quiere oir, que suelen ser las predicciones más probables, les seguirá yendo también igual que siempre. O sea, peor.
    Como clara señal del destino, me ha salido de captcha wC4U (váter para ti). Juro que no es coña.

  13. NeoFronteras:

    Michio Kaku es un magufo con traje cientifista que dice lo que la gente quiere oír. Pero se ríe de todos nosotros cuando mira el saldo de su cuenta corriente.

    O es Dios, porque está en todas partes, en todo documental o programa de TV. Ya sólo le falta aparecer junto Jamie Oliver guisando las lentejas del futuro aderezadas con langostas (de campo).

  14. Tomás:

    Me ha picado la curiosidad. Dice el tal Michio en You Tube que Dios existe porque hay belleza, orden, etc., de ahí al argumento del diseño inteligente que deriva del de Tomás de Aquino, no hay diferencia. Para eso no son precisas las matemáticas. Este señor no es creíble.
    Por otra parte el dicho de S. Carroll que LLuís cita: «Si nuestra mejor troría…» no me parece convincente, ya que haber cómo distingue cual es la mejor teoría si no es posible comprobarla.
    Y me parece que las matemáticas son un lenguaje para describir la realidad; nada más. Lo que pasa es que su acierto al describirla -cuando acierta- se debe a que comienza con una inducción completa.

  15. Tomás:

    Perdón: No «haber» , sino «a ver»

  16. JavierL:

    La matemática según como la veo presenta infinitas posibilidades, sin ninguna distinción de o que puede ser correcto o no… La física siempre la he visto como un muro que se levantó para cortar las matemáticas en un solo pedazo que describe la realidad.

    La teoría de cuerdas la veo como partir de una matemática tan amplia que pueda describir casi cualquier aspecto, los que coinciden con la realidad los presento y los que no digo que si existen pero en otro universo paralelo.

    Y como todo es posible, pero no necesariamente cierto, se enfrentan al problema de ¿cual predicción pueden hacer? … Y al de ¿como falsar la teoría?

  17. lluís:

    Tomás, la teoría de supercuerdas describe pefectamente la gravedad. E. Witten, uno de los padres de la teoría de supercuerdas dijo que: » la teoría de cuerdas tiene la notable propiedad de predecir la gravedad de tal modo que aunque no supieras nada de relatividad general, un físico con la teoría de cuerdas daría con la gravedad, vía gravitón». Y el gravitón surge dentro de la teoría cuántica de campos, de tanto éxito que condujo al Modelo Estándar de la física de partículas.

    Ahora bien, al menos con la tecnología actual y hasta donde sé, no se tiene ninguna esperanza de hallar directamente ( indirectamente se tiene con la supersimetría,pero tampoco parece que el LHC de respuesta alguna) un gravitón individual haciendo chocar dos partículas, dado que la gravedad es una fuerza tan débil (de ahí su «misterio», de ahí las «branas») que los gravitones que se pudieran crear en un acelerador de partículas (es ligero y estable según la teoría y parece que podría generarse) se perderían entre la gran cantidad de partículas que se producirían.

    En cuanto a que hay muchos teorías de cuerdas, pues lo cierto es que se redujeron a cino y sucede que cuatro de ellas, terminan encabidas en una sola teoría, puesto que todas acaban haciendo las mísmas «predicciones». Es un grupo Esub8 (E8xE8) del que se dice que representaría una de las pocas simetrías consistentes posibles que describiría un mundo a través de la supercuerda cuántica.

    De acuerdo,no hay por ahora nada de nada, y es difícil pensar que pueda haberlo más adelante,o quizá una «quinta fuerza» desde hace mucho tiempo buscada por los físicos, podría explicar algo sobre determinadas lagunas gravitatorias (en relación con el gravitón), pero la teoría de supercuerdas está ahí.

    Una cuerda para tí, tomás. Pero no te cuelgues de ella.

  18. NeoFronteras:

    Estimado Lluís:
    Witten dice muchas cosas, entre ellas dijo que dejaba de trabajar sobre cuerdas.

    En cuando a modelos de cuerdas ha habido y hay muchos. Desde hace unos años les ha dado por las branas. Pero da igual, porque tienen la libertad de incorporar cualquier cosa que quieran, sea bajo el grupo de simetría que se necesite, pues este se elige para que las cosas cuadren.

    Pero el verdadero problema no es la cantidad de teorías, sino la cantidad de estados de vacío, son así como 10 elevado a 500 o más. De ahí le viene a estos modelos la capacidad de predecir cualquier cosa que quieran.

    Las cuerdas no son naturalistas, es decir no dicen cómo debe ser el universo porque a este no le queda más remedio que ser así, sino que proponen que el universo puede ser cualquier cosa y que nos toca vivir una realidad en la que se ha elegido una de las opciones. Básicamente proponen un multiverso, un universo para cada estado de vacío. Eso, como teoría física es una chapuza.

    Las cuerdas por no tener no tienen ni estética y bajo el punto de vista filosófico son una decepción. Encima no explican nada que no pueda ser explicado por otras vías y todos sus argumentos se meten ad doc.

    El gravitón no «surge» de la TCC, sino que se introduce en ella como se introduce el resto de las partículas. Básicamente se trataría de partículas de spin 2 y masa nula (algo necesario si queremos que la gravedad sea de largo alcance).

    Los gravitones también pueden existir sin ningún problema sin las cuerdas. Lo mismo le pasa a la supersimetría. Pero si esta no se da entonces las cuerdas fallan estrepitosamente. Y, mira tú por donde, no se han encontrado tales partículas supersimétricas en el LHC. Poner una condición (existencia partículas supersimétricas) y decir que si se da entonces se corroboran las cuerdas, pero cuando no se da experimentalmente la condición se mueve esta condición más allá (se dan, pero a a una energía más alta que no alcanza el LHC) al gusto de los propios cuerdistas para proteger así sus ideas es hacer trampas. Eso se llama no ser honesto. Y nadie se puede fiar de gente poco honesta.

    El problema es que las cuerdas se han convertido en una especie de religión de la que viven muchos departamentos universitarios. La Física teórica ha sido monopolizada por ellas, entre otras cosas porque a los nuevos doctorandos se les obliga a trabajar en ellas, por lo que la doctrina se perpetúa. Renunciar a ellas (en todo o en parte) significaría menos «lentejas».

    Es curioso que funcionen tan parecido a las religiones. Los adeptos son tan fanáticos como los talibanes musulmanes. Las cuerdas son una verdad revelada, no una teoría científica. Pero todo el que ponga en duda las cuerdas será condenado.

    A los proponentes de las cuerdas les falla sobre todo la humildad.

    Son ya más de 30 años de parálisis en Física teórica. Ya va siendo hora de pasar página.

    Saldrían muchas tesis doctorales en sociología sobre este asunto de las cuerdas y otros relativos al mundo de la ciencia en general.

  19. Tomás:

    Querido Lluís:
    Te agradezco mucho que te dirijas personalmente a mí, pero ya sabes lo incrédulo que soy y me convence más la argumentación de Neo.
    De todas formas, te prometo no colgarme de una cuerda aunque tuviera evidencia matemática o/y experimental.

  20. Dr. Thriller:

    Lo de colgarse de una cuerda, depende. Si estoy en una estructura elevada, el suelo va a colapsar, y el techo o cualquier otra cosa resiste, sí que me cuelgo de una cuerda, aunque no sabría muy bien cómo atármela para minimizar posibles lesiones anatómicas, supongo que intentando una forma envolvente tipo arnés de paracaídas o algo similar. Si me puedo ir descolgando por ella estupendo. Ponerla haciendo de catenaria para sentarme no me convence. Digo todo esto porque algunos afamados cuerdistas parece que se han enrocado en algo similar: unos se han colgado, literalmente a lo arnés, estilo Bimbous-me-caí-oh-oh (restart, please), otros se han sentado a lo catenaria, columpiándose unos con gracilidad, lo cortés no quita lo valiente, y otros con un estiolo paquidérmico, y otros… Se han hecho la picha un lío y se han dado muy cuerda y mucha cuerda para ahorcarse. Pero no pasa nada, lo bueno de los mundos platónicos es que son como los dibujos animados, al final lo único que se daña es la credibilidad y en algunas juntas de departamento tener credibilidad es hasta un handicap.

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