NeoFronteras

Globalización y recesiones

Área: Física — miércoles, 13 de octubre de 2010

Según afirman unos econofísicos la teoría evolutiva predice que la globalización aumenta el riesgo de recesión y una vez que ésta llega disminuye la velocidad de recuperación.

Foto
Dendograma que representa los módulos comerciales de un grupo de países en 2007. Los colores representan los distintos módulos. Comparando este dendograma con el de 1969 se puede apreciar un gran cambio.

Los biólogos estuvieron perplejos durante mucho tiempo por la estructura modular en los entes biológicos. Un módulo es una estructura que puede funcionar más o menos independientemente de las otras partes del sistema. De este modo, un módulo puede se por ejemplo un ecosistema, una sociedad dentro de un sistema ecológico, un animal individual, un órgano, una célula dentro del órgano o un gen dentro de la célula. La Naturaleza organiza estos módulos a través de una estructura jerárquica.
La pregunta que surge es por qué esto es así. Hace un par de años Jun Sun y Michael Deem, ambos dos físicos de Rice University, dieron una posible respuesta. Según ellos la modularidad permite a un sistema evolucionar más fácilmente y reducir las posibilidades de que se den colapsos catastróficos debido a algún tipo de influencia externa, como pueda ser un cambio climático o una epidemia.
Mostraron que la modularidad emerge espontáneamente en algoritmos evolutivos que intercambian información y que cambian relativamente despacio.
Ahora, Deem y Jiankui He, también de Rice, aplican esta idea a la red de comercio global. Su hipótesis es que esta red evoluciona de la misma manera que lo sistemas naturales o, al menos, está limitada de la misma manera por el ritmo de cambio. Además está el hecho de que la información fluye por ella.
Esto implica que estructuras modulares de todo tipo deben formarse espontáneamente a todas las escalas a lo largo de esta red. De hecho, esto ocurre y se forman compañías, grupos comerciales, países, etc.
Sin embargo, el proceso de globalización en el cual la economía actual está inmersa reduce esta modularidad, porque fomenta una igualdad de comercio entre entidades en diferentes partes del mundo. Pero en los sistemas que evolucionan de manera natural, una caída en la modularidad lejos de aumentar la robustez del sistema a las perturbaciones en realidad la disminuye. Deem y He hipotetizan que lo mismo está pasando en la red de comerció mundial.
Lo más sorprendente es que esta idea surgió de los datos reales. Estos dos físicos estaban estudiando la naturaleza de varias recesiones a nivel mundial ocurridas desde 1965 cuando vieron que el aumento de la globalización hace a la economía mundial menos estable. Lo que es más, cuando llega la recesión, la recuperación se hace más lenta conforme la globalización aumenta.
La explicación es que la modularidad permite que se forme una jerarquía dentro del sistema que ayuda al mismo a recuperarse cuando llegan las dificultades. Si esta estructura está ausente o está reducida a su mínima expresión, entonces la recuperación es más lenta. La globalización parece desanimar la formación del tipo de grupos comerciales que forman este tipo de estructuras.
Deem y He mantienen que la economía global es realmente más frágil ahora que hace 40 años.
Además hacen una predicción. Dicen que una recesión debería animar la formación de jerarquías, al menos temporalmente. Esto significa que se forman grupos que comercian preferiblemente entre ellos.
Todo esto no parece estar muy lejos de lo sucedido y dados los intentos actuales de la economía global actual por salir de la recesión tampoco debería ser difícil comprobar.

Copyleft: atribuir con enlace a http://neofronteras.com/?p=3268

Fuentes y referencias:
Nota en Technology Review.
Artículo original.

Salvo que se exprese lo contrario esta obra está bajo una licencia Creative Commons.
Compartir »

6 Comentarios

  1. joabbl:

    No me extraña nada este resultado. Todos los sistemas humanos de cualquier tipo están diseñados de forma modular y jerárquica. Y la naturaleza consigue lo mismo por prueba y error. Supongo que la modularidad hace de cortafuegos para aislar los problemas y que el más mínimo inconveniente no se propague de forma incontrolada por todo el sistema. Sería gracioso que un problema en una rodilla provocara un cáncer de páncreas, por ejemplo. Pero la globalización amorfa que padecemos se parece más a un sistema caótico en el que los problemas se propagan de forma impredecible. Antes si había una crisis en una región no se propagaba automáticamente al resto. Además psicológicamente es bueno que haya una jerarquía. Cuando hay un problema sabes quien es responsable de qué y por lo tanto sabemos a quien «echarle la culpa», algo absolutamente humano. Ahora los gobiernos no pintan nada y los organismos internacionales aún menos. No me extraña que los ilusos se apunten a teorías conspiratorias, así al menos daría la impresión de que el mundo está sometido a algún tipo de control, aunque fuese por parte de una raza alienígena.

    Saludos

  2. tomás:

    El artículo expone una consideración muy razonable, pero echo de menos el dendograma de 1969 al que se refiere el pié de la ilustración.
    Un saludo.

  3. NeoFronteras:

    Estimado Tomás, este dendograma y el de 1969 aparecen en el pdf del artículo original, que es de libre acceso. No se pudieron poner juntos aquí por razones de espacio.

  4. lluís:

    A bote pronto se me ocurre que la economía mundial es como un sistema aislado, por tanto sería de aplicación la Segunda ley de la Termodinámica, así que cuando lleguemos al «equilibrio térmico», fin de la historia; a no ser que encontremos pronto alienígenas a quienes venderles productos y servicios o hipotecarlos de por vida.

  5. tomás:

    Estimado lluís:
    También yo sospeché, hace tiempo y sin concreción, lo que comentas, aunque en la forma de que, al igual que es preciso una diferencia de «nivel» para producir energía, quizá fuese preciso una diferencia de riqueza entre los conjuntos o los individuos para aumentar esta. No seguí especulando sobre ello y si lo deseable es que, al menos el bienestar, no el mínimo vital que precisa el capitalismo según Marx, sea general, el futuro deseable se vuelve contradictorio.
    Un abrazo.

  6. Juan Díaz:

    Los Modulos no son casilleros estancos, sino que están interconectados formalmente con relativa autonomia.
    Lo auspicioso es que un organismo internacional pueda asumir el control de la fluidez interconectiva global, y que comunidades autónomas desconocieran a estados y empresas, y a toda forma de control.
    De ese modo, el sistema se sale de control y cálculo predictivo, y se puede conjugar un «caos creativo», lo mismo que episodios moderados de psicosis aumentan la genialidad individual, y redefinen identitariamente al sujeto.
    Al aumentar las contradiciones, emergen crisis curativas no terminales.
    Se trata que el sistema social opere optimizando funcionalmente su complejidad, entonces, necesita autocontradecirse.
    Naturalemente no al puno de guerras fundamentalistas o revoluciones cruentas, porque eso está en otra lógica, la del tánatos y la compulsion agresiva.
    El Sistema puede recurir al juego creativo del arte, la fiesta, el trabajo, el deporte, las crisis bursátiles. El punto es que mientras mas centros independientes de poder haya como contrapeso al poder global central, mientras mas economias informales centradas en comunidades del eros y del ludus, el impulso vital y el instinto de sobrevivencia de las masas se la jugará por «lo mejor» del Sistema, en este caso, el caos creador, y las economias informales y alternativas.

RSS feed for comments on this post.

Lo sentimos, esta noticia está ya cerrada a comentarios.