Si disfrutamos de tomates rojos y jugosos quizás se deba al meteorito que mató a los dinosaurios.
Según una de las teorías más aceptada, un meteorito impactó sobre la Tierra en lo que hoy es Yucatán hace unos 65 millones de años. El impacto eyectó polvo a la atmósfera que se mezcló con las cenizas de los incendios provocados por el impacto. Esto debilitó la luz que llegaba del Sol a la superficie terrestre, sumiendo al planeta en una especie de “invierno nuclear” por las similares consecuencias que tendrían con un intercambio de armas nucleares.
Las consecuencias de esto fueron devastadoras para muchas especies, sobre todo para los animales grandes como los dinosaurios, que ocupaban posiciones superiores en la pirámide trófica. Los mamíferos y aves, sin embargo, aprovecharon las condiciones posteriores de nichos ecológicos vacíos de grandes animales para crecer y diversificarse. (leer más…)