Las adicciones podrían depender de una mutación
Las personas con una mutación que produciría menos receptores D2 en sus cerebros podrían ser más proclives a desarrollar adicciones que los demás, porque tendrían una menor capacidad de aprender de sus experiencias.
Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. La mayoría de la gente suele aprender de sus errores, pero para algunos tropezar en la misma piedra una y otra vez suele ser lo habitual. Según unos investigadores los drogadictos, alcohólicos, y jugadores compulsivos podrían portar una mutación genética que les condicionaría a repetir la misma historia reiteradamente.
Esta mutación limitaría el número de receptores cerebrales de tipo D2, receptores que se suelen activar cuando los niveles del neurotransmisores dopamina caen.
La dopamina es responsable de mediar en las señales cerebrales de placer. Pero, además, la dopamina nos ayuda a aprender. Cuando tomamos una decisión que nos produce placer la dopamina es la recompensa que recibe el cerebro, y esto exhorta al mismo para repetir la elección. Ser privado de esa recompensa debería, teóricamente, activar los receptores D2 y condicionar al individuo a no tomar la misma decisión de nuevo. (leer más…)