Rediseñan y sintetizan el cromosoma III completo de levadura de la cerveza.
La vida en la Tierra se divide en procariotas y eucariotas. Las bacterias y arqueas pertenecen al primer caso. Sus células son las más sencillas y no tienen un núcleo diferenciado. El ADN de sus genomas está “disuelto” en la célula y, como máximo, forma plásmidos circulares. Estas células procariotas no tienen cromosomas.
El resto de la vida terrestre está compuesta por seres eucariotas. Sus células son más grandes y complejas y, además de orgánulos especializados como los mitocondrias o cloroplastos, tienen núcleos diferenciados en los que se guarda el ADN. Ese ADN se organiza en paquetes denominados cromosomas. Cada especie tiene un número fijo de cromosomas y cada cromosoma contiene un tipo de información en concreto. Los cromosomas, además, vienen por parejas y los del mismo tipo intercambian ADN para así facilitar la reproducción sexual. (leer más…)